Amplio surtido de carnes, incluyendo piezas enteras de vacuno y picadillo de res, cervezas, vegetales y frutas enlatados, quesos, refrescos, una amplia variedad de productos de aseo personal e higiene del hogar, son algunas de las ofertas que los cubanos encontraron el lunes en los anaqueles de las nuevas tiendas para la venta de productos de primera necesidad en Moneda Libremente Convertible abiertas por el Gobierno en toda la Isla.
Varias personas compartieron en redes sociales imágenes de mercados bien surtidos, donde abundan ofertas que escasean o no se ven hace meses en los establecimientos comerciales que venden en pesos convertibles (CUC).
La corresponsal de Reuters en la Isla, Sarah Marsh, compartió un video grabado desde un auto que cruzó ante la zona aledaña al Centro Comercial 3ra y 70, en Miramar, donde decenas de personas hacían una cola para entrar al establecimiento, uno de los 72 abiertos en Cuba con esa oferta, y donde solo se permiten como medio de pago las tarjetas magnéticas autorizadas en el país, respaldadas con depósitos en divisas extranjeras.
Ante tamaña expectación, la Policía organizó a lo largo del territorio nacional operativos de organización y control de los tumultos, mientras la policía política mantenía sitiados en sus viviendas a una decena de activistas, periodistas y miembros de la sociedad civil independiente, o les cortaba la conexión de datos de sus teléfonos.
En Santiago de Cuba, DIARIO DE CUBA comprobó la aglomeración de personas en las inmediaciones de la TRD La Fantasía, ubicada en la Avenida del Reparto Sueño, donde solo se vendía puré de tomate.
Sin embargo, en la Tienda Gran Piedra había todo tipo de productos, desde espagueti hasta carne de res en MLC. No obstante, para poder acceder al local para ver los precios de los productos en venta era necesario mostrar en la entrada la tarjeta magnética, que los militares y policías presentes exigían.
En La Habana la situación era similar. Las mayores tiendas de la zona de Los Sitios, en Centro Habana, incluyendo Yumurí, Ultra y media docena de las más pequeñas, estaban desabastecidas desde el mediodía del domingo, hora en que cerraron en la jornada anterior.
Mientras, en la zona de Miramar, ante el Mercado El Náutico una larga fila de un centenar de personas era organizada por la Policía a una cuadra de distancia de la entrada. A través de sus vidrieras, no obstante, podía apreciarse lo bien abastecido del establecimiento, que mostraba sus anaqueles llenos de productos.
En el extremo oriental de la Isla, en Guantánamo, DIARIO DE CUBA confirmó que en el complejo de tiendas Los Muchachos había en oferta aceite de oliva a 4.75 dólares el frasco; puré de tomate; espaguetis; fideos; jabón; detergente, entre otros productos ausentes en las tiendas en CUC.
Un hombre comentó que entre lo ofertado había unos paquetes de pollo que tenían "una bandera americana en el naylon" y que traían "como diez o 12 muslos con contramuslos".
"La calidad es superior a la de las tiendas en CUC. Casi nada de eso hay en las TRD", comentó.
Allí la presencia policial y de agentes del Ministerio del Interior uniformados de verde se hacía presente tanto dentro como fuera del comercio.
Las autoridades cubanas anunciaron la pasada semana la apertura de estos comercios con productos "de alta gama", como parte de una serie de "medidas concebidas en la nueva Estrategia Económica y Social dirigida a impulsar la economía y enfrentar la crisis mundial generada por la pandemia".
"En medio del recrudecimiento del bloqueo norteamericano, de persecuciones financieras, de campañas difamatorias, del impacto del nuevo coronavirus y de la propia crisis global, el objetivo de esas y otras disposiciones es contribuir a captar la moneda dura que necesita el país para adquirir bienes y alimentos en beneficio del pueblo, en momentos que también se han afectado seriamente el turismo y las exportaciones", reportó la oficial Agencia Cubana de Noticias el lunes.
No obstante, la reacción de muchas personas en redes ha sido poco entusiasta: "En CUC no hay nada de nada y cuando hay las colas son inmensas y muchas personas no alcanzan el producto. Y el Gobierno dice que no hay materias primas y que por el cierre de fronteras no hay alimentos. Ahora yo me preguntó, ¿de dónde salió todo esto?", escribió Elisa Maya en Facebook.
"¿Por qué ahora en dinero USD [dólares] sí hay de todo? La verdad no entiendo. Tanto que hablan de Estados Unidos, pero ahora hay de todo, ¿pero comprando con la moneda del país que supuestamente nos tiene el bloqueo? (...) El pueblo no se merece esto, porque hay muchas personas que no tienen la posibilidad de comprar en USD. ¿Por qué no ponen todos estos productos en CUC o en moneda nacional?"
"¡El bloqueo lo tenemos aquí!", apuntó.
Asi mismo estaban Caracol, TRD y Panamericanas antes del 2004. Todos los cubanos andaban con dolares en el bolsillo, pero el brillante destructor de países se le ocurrió cambiar los dolares por "espejitos" (digase cuc) para comprar calderos, fogones y grupos electrógenos en china. Y se quedo sin dolares y la gente con un fajo de mierda roja en los bolsillos. Claro, se robó la mitad de lo que había recogido para mantener los viajes de su hijos por el mediterraneo.
Igualito a Walmart!, jijiji
Mi tia Eulalia me escribio: aqui el que no baile al son de la tarjetica, esta jodido. Pobrecita ella no sabe bailar.
Lo que si no me pueden negar es que La China cumplió su prometido: eliminó la DUALIDAD monetaria!
Uds. me sabrán perdonar, pero hasta en la foto del refrigerador lleno de paquetes de carne se aprecia la desorganización. Esos paquetes no están ordenados, sino tirados, amontonados al azar. Hasta en eso son bayuseros estos comunistas. Aquí en USA al empleado de carnicería que ponga así los paquetes de carne en vez de ordenarlos y apilarlos bonitos, lo corren. Seguro. Por eso no lo hacen. Ud. se los encuentra ordenaditos. Pero para que esa forma de comportarse entre en la cabeza de un empleadito cubano, tendrían que caer raíles de punta. Sin embargo, cuando yo era niño los gallegos ordenaban sus bodegas que daba gusto verlas. Hasta eso han perdido, allá la vida es una chabacanería generalizada.