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Opinión

Guerra global y agonía de la democracia

En la tarea de desgaste de Occidente, Vladimir Putin aparece como una pieza estratégica de enorme importancia para China.

Oldenburg
El ministro de Defensa de Alemania (der.) en un tanque del modelo enviado a Ucrania.
El ministro de Defensa de Alemania (der.) en un tanque del modelo enviado a Ucrania. AP

Ucrania debe ganar. Ucrania no puede perder, Rusia no puede ganar. Perder y ganar: los dos verbos preferidos cuando se trata de opinar sobre la guerra de anexión desatada por el imperialismo ruso en Ucrania. ¿Pero se ha preguntado alguien qué es lo que significa ganar (o perder) una guerra? Las opiniones, seguro, pueden divergir. Preguntemos entonces a quien sí sabía de guerras. Nos dice Clausewitz: "La guerra es un acto de fuerza para obligar al adversario a acatar nuestra voluntad".

El ganador de la guerra, según Clausewitz, será quien logra imponer su voluntad al adversario. Debemos entonces precisar qué es la voluntad. Bien, la voluntad si no es un deseo, proviene de un deseo (y a veces como negación del deseo). De ahí que ahora nos vemos obligados a precisar cuál fue la voluntad o deseo de Putin al invadir a Ucrania.

Vamos a dejar pasar las versiones proputinistas de sus aliados —sobre todo de izquierdas— en América Latina y Europa, a saber, que la guerra fue llevada a cabo para impedir la ampliación de la OTAN, desmentidas por el mismo Putin quien nunca declaró que ese era el motivo que lo impulsó a invadir a Ucrania. Por el contrario, así como en Mein Kampf Hitler dijo de modo clarísimo que su deseo era erradicar a los judíos como raza, Putin dijo, aún más claro que Hitler (en su conocido ensayo de 2021) que Ucrania por razones geográficas, históricas, culturales e incluso raciales (!!), pertenece de modo natural a Rusia, y luego su deseo —eso lo deduce hasta un idiota, siempre que no sea de izquierda— era anexar a toda Ucrania. Así lo demostró el mismo para que, incluso a la izquierda, no le cupieran dudas.

En su primera avanzada que suponía no iba a durar más de tres días, Putin hizo enfilar a sus tropas directamente hacia Kiev con el objetivo de decapitar al Gobierno de Zelenski, apoderarse del Estado, y con ello, de toda la nación ucraniana. En esa ocasión, el filósofo y político canadiense Michael Ignatieff, escribió: "El objetivo estratégico de Occidente en esta guerra debería ser preservar el Gobierno de Zelensky. Al salvar al Gobierno, Occidente puede salvar a Ucrania. Cualquier esfuerzo ruso para acabar con el Gobierno de Zelensky debería ser la línea roja de Occidente". Dicho lo mismo al revés: si Zelenski no es derribado por Putin, Rusia ha perdido la guerra.

En efecto, el hecho de que todavía no logre apoderarse de toda Ucrania puede ser considerado por Putin como una derrota, y, por lo mismo no hay nada que nos diga que alguna vez el dictador ruso va a renunciar a su psicótico deseo. Esa es, entre otras, una de las razones por las que Putin se niega a establecer algún tipo de negociación que lleve a una paz pactada. Hasta ahora, pese a uno u otro éxito militar, Putin, según Clausewitz, estaría derrotado; no ha logrado imponer su voluntad. Es por eso también que la guerra a Ucrania ya es una guerra larga. Y será aún más larga.

Pero, aunque Putin es malvado, no es tonto. Captando rápidamente que su voluntad no podía ser impuesta de inmediato, decidió cambiar de objetivo (o de deseo) en el mismo curso de la guerra. La marca histórica de ese cambio fue trazada en los Juegos Olímpicos de Beijing donde, además de jurarse amistad eterna, los dictadores de China y Rusia declararon permanecer unidos contra Occidente, entendiendo por Occidente a EEUU, Europa y todas las democracias de la tierra.

