Autoridades cubanas prevén que el próximo año comience en La Habana, de manera experimental, la implementación del sistema de bicicletas públicas, concebido para fomentar el uso de ese medio de transporte bajo en carbono, publicaron medios oficiales.
Zunilda Parras Arias, directora general del Centro de Investigación y Manejo Ambiental del Transporte (CIMAB) —una de las entidades estatales que acompañan el proyecto— informó que ya se realizó el estudio de factibilidad para el alquiler de los equipos y actualmente se encuentran en proceso de licitación del sistema de gestión.
No precisó si experiencias del sector privado al respecto en La Habana podrán participar en el concurso.
En un principio no abarcará toda la ciudad, habrá una estación urbana, ubicada en el reparto Fontanar, en el municipio de Boyeros, y otras seis cicloestaciones en zonas de la Universidad Tecnológica de La Habana y el reparto Río Verde, dijo la especialista a la Agencia Cubana de Noticias.
Como parte de la estrategia se implementarán otras medidas de desarrollo del transporte como la instalación de cámaras de vigilancia y la habilitación de ciclocarriles.
El análisis de la movilidad en La Habana mostró que, al término de la ejecución del proyecto en 2022, con el alquiler de ese medio de transporte no motorizado se realizarán más de 227.000 viajes diarios.
Claritza Cárdenas de la Vega, directora de la división pasajeros y vialidad de CIMAB, explicó que tomaron experiencias de países como Argentina, España, México, Holanda y Dinamarca, y sirvió como antecedente el programa Ha´Bici, de la Oficina del Historiador de La Habana, en funcionamiento desde hace dos años.
Según la funcionaria, su posible demanda será para distancias promedio de tres kilómetros y medio y por motivos de trabajo y estudio, principalmente.
Las bicicletas a utilizar serán ensambladas por la empresa Minerva, de Villa Clara, a partir de un diseño específico elaborado por el CIMAB, considerando las características de la población cubana.
El sistema de bicicletas públicas es una de las aristas de Neomovilidad, un proyecto financiado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), asumido por la Dirección General de Transporte de La Habana.
Según el Gobierno, Neomovilidad respalda la Política de Ordenamiento del Transporte de Pasajeros en la ciudad que concibe como líneas estratégicas priorizar y reforzar el transporte público colectivo, incentivar el uso del transporte no motorizado, disuadir el uso del transporte individual y privado, y lograr una gestión integral de la calidad del servicio.
Los cubanos critican constantemente al Gobierno por los problemas que arrastra el trasnporte público desde hace décadas. Nuevas estrategias, como la autorización del transporte privado, no han sido alivio suficiente, por los precios de esta opción y las trabas de las autoridades a los transportistas.
Y CAM va en declive. No veo nada sustancioso en este artículo.
Tal vez se está poniendo en sintonía con su nuevo amo Biden, acicalándose para la luna de miel con Raúl?
Dentro de poco anunciarán el nuevo sistema de transporte a base de palanquines.
Amadeus se me adelantó con lo que iba a escribir.
Otro invento cubano que en dos años no existirá. Se robarán las bicicletas, no las repararán porque no "hay piezas", o no hay electricidad en el taller.
Ya los cubanos tuvimos la experiencia de las chinas Forever durante el Primer Período Especial, sin estaciones, sino cada quien con una en la casa que para cargarla hacía falta un levantador de pesas, y sin comida para reponer las energías gastadas. Ahora en el Segundo Período Especial, tendrán bicicletas con estaciones.
Van avanzando . El cubano tiene mucha experiencia en bicicletas de tres ruedas , de dos , de una y a veces de ninguna. La instalación de cicloestaciones es una buena idea sobre todo en época de ciclones para vigilar su trayectoria. Ahora vendrá la necesaria ''disciplina vial en dos ruedas no motorizada'' para lo que el cubano no es muy partidario. Confiar en la fábrica ''Minerva'' de producción inestable, deficiente y discontínua no será la solución. Mejor comprarlas en países tercer-mundistas que su población ha pasado a transportarse en modernas motos eléctricas y de gasolina. Vamos bien, Canelo...
MAS ATRAS QUE LOS CORDALES, VAMOS INVOLUCIONANDO, LLEGAREMOS A EL ARCO Y LA FLECHA