"Ante las expectativas inducidas por el aparato de propaganda oficial cubano de que la alianza con Rusia mejorará el consumo nacional", el laboratorio de ideas Cuba Siglo 21 se pregunta en su más reciente dossier si esta "¿fortalecerá en realidad a la sociedad cubana —su economía, seguridad nacional y gobernabilidad interna—" o si los "pasos que viene dando la oligarquía cubana junto con (Vladimir) Putin la pondrán aún más en precario?" e implicarán más sacrificios para los cubanos.
En su dossier Cuba 2023: ¿Sacrificarnos por Putin?, de la autoría del general Rafael del Pino, Cuba Siglo 21 trae al presente la conversación entre Yuri Andropov y Raúl Castro, el 29 de diciembre de 1982. El entonces líder de la URSS dejó claramente establecido que su país —la segunda superpotencia mundial en aquel momento— no se involucraría en la defensa militar de Cuba.
"Nosotros combatir en Cuba no podemos. Sencillamente porque ustedes están a 12.000 kilómetros de nosotros […] ¿Ir allá para que nos partan la cara? ¡No!", le contestó Andropov a la petición de Raúl Castro de que la URSS hiciera público su apoyo incondicional a Cuba en caso de una agresión de Estados Unidos.
"El análisis de ese intercambio entre Andropov y Castro hace cuatro décadas permite también identificar los probables objetivos reales detrás de acciones como la visita del barco de guerra de la Flota del Báltico a Cuba y los crecientes llamados a Putin por medios, instituciones y 'expertos' afines al Kremlin para que establezca una presencia militar importante en la Isla", señala la organización con sede en Madrid.
El autor del dossier demuestra las numerosas ocasiones en que, primero la URSS y luego Rusia, "han involucrado a Cuba en actividades de alto riesgo convenientes a sus intereses estratégicos, para más tarde tomar de forma unilateral la decisión de dejar desprotegida la seguridad de la Isla".
Al centro de su investigación está siempre la pregunta de "si los cubanos una vez más correrán riesgos y pagarán sacrificios por un aliado tan poco confiable, al margen de lo repudiable de sus intenciones actuales", en referencia a su guerra en Ucrania.
Del Pino también examina diversas situaciones históricas en que Washington ha logrado disipar amenazas de los gobiernos de Cuba, Rusia y Siria, al "combinar de manera equilibrada la diplomacia secreta junto a diversas acciones punitivas, incluidas las militares".
Según Cuba Siglo 21, "hay una diferencia cuantitativa y también cualitativa que Moscú se propone realizar en esta ocasión", en comparación "con la operación de Jrushchov en 1962 que pretendía lograr de forma abrupta una paridad nuclear con Estados Unidos adquiriendo la capacidad de asestarle un primer golpe demoledor".
"La idea de estabilizar un flujo de visitas de navíos rusos con armas nucleares es la de permitirle a Putin hacer un chantaje nuclear creíble. Putin, que ha manejado teatralmente su papel de actor irracional para amenazar a Europa con el uso de armas nucleares si la OTAN no cesa su apoyo a Ucrania, ahora intentaría llevar esa y otras demandas a Estados Unidos sentándose a sus puertas como una suerte de Bin Laden con un chaleco de explosivos nucleares", añade la publicación.
El autor del dossier señala que ahora "para eso no hace falta la masiva movilización de recursos de 1962 sino la presencia continua en Cuba de al menos una nave con capacidad de lanzar un ataque nuclear limitado, pero que provoque daños intolerables".
En otro momento, el general Del Pino considera que "Cuba ha optado por ser un país beligerante del lado del agresor en una guerra europea, donde Putin ha sido declarado criminal de guerra y contra el cual el tribunal Criminal Internacional de La Haya ha emitido una orden de arresto". Para el autor, "esto cambia el contexto en que se desarrollaban y percibían como 'normales' ciertas actividades de influencia desarrolladas en el pasado por personas afines al régimen cubano dentro de Estados Unidos a partir de ahora deben ser percibidas y tratadas con la severidad que se le aplica a la actividad enemiga en tiempos de guerra".
"En este nuevo escenario en que Cuba ha pasado a ser una estrecha aliada del país agresor de Ucrania, las actividades de espionaje electrónico compartido (SIGINT) desarrolladas por Cuba con apoyo de Rusia durante muchos años constituyen ahora un acto de guerra, en tanto las tropas rusas en Ucrania pueden operativizar de inmediato las informaciones obtenidas para su beneficio y provocar la muerte de miles de ucranianos", añade.
"La producción de inteligencia estratégica distingue entre lo posible y lo probable. Un escenario como el que aquí se analiza es posible y en Moscú ya tiene un coro de voces reclamando su materialización. Cuba Siglo 21 considera que la probabilidad de que se haga realidad crece de forma directamente proporcional a las derrotas militares de Putin en Ucrania", dice el laboratorio de ideas.
"La Física Cuántica estableció en su campo que el observador puede alterar lo observado con ese ejercicio. En ciencia política identificar una posibilidad y someterla a debate puede alterar las probabilidades de que llegue a materializarse. Si tan solo fuera por esa razón nos sentimos complacidos de abordar el importante tema que recoge este Dossier", concluye.
Los que hemos seguido las andanzas de Moscú con La Habana --en especial los días de octubre del 62-- sabemos de los numerosos escenarios en que los mandatarios del régimen en Cuba no han tenido respaldo de los rusos en sus "aventuras militaristas", de cómo los rusos han dejado a Cuba "colgada de la brocha", como dice Del Pino. Este acercamiento de Rusia ahora, siempre he pensado es a conveniencia de Moscú, y el trabajo del general Del Pino lo explica bien. No hay solidaridad con la "isla de la libertad" ni las latas de carne rusa van a llover en la mesa de los cubanos enviadas por los oligarcas rusos, y de los militares mucho menos --estos están para usar a Cuba por su proximidad a las costas de EEUU en su confrontación con Occidente, como la visión militar de Del Pino bien lo detalla. Raúl Castro y Díaz-Canel S arrastran a la población cubana al centro del conflicto bélico europeo, en una alianza que no va a propiciar mejoras económicas a la isla, sino solo el respaldo a su poder.
Después de instalada la base rusa, el chantaje ruso sería: si dejan de ayudar a Zelenski quitamos la base de Cuba.
Todo esta relacionado con la guerra Rusia- Ucrania.