Rusia y China contra Occidente

En ese propósito, China y Rusia persiguen distintos, pero a la vez coincidentes intereses. Para Putin, lo principal es devolver a Rusia su supuesta grandeza destruida originariamente por los bolcheviques y después por Gorbachov, al intentar hacer entrar a Rusia en "la casa europea". La grandeza de Rusia, de acuerdo a Putin, es religiosa, militar y, no por último, territorial. De acuerdo a esa otra narrativa, Ucrania no es una meta, es solo un medio para alcanzar la meta, y esta no es otra sino la derrota militar de Occidente.

Xi Jinping busca también la derrota de Occidente, pero no por motivos ideológicos como Putin. Lo que a la clase dominante china dirigida por Xi importa, es lograr la hegemonía económica y política de China (la cultural no le interesa) en el espacio mundial. Hay hechos que favorecen a ese objetivo. Por ejemplo, en guerras como las que tienen lugar en Ucrania, en Gaza, más otras que ya están por venir, Occidente en su conjunto terminará, si no derrotado, muy debilitado. Por esa razón, China trabaja para crear un frente antioccidental de naciones, sobre todo en el llamado Sur Global (heredero del Tercer Mundo de Mao). Naciones que, endeudadas económicamente, pasen de clientes económicos a convertirse en clientes políticos. De hecho, Sudáfrica, Brasil, e incluso India, ya lo son. En esa tarea de desgaste, Putin aparece como una pieza estratégica de enorme importancia para Xi.

A ambas naciones, Rusia y China, se suma Irán. Haciendo un paralelo (no una analogía), así como Hitler logró construir una triada junto con Italia y Japón, China ha logrado construir otra triada junto con Rusia e Irán (a Corea del Norte no la incluimos pues no pasa de ser una fábrica de armamentos de China). De hecho, más que a China, vemos a Irán como el aliado más cercano de Rusia. La razón es obvia: tanto los monjes de Irán como Putin y su camarilla comparten un mismo odio a Occidente y a lo occidental. Ambas dictaduras han elevado sus respectivas religiones a ideología oficial de Estado. Ambas ven en las libertades de Occidente, sobre todo en las sexuales, signos de decadencia y degeneración. Ambas practican un nacionalismo extremo. Ambas ejercen dominación en sus regiones colindantes. Ambas son propietarias de bombas atómicas. Ambas practican una economía de guerra. Ambas son radicalmente antidemocráticas.

Ahora bien, no todos esos "valores" son compartidos por China. El desarrollo económico de China es dependiente de Occidente. Sea como proveedor tecnológico, sea por sus grandes mercados o por las insaciables masas consumidoras occidentales, la economía china no puede prescindir de Occidente. China, a través de Xi, desea la subordinación de Occidente, pero en ningún caso su desaparición. La economía china al fin es hija de la globalización y esta, sin las economías occidentales, no funciona.

Las relaciones de cortesía que suelen practicar Xi y Biden no obedecen por tanto a ninguna simpatía personal, sino a intereses mutuos e imprescindibles para ambos países. Xi, por cierto, está dispuesto a acompañar a Putin, pero no más allá de la puerta del cementerio. Y a pesar de que evidentemente brinda apoyo logístico a su socio ruso, Xi ha dejado muy claro que China no se dejará embarcar en ninguna aventura atómica. Quizás tuvo razón Kissinger, cuando de modo casi póstumo dijo que la amistad ruso-china no podrá mantenerse durante mucho tiempo. No sabemos si Putin es consciente de esa posibilidad. Presumimos que sí. No obstante, por el momento, en sus criminales sueños de grandeza, Putin necesita de China tanto como Xi necesita de Rusia.

Si Ucrania llegara a "ganar" la guerra, China cuando más sufriría un revés, nunca una humillación, y en ningún caso una derrota. Lo importante para China es que de esa guerra Occidente emerja, sino derrotado, muy desgastado, lo que evidentemente sucederá. A partir de una derrota occidental en Ucrania, China podría incluso atreverse después a jugar la carta Taiwán, posibilidad que está en pleno conocimiento de Biden. Esa, y no solo el afan democrático, es la razón que explica el notable apoyo militar norteamericano a Ucrania. Una derrota de Occidente en Ucrania dejaría a EEUU muy mal parados frente a China.

