Personal médico de la Ciudad de México que está batallando contra el coronavirus considera que los 585 médicos y enfermeras cubanos enviados por La Habana para apoyarlos no realizan un trabajo sustantivo que justifique lo que el Gobierno mexicano pagará por ellos, informó el diario local El Economista.
Por cada uno de los cubanos México desembolsa mensualmente más de 57.000 pesos mexicanos mensuales (más de 2.500 dólares) cuando los especialistas mexicanos cobran alrededor de 45.000.
Como reveló una investigación de DIARIO DE CUBA, el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI, nacional) y el Gobierno de la Ciudad de México han pagado un total de 6.255.792 dólares por los especialistas. Sin embargo, las autoridades cubanas solo han dado a sus trabajadores 660 dólares para tres meses (220 dólares por mes), como aseguraron una fuente de la brigada médica y otra cercana a esos profesionales.
Los profesionales cubanos llegaron al país el 27 de abril y estarán hasta agosto, lo que se traduce en el pago de alrededor de 2.500 dólares por persona al mes y el convenio podría prolongarse si así lo acuerdan las partes firmantes.
Según el medio local, esta cuestión motivó la inconformidad de personal médico de los lugares en los que fueron ubicados los de la Isla, así como de 12 organizaciones de especialistas que publicaron un comunicado el pasado 13 de junio.
En el documento aseguraron que el grupo está compuesto en su mayoría por médicos generales, sin especialidad.
Consideraron que es "una injusticia" privilegiar a los extranjeros sobre médicos mexicanos que cumplen con todos los requisitos establecidos por la Ley de Profesiones y la Ley General de Salud.
Al respecto, el secretario general del Sindicato Nacional Libre de los Trabajadores del Seguro Social (SNLTSS), Armando Rosales Torres, dijo que "ha habido muchas manifestaciones de inconformidad tanto de trabajadores de la salud, como de asociaciones del sector, pero lo delicado es que no se sabe cuál es su función y las condiciones en las que llegaron al país".
Declaró que sí ha quedado claro "que muchos de ellos no son expertos ni en medicina interna, ni en la atención a pacientes con Covid-19".
Por su parte Francisco Julián Martínez Maldonado, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores de la Salud por México (UNTSM) y enfermero del Hospital de Xoco, dijo que los médicos cubanos "solo son conocidos porque se presentan a tomar la temperatura a los empleados del hospital y porque los ven en la zona del comedor, pero nada más".
Martínez relató que hace unos días llegó una paciente al área de urgencias justo cuando estaban allí dos de los médicos cubanos. Una enfermera les pidió apoyo para que valoraran a la persona, pero no quisieron y lo que hicieron fue retirarse.
A su vez Joseline González, enfermera del área del área Covid-19 de la misma institución médica, dijo que al personal cubano solo se le ve en el 7-Eleven que está junto al hospital, porque no suben al piso en donde están los pacientes con coronavirus.
"No son especialistas. De hecho, no saben tomar gasometrías (toma de muestra de las arterias), por lo cual no se sabe exactamente cuál es su labor, pero asisten desde hace varias semanas", añadió.
Las opiniones contrastan con la de la secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, quien defendió que los profesionales cubanos brindan asesoría, capacitación, intercambio de buenas prácticas, atención directa, seguimiento epidemiológico y monitoreo de campo.
Comentó que se trata de personal calificado, "profesionales de primera" y en el grupo hay especialistas que trabajan en las áreas de terapia intensiva, así como de enfermería, epidemiología e ingeniería biomédica.
Justificó que en la capital mexicana hay un déficit muy importante de personal médico y paramédico. En ese sentido dijo que está abierta una convocatoria para contratar 325 médicos, 1.000 enfermeras y 135 especialistas.
Según la funcionaria, un médico con especialidad en Ciudad de México gana unos 45.000 pesos aproximadamente y no llegan o no quieren trabajar con el Covid-19.
En una entrevista de radio, rechazó que el personal cubano esté desplazando a los mexicanos y reiteró que hay una demanda creciente de personal.
La exportación de servicios profesionales, fundamentalmente médicos, es una de las principales fuentes de ingreso del Gobierno cubano, que se queda con al menos el 75% de lo que pagan los países de destino en concepto de salarios. En 2018 esta actividad generó ingresos de 6.400 millones de dólares a La Habana, muy por encima del turismo.
Además de tener que entregar como mínimo las tres cuartas partes de sus salarios, los profesionales de la salud cubanos enviados a misiones en el exterior son sometidos a una fuerte vigilancia y restricción de libertades fundamentales.
Estas condiciones han sido denunciadas por organizaciones defensoras de derechos humanos y la ONU ha advertido que podrían constituir formas de "trabajo forzoso" y "esclavitud moderna".
A inicios de junio DIARIO DE CUBA pudo confirmar que al menos una doctora, residente en Mayarí, Holguín, escapó de la misión en Ciudad de México.
A los destinados a la capital mexicana se suman otros 108 profesionales de la salud de la Isla que se encuentran desde el 21 de mayo en Veracruz como parte de un contrato diferente.
Proponer contratos a gobiernos locales parece ser la nueva estrategia del Gobierno cubano para vender los servicios de los médicos. Lo ha hecho ya en Perú, en la región italiana de Lombardía, e intentó hacerlo con comunidades autónomas españolas como las de Valencia y Cataluña.
La prensa oficial cubana ha dado amplio destaque al trabajo de los médicos en Lombardía y en el principado de Andorra. Sin embargo, pese a las dimensiones de la brigada enviada a México (casi 700 profesionales entre la capital y Veracruz), la cobertura en este caso ha sido escasa.
''Solidaridad'' castro-comunista de un viejo camaján vestido de charro mexicano con un criminal esbirro dictador vestido de general payaso.