La Embajada de Estados Unidos en La Habana dio la bienvenida al diplomático Timothy Zúñiga-Brown este jueves, quien asume el cargo de encargado de Negocios de la institución en sustitución de Mara Tekach.
"Damos la bienvenida al encargado de Negocios Timothy Zúñiga-Brown, quien asumió su cargo al frente de la Embajada de los Estados Unidos en La Habana el 31 de julio de 2020", publicó en Twitter la sede diplomática estadounidense.
Antes de asumir el actual puesto, Zúñiga-Brown se desempeñó como coordinador de la Oficina de Asuntos Cubanos del Departamento de Estado de los Estados Unidos, cargo que actualmente ocuparía Tekach.
Abogado de padres costarricenses, el actual encargado de Negocios tiene una amplia experiencia y conocimiento acerca del tema cubano, pues trabajó en la Oficina de Asuntos Cubanos y en la Sección de Intereses de Estados Unidos en Cuba a finales de la década del 90, bajo la dirección de Michael Kozak.
También se ha desempeñado en otros países de la región, pues en 2009 ocupó el puesto de encargado de Negocios de la Embajada estadounidense en Nassau, Bahamas y en 2011 fue designado como segundo jefe de misión en la sede diplomática de Quito, Ecuador.
En 2015, tras terminar sus labores en el país sudamericano, se desempeñó como cónsul en Monterrey, México, donde permaneció hasta finales de 2018.
Mara Tekach, muy popular entre algunos sectores de la sociedad civil cubana, se mostró muy activa durante sus dos años al frente de la Embajada norteamericana en la Isla, donde brindó su apoyo públicamente a los medios de prensa independientes así como a los prisioneros políticos y diferentes sectores de la oposición y la ciudadanía.
La prensa oficial le dedicó numerosas críticas, entre ellas un editorial del diario Granma, el órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, donde fue acusada de promover "una campaña de calumnias y descrédito contra Cuba".
En el mencionado texto, publicado en noviembre de 2019, fue señalada por actuar como "vehículo fundamental de atención, orientación y financiamiento de la conducta de José Daniel Ferrer, en clara manifestación de intromisión en los asuntos internos (...) y de abierta instigación a la violencia, a la perturbación del orden y al desacato de las fuerzas del orden por parte de este ciudadano".
Al despedirse del cargo, Tekach pidió a la prensa que "no se deje engañar por el régimen cubano", pues "mientras sus líderes disfrutan de yates y relojes caros, el pueblo hace fila por horas para tratar de conseguir comida y medicinas".
Ares I lo peor fue que no aceptaron ver las pruebas del PPDHC de que Odilia Collazo Valdés (alias Lily), Roberto Hinojosa, Cecilia Arza, Horacio Casanova (quien casi aborta la reunión del Secretariado Nacional del Concilio Cubano que realizamos a tres cuadras de Villa Maristas) a quienes destaparon a raíz de los juicios contra los 75 cuando la llamada primavera negra. En honor a la verdad, cuando esto (1995) Timothy Brown no estaba aun en Cuba pero la funcionaria Robin D. Meyer (a quien echaron de Cuba declarándola persona non grata) fue quien me dijo que no verían esas pruebas porque según ella "no interferían en los asuntos internos de los grupos". Sin embargo, le advertí de que Odilia pasaba informaciones falsas a exilio y ONGs y que recibían a una oficial del G2, pero nada, no entendió. La mayoría de los líderes de La Habana supieron de esas pruebas, se les mostró en casa de Héctor Palacios y sacaron copia. Por lo tanto, el destape durante los juicios de los 75 pudo ser evitado.
Cuando un tipo te sale con un "no se puede hacer nada" es un perfecto burócrata inepto e incapaz.
Y dejando entrar a un seguroso probado a USA, indolente que poco le importa su propio pais.
A ese nivel, y con la experiencia con que lo vende DDC ¿no conoce a nadie en el FBI, la CIA, o la NSA que hubiese hecho algo? Estoy seguro que la Tekach no lo hubiese dejado pasar.
Los cubanos no hacen nada por que no tienen armas ni agallas para iuchar, son guapos de boca la mayoria, se matan entre ellos y a la hora de la verdad corren siempre asido asi unos cuantos luchan y los otros se amedrentan son el hazme reir del mundo
Crucemos los dedos ante la presencia de otro burócrata más del Dpto. de Estado que confió en la ''suerte'' de un esbirro para viajar con residencia permanente a EE.UU.
Es una excelente persona pero nada podrá hacer. Poco después de salir de prisión en 1997 volví a visitar la SINA, lo cual no hacía desde 1995 cuando se negaron a ver las pruebas en poder nuestro, del Partido Pro Derechos Humanos de Cuba (PPDHC), pruebas de que Odilia Collazo y otros que destaparon en 2003 en el juicio contra los 75 eran oficiales de la contrainteligencia infiltrados en la oposición y en esa visita conocí a Timothy Brown a quien le di identidad y dirección del militante del PCC que dirigió la represión desatada por la brigada de respuesta rápida contra los activistas del PPDHC que se presentaron en el tribunal de Arroyo Naranjo cuando me juzgaron ya que el tal militante del PCC se había ganado el sorteo de visas y estaba a punto de viajar a Estados Unidos. Recuerdo que Timothy Brown me dijo que no se podía hacer nada para detener ese viaje porque el sorteo se ganaba por suerte. El problema es de política de USA, no de nuevos o más competentes funcionarios.
Vamos a ver qué hace este zanaco al frente de la embajada. Si en su anterior estancia durante el periodo especial, el maleconazo y la crisis de balseros de los 90 hubiese hecho la mitad de lo que hizo la tekach, ya los castros estarían bien defenestrados y lejos del poder en Cuba.
En fin, con estos bueyes tendremos que arar. La responsabilidad es de los cubanos, con mucha ayuda y apoyo de una tekach o la indiferencia e ineptitud de un Timothy. El problema es de nosotros.