Visto desde una perspectiva inversa, hay que convenir en que, al parecer, el deseo inmediato de Putin por apoderarse de Ucrania ha sido desplazado por un deseo mayor: poner en jaque a todo Occidente, convirtiéndose así en el personaje que dicta las condiciones en la que ya se prevé va a ser, si no la Tercera Guerra Mundial, la primera guerra global en la historia de la humanidad.

De acuerdo a su tortuosa visión, Putin, si no ha sido el principal instigador en la guerra de Hamás a Israel (seguramente lo es), es el gran beneficiado. Por un lado, abre un nuevo flanco contra Occidente representado en el Oriente Medio por Israel. Por otro, desgasta militarmente a EEUU. Y no por último, estrecha sus relaciones con Irán frente al enemigo común. El siguiente paso —ya lo está dando mientras escribo estas líneas, en su visita a Arabia Saudí y los Emiratos— es perfilarse como el principal defensor de los intereses islámicos en contra del "imperialismo norteamericano", al mismo tiempo que coopta a las dinastías y dictaduras árabes como proveedores energéticos para la economía de Rusia, convertida —esa es su otra gran ventaja— en economía de guerra, algo que no pueden permitirse las democracias occidentales frente a sus respectivas ciudadanías. Si tenemos en cuenta, además, el creciente apoyo que recibe Putin de los gobiernos autocráticos y nacionalistas europeos, cuyo número aumenta y seguirá aumentando tanto en la UE como en la OTAN, sería engañarnos si no pensáramos que en estos instantes el combatiente que cuenta con las mejores cartas geoestratégicas, militares, e incluso políticas, es Rusia y no Occidente.

Putin necesita de la guerra como un drogadicto de la droga. Sin esa guerra a Ucrania, o a cualquier país (ahora está amenazando a Letonia) solo sería el presidente de una nación de segunda categoría, o de un país que, más allá de Moscú y Petrogrado, no es más que pobreza y barro. Una nación, en fin, exportadora de gas y petróleo barato. Solo en guerra Rusia puede ser potencia. Sin el peligro de una guerra global, Putin sería solo lo que es: un miserable y corrupto dictador.

Tiene entonces razones Putin para prolongar el estado de guerra, y si es posible, hasta el infinito. El "punto muerto" o guerra de posiciones que está Putin imponiendo en Ucrania concuerda con su plan (y con el de China) de erosionar militar y económicamente a los países occidentales. No pocos observadores creen que Putin prolongará sus operaciones en Ucrania hasta que, eventualmente, sea elegido Trump. Después podrá enfilar hacia Moldavia y/o los países bálticos.

¿Una eventual combinación Putin-Trump?

Si se da la eventual combinación Putin-Trump, la democracia norteamericana podría perfectamente pasar a su fase de agonía, arrastrando consigo a otras democracias occidentales en las cuales ya está imponiéndose el autoritarismo antidemocrático como forma preferencial de gobierno. Recomiendo en ese punto leer con mucha atención el artículo (en verdad, es un ensayo) de Robert Kagan, titulado "Una dictadura de Trump es cada vez más inevitable"  para que, por lo menos nadie diga después: "No lo imaginábamos".

Ya los trumpistas norteamericanos están haciendo lo posible para frenar el apoyo militar de EEUU a Ucrania. Si Trump resulta nuevamente elegido, piensan muchos, Putin estará más cerca de sus metas que nunca. "Trump abandonará a la OTAN", nos advierte Anne Applebaum: "Una vez que Trump haya dejado claro que no apoya a la OTAN, todas las demás alianzas de seguridad de EEUU también estarían en peligro. Taiwán, Corea del Sur, Japón e incluso Israel pensarían que ya no pueden contar con el apoyo automático de EEUU. Es posible que el fin de la OTAN no les afecte directamente, pero su desaparición indicaría que todo el mundo, en todas partes, tiene que asumir que EEUU ya no es un aliado fiable".

Sin embargo, nadie sabe de modo exacto lo que puede pasar en el mundo si regresa Trump a ocupar el Gobierno norteamericano. Todos contamos, claro está, con que Putin habrá ganado un nuevo y antiguo amigo. Pero quizás el problema sea más complejo. Trump no solo es amigo de Rusia y enemigo de la OTAN y de los demócratas europeos. Evidentemente se encuentra muy cerca de los gobernantes y políticos europeos que no están dispuestos a apoyar más a Ucrania, todos, como Trump, partidarios de formas antiliberales de gobierno.

Si la situación de Ucrania es hoy difícil, su definitiva derrota como nación europea, independiente y soberana, puede que sea sellada bajo la eventualidad de un nuevo Gobierno de Trump. Por otra parte, y esto debe ser también tomado en cuenta, Trump, un aislacionista extremo, un político que ha hecho de la antiglobalización una doctrina es, por lo mismo, radicalmente antichino. Así al menos demostró serlo durante su mandato. A la vez, China es aliado de Rusia. En ese caso, bajo un Gobierno Trump, todos tendrían que elegir de nuevo. Rusia, entre China y EEUU. China, entre si vale la pena seguir apoyando a una Rusia aliada con EEUU o concentrar toda su atención en defenderse frente a Trump. Y Trump, entre cambiar su política aislacionista hacia China y proteccionista hacia EEUU por una de reconciliación entre dos gigantes económicos antidemocráticos. Nada de eso podemos saberlo de antemano.

Lo que sí podemos saber es que estamos situados frente a dos confrontaciones decisivas para el curso democrático del planeta. Una es la que libra Ucrania contra el imperio ruso en representación de todas las naciones democráticas del mundo. De acuerdo a la actual correlación de fuerzas, Putin no logrará apoderarse de Ucrania. Pero a la vez Ucrania no logrará tampoco expulsar definitivamente a las tropas rusas de su territorio. Por eso la consigna que todavía mantienen en alto algunas democracias europeas es hoy más modesta pero también más realista que la de antes: ya no es "Ucrania debe ganar", sino "Ucrania no puede perder".

La otra gran confrontación tendrá lugar en EEUU. Si el proyecto, si no dictatorial, autocrático de Trump logra imponerse, podría suceder que EEUU y no Rusia, tampoco China, llegue a convertirse en el epicentro político mundial de muchas autocracias, entre ellas las europeas y las latinoamericanas (Milei sería solo un pequeño anticipo). Quiero decir, no solo Ucrania está en vías de perderse. Junto con ella, la democracia, como ideal de gobierno y modo de vida, podría, poco a poco, desaparecer de gran parte de la tierra, por lo menos durante un largo tiempo.

Sería esa, la que viene, no solo la hora de Trump, también la de Erdogan y Orban, la de Hamás y los monjes persas, la de Le Pen, Wilders y tantos más que esperan el nuevo momento trumpista para coordinar el poder en contra de las democracias occidentales.

Ese mundo, el que nos promete Trump, seamos honestos, ya no es solo una distopía literaria. Es algo peor: es un mundo perfectamente posible.


Este texto apareció originalmente en el blog Polis. Se reproduce con autorización del autor.

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29 comentarios

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El naufrago acefalo con trastorno de personalidad que se esconde detras de un pseudonimo para ofender asume que marzo-abril significan 7 dias desde el comienzo de la guerra el 24 de febrero de 2022.
Teniendo en cuenta que el 2022 no fue un ano bisiesto, el calculo de entrada es incorrecto, pero como tampoco nunca dije que las conversaciones se iniciaron 7 dias despues de comenzar la guerra, la mentira es doble. Como esta mas interesado en tratar de ridiculizar que en debatir y/o exponer sus opiniones, dice lo que dice como si de verdad fuera superior moral e intelectualmente.
Otra cosa. Lo mas grande que tiene un hombre es su palabra y tu evidentemente careces de ella.

Viniendo de ud. me halagan tan precisos calificativos, me imagino el enorme esfuerzo mental que le costó pensarlos, lo cual no es mi problema, entiendo muy bien que no se le puede pedir al marabú que produzca guanábana.
No Obstante no se celebraron negociaciones con Estados Unidos y Ucrania entre Marzo - Abril del 2022, la Invasión rusa comenzó el 24 de Febrero de ese propio año y como UD bien dice 2022 no fue bisiesto, por lo que tenemos 4 días hasta comenzar marzo fecha en que el Ejército Ruso atacaba sin piedad Ucrania, y Vladolf Putler exigía que el ejercito Ucraniano se rindiese, guste o no a UD. Y condicionaba el cese de las acciones a la cesión de los territorios ocupados y el cese del Gobierno.
Así que infórmese mejor y no se haga el inteligente ni el guapo conmigo que sé perfectamente que tiene varios Cafres entre sus antepasados y además es un guayabito de caño, que no pudo ir al Servicio Militar por tener los pies planos.

Deja de ladrar que no asustas a nadie. Todo eso lo puedes averiguar personalmente pero ya se que te faltan pantalones para semejante cosa.
Sigue escupiendo tu bilis y tu ignorancia. Para mi no eres mas que un insecto afeminado.

Conclusión del Sr. Fernando Mires:
La IV Internacional antidemocrática ahora no Internacional comunista, integrada por países de tercera clase y organizaciones terroristas árabes incluyendo a Irán, lidereada por China, Rusia ( con su gran poderío militar) + USA, cuando Mr. Donald Trump se convierta en el nuevo Dictador, sepultarán la democracia mundial.
Una retahíla de acontecimientos imaginados muy lejos de la realidad, porque Rusia no es la ex-URSS Turquía no es propiedad particular del Sr. Erdogan, Hungría a pesar de Orban y Polonia, los tres son países de la OTAN, y la plaga de Sultanes, Jeques y Ayatollahs que no tienen poder militar para semejante union. Y China como gran potencia no tiene aliados sino intereses y muy precisos. Más allá de ser muy imaginativo el Sr. Mires no tiene ningún talento como Pitoniso.

En realidad los mosquitos no tienen cerebro o por lo menos lo que usan en función de este no les sirve y por lo tanto se concluye que interpretar no es el fuerte de los mosquitos, Nunca hubo tal propuesta de parte Putin de detener los combates a los Siete días con la mediación de Turquía, la propuesta Rusa era detener los combates en el territorio ocupado y que Los Estados Unidos y la OTAN dejarán de apoyar a Ucrania. Excelente propuesta para finalizar la guerra... pero los malos Ucranianos, y los peores Estados Unidos e Inglaterra rechazaron la muy bella propuesta de Paz de Vladolf.

...los señores herpes y robinson deberian enrolarse en esa legion extranjera de Zelensky...con lo atrasado y debil que es el ejercito de Putin seria ganarse un dinero facil a la vez que hacen un poco de turismo... aprovechen...y parece que el problema de Putin en Ucrania es que no se adapta a las doctrinas militares de los USA e Israel...si usara bombas atomicas humanitarias para no prolongar la guerra como hicieron los USA en Hiroshima y Nagasaki ya se hubiera resuelto el problema...si Putin hubiera bombardeado Kiev con el mismo entusiasmo con que Israel bombardea Gaza ya se hubiera resuelto el problema...brutos que son los rusos esos...

Profile picture for user Newton

Tu deberias, plasta de mierda comunista, enrolarte en la "legión victoriosa" de Putin (que no lograr ganar la guerra) y dejar de defender a la dictadura habanera desde las heroicas trincheras de la Ciudad de Mexico, pendejo sumiso.
Putin no tiene con qué bombardear Herrera Carles, solo las yeguas prosovieticas como tu se creen eso.

Bueno, es preferible tener el cerebro de un mosquito antes que no tener ninguno y encima creerse espiritista.
Que Biden, Johnson y el payaso de Zelenski rechazaron el acuerdo para un cese al fuego, con la mediación de Turquía, es un hecho que cualquier persona con un mínimo de información aceptará a no ser que sea un subnormal.

José Antonio Vizner TV en una de sus publicaciones en Youtube crea toda una teoría conspiranoica donde afirma eso que alguien repite aqui como una letanía japonesa del teatro Kabuki, que Zelensky es un payaso y que la guerra se prolonga todavía porque :
En marzo Abril del 2022 , nada menos Putler llamo a parar la Guerra pero ni Biden ni Zelensky aceptaron.
Marzo 2022 o sea a los 7 días de haber comenzado dicha guerra, justamente cuando Putin exigía la rendición incondicional del Ejército Ucraniano, Hay que tener el cerebro de un mosquito para repetir semejante estupidez.

Pienso que algunos aquí alguna vez se enteraran que las teorías de conspiración y la deformación de la agenda global 2030 con la sarta de pendejadas que quieren decir que está Agenda de la ONU Dice pero que no dice por ninguna parte. No es política real ni tiene nada que ver con esta.

Como siempre la Sandalia Cubana de madera repitiendo estupideces de las páginas creadas por la propaganda Rusa, quizás algún día entienda que la cabeza además de pelo porta inteligencia.

Profile picture for user Newton

Los esbirros no tienen inteligencia…si la tuvieran no serían esbirros.

Otra pifia de Mires, es decir que Rusia está pretendiendo tener un conflicto con Letonia, sin tener en cuenta que Letonia es un país de la OTAN cual sería una declaración de Guerra a Europa pero mi objetivo es otro, no enmendarle la plana al profesor, Sino dejar claro que el Sr Mires ha creado una teoria de una guerra global que no existe. Putin es un alto oficial de Inteligencia formado y educado en los tiempos del comunismo triunfalista e inclaudicable, por lo tanto sus percepciones de la realidad rusa del siglo XXI eran erróneas, en lo que respecta a las verdaderas capacidades militares rusas y en esa apreciación falsa se basaron sus cálculos políticos - militares en la titulada " Operación Militar Especial" que se le convirtió entre las manos en una guerra mundial que, ya dura dos años. hay una realidad, Ucrania no está perdiendo la guerra pero Rusia no la está ganando y exhibe un bajo desempeño para ser el así llamado 2do. Ejército del mundo.

Cuando Vladolf Putler ordenó la invasión a Ucrania el 24 de febrero del 2022 en la declaración al efecto, dijo : que los enfrentamientos entre las fuerzas ucranianas y rusas son inevitables y sólo es cuestión de tiempo " La expansión de la OTAN y el desarrollo militar del territorio de Ucrania por parte de la Alianza son inaceptables para Rusia", lo demás que se publicó después para justificar la Invasión del vecino como el pretexto de desnazificar ia Ucrania y las reivindicaciones históricas de propiedad rusa sobre Ucrania aparecieron después, cosas todas que el Sr. Mires se deja en el teclado. incluso Putin mostró un mapa histórico en el cual Ucrania no existía, sino como parte de los territorios de la Rus de Kiev.
La cita del General Klaus von Clausewitz que dice que la guerra es para imponer su voluntad contra la otra parte está sacada de contexto y no se aplica a esta guerra con mucho se aplicaría que la guerra es la continuación de la política por otros medios.

Profile picture for user JCAleman

Lo que no entienden los socialistas (anti)democráticos, o tal vez si, pero lo enmascaran, es que la democracia occidental será destruida desde adentro por los lobos disfrazados de ovejas justicieras, igualitarias y progresistas.

Rusia, China, Irán y los otros bárbaros entrarán en Roma no por su propio poderío sino por el enfrentamiento interno y la degradación de occidente, y lo harán de la mano de intelectualoides resentidos que también serán arrasados por esos con los que ahora coquetean.

Creo que el señor Mires no ha entendido nada.
Y decirle, además, que ya los artículos no deben ser tan extensos porque el lector no pasa de la primera parrafada.

...en este enlace...https://www.elmundo.es/inte… ...ademas de la noticia de un español muerto en Ucrania luchando contra el comunismo de Putin viene importante informacion sobre los pagos , requisitos y tramites necesarios para enrolarse en la legion extranjera de Zelensky...me parece una buena informacion para que esos que quieren salvar al mundo occidental de la barbarie ruso china se unan a la cruzada de la libertad y la democracia...quien se apunta???...aceptan hasta los 60 años...

Profile picture for user Newton

Plasta de mierda comunista. El “enlace” que usaron tus compatriotas para reclutarse fue otro, está en la página del MINFAR. Es raro Herrera Carles que tú no te hayas apuntado para irte a defender a los rusos, a los cuales les olías el culo cuando iban de visita a Tarará. Sería un poco más digno que defender a la dictadura desde las heroicas trincheras de la Ciudad de México.

Profile picture for user Ana J. Faya

En esta guerra de Rusia contra Ucrania, China "observa", como aliado sí, pero observa mientras se desgata económicamente Occidente. Porque las metas de la China de Chi, están ahí, en la superioridad económica. Este análisis de Mires lo describe y amplía. El deterioro de las democracias, que es el deterioro de sus instituciones, se ve aún más claro, sobre todo en EEUU. Bajo la admon Bush cuando lanzó la guerra contra Iraq sobre una racionalidad falsa y en el país dio inicio una polarización que hoy ha llegado a extremos; con Obama cuando presidió bajo confrontación continua con el Congreso, este resultó inoperante, presidió por decretos y en el país se atizó la polarización a niveles dramáticos; con Trump cuando desestimó y acusó públicamente el ejercicio de instituciones internacionales, más las de Justicia, incluido el Sistema electoral, que dio pie al asalto al Capitolio. Lleva razón Mires en lo del deterioro de las democracias, pero ese es un proceso que venía andando.

Me lei los comentarios antes de leer el articulo. Menos mal que no perdi mi tiempo leyendolo. Gracias a los comentaristas.

Muy de acuerdo con los que han opinado hasta ahora. El principal enemigo de la democracia occidental no es Putin sino lo mismos supuestos liberales occidentales, que se han unido en una especie de socialismo globalista facistoide. Donde si no opinas como ellos eres acusado de facista y ProPutin

Mires ha leído mucho a Augusto Monterroso, lo que sucede es que el dinosaurio sólo existe en su imaginación catastrofista. Cuando Mires despertó, no estaba ahí.

Profile picture for user El Santo

Este Sr. Mires cada día se me parece más a Tom Clancy.
Todo lo que escribe es un buen guion para Hollywood.

Profile picture for user JCAleman

El partidismo y la afinidad ideologica del articulista vuelven a imponer un parcialismo exacerbado que termina en un bodrio mas acorde a un matutino escolar de la isla que a un editorial medianamente serio.

Primero nos describe un contexto geopolitico en el que Rusia y China cabalgan contra la democracia occidental y en la que vencer en Ucrania nos salvaria de perderla, para despues meternos a Milei, a Le Pen y a Trump en el mismo ajiaco envenenado de Hamas y los persas.

La defachatez de los socialistas democraticos del siglo XXI (la misma mierda que los comunistas del XX) nos advierte que el nuevo presidente argentino es el anticipo de las autocracias dictatoriales que el malvado Trump cimentara para siempre en este planeta y entonces llegara el doomsday

Ni una palabra del golpe a la constitucion de Sanchez, de los dictadores comunistas de America Latina y mucho menos del (anti)progresismo que arrasa EEUU. Esos son los buenos para todo fundamentalista confrontado con la realidad.

Imposible analizar el asunto cuando se asume que todos los que apoyan a Putin en esta cuestion son necesariamente de izquierda. Como se puede catalogar de "idiotas" a quien no crea que Putin quiere anexar a Ucrania cuando fue Putin quien estuvo de acuerdo en parar la guerra en marzo-abril del 2022 cuando Zelenski, Biden y Johnson se negaron completamente a hacerlo? Eso incluia la retirada total de las tropas y no es una opinion, es un hecho constatable. Basta ese pequeno detalle para desmontar todo el articulo. Ahora, el colmo del cinismo es meter a Trump en la ecuacion acusandolo de dictador.
Senor Mires, la democracia norteamericana esta en la agonia no por Trump sino por los liberales democratas que ud defiende de manera descarada creyendo que quizas algun tonto lea lo que ud considera un "analisis" certero y yo un reguero de lineas sin sentido repletas de mentiras y distorsiones.
No insulte nuestra inteligencia, respetenos como lectores y por favor, respetese . Da pena.