Chile ingresó en una dinámica sociopolítica común en América Latina en los últimos tiempos: la política pendular, pasar de un extremo a otro a través del voto. Hace dos años se proyectaba una era significativa para la izquierda chilena, pero tal cosa parece haber quedado en el pasado con la arrolladora votación conservadora para conformar la Convención Constituyente, este domingo.
Hace 18 meses Gabriel Boric, al ser elegido presidente, simbolizó el ascenso de una nueva izquierda que parecía destinada a marcar una pauta de largo plazo con una nueva Constitución, redactada por referentes izquierdistas, activistas sociales e independientes con orientación progresista. El rechazo contundente en septiembre del año pasado, en las urnas, a la propuesta de Carta Magna debe verse, en retrospectiva, como el primer clarinazo de alerta.
Año y medio después de que José Antonio Kast perdiera la Presidencia ante Boric, por una nítida diferencia de 11% de los votos, este referente conservador se erige como el gran triunfador del 7 de mayo. Su Partido Republicano, que al contrario de otras organizaciones políticas no acudió en coalición, tuvo el 35% de los votos y 22 escaños dentro de la Convención Constituyente, en un proceso que deberá concluir en diciembre venidero con una nueva Constitución que deje atrás la Carta Magna de 1980, herencia de la dictadura de Augusto Pinochet.
Tal como sostenía DIARIO DE CUBA en los análisis previos a esta votación, lo que estaba en juego no solo era una elección de 50 constituyentes que refrendarán o corregirán el trabajo de redacción que ya viene realizando una comisión de expertos, que fue nombrada por acuerdo político en el Congreso de Chile, por iniciativa de Boric. Estaba en juego, y la votación lo ha terminado por corroborar, una nueva recomposición política. Chile ingresa a las dinámicas pendulares izquierda-derecha, donde el centro político que tuvo un peso determinante en la transición posdictadura parece haber desaparecido.
Kast proviene de los sectores conservadores tradicionales de Chile, pero en 2017 fundó el Partido Republicano, con posiciones económicas liberales y una tácita reivindicación del modelo económico que implantó la dictadura de Pinochet. De hecho, este dirigente político de 57 años y quien ahora pasa a ser la figura política clave en Chile, estaba en contra de derogar la Constitución de 1980.
La coalición conservadora, con la cual se espera que Kast teja alianzas en los debates del proceso constituyente, obtuvo 21% de los votos y 11 consejeros en el seno de la Convención.
Diversos analistas han calificado de "terremoto político" el resultado de las urnas, que representa un segundo sacudón político para Boric, que aún tiene dos años y medio por delante de gestión. El primero fue la derrota de su propuesta de Carta Magna, ante la cual respondió con rapidez tejiendo acuerdos. Ahora, con este resultado se pronostica un período de debilidad en el Gobierno del joven mandatario.
"La ilusión de refundar al país se ha disipado, por el momento. En dos años, el país pasó de un frenesí fundacional (de izquierdas) a entregarle una victoria avasalladora a la derecha —liderada por el Partido Republicano— para que redacte una nueva Constitución", sintetiza Patricio Navia, analista político y profesor de las universidades de Nueva York y Diego Portales.
"No podemos olvidar que una buena parte de la elite política se compró la tesis predicada desde la izquierda más radical de que el país necesitaba una refundación", sostiene Navia al ser consultado por DIARIO DE CUBA.
El analista recuerda que muchos líderes conservadores, incluido el dos veces presidente Sebastián Piñera, "y casi todos los que antes se habían comportado como líderes razonables de izquierda, terminaron por comprarse y defender la tesis de que Chile necesitaba redactar una nueva Constitución en vez de mejorar la que ya tenía".
Se pronostican meses de tensión e incertidumbre podría decirse que a tres bandas: por un lado el Gobierno de Boric que intenta ejecutar una gestión de izquierda, la Convención Constitucional donde predomina el sector conservador y el Congreso, de corte más variopinto.
A juicio del exconstituyente Felipe Harboe, uno de los efectos políticos de esta elección, y que tendrá repercusiones futuras, es que la centroizquierda tradicional "desaparece del escenario de discusión constitucional".
Referentes de la concertación, que llevó adelante la transición posdictadura, sencillamente quedaron borrados del mapa político. El Partido por la Democracia, del expresidente socialista Ricardo Lagos (2000-2006), o el Demócrata Cristiano, que tuvo jefes de Estado como Patricio Aylwin (1990-1994) y Eduardo Frei Ruiz-Tagle (1994-2000), no tendrán ninguna representación en la Convención Constituyente.
Tras los resultados, la propia noche del domingo, los antagonistas principales reaccionaron a los resultados. Kast dijo que "Chile ha derrotado a un Gobierno fracasado". Mientras que Boric optó por la autocrítica, aunque sin profundizar en ella: "Quiero invitar al Partido Republicano a no cometer el error que cometimos nosotros".
Finalmente, pese a los pronósticos de que habría una alta abstención, dado el clima de aparente apatía que prevalecía en los días previos, un total de 82% de los 15 millones de chilenos en edad de votar acudieron a las urnas.
Pronto las hordas al servicio de la Internacional Socialista se lanzaran a la calle a demostrar su descontento contra las vidrieras, los supermercados, las estaciones de metro y los bancos.
tal vez ahora Chile se salve
Boric demostró ser un político populista, que se la pasa viajando y ocupándose de problemas menos importantes, todo el tiempo en la bobería; el chileno se está dando cuenta y ya todos, muchos de la propia izquierda, le están retirando su apoyo; al tratar de imponer una nueva constitución al Boric le ha salido el tiro por la culata, terminará gobernando solo.
América Latina esá abriendo los ojos. Hace poco en Paraguay y ahora en Chile. ¡Aleluya!
Boric demostró ser un total fracaso en Chile. Esa alianza con posiciones de extrema izquierda --aun cuando no fuesen sus posiciones personales-- trajo estos resultados. De un extremo se ha pasado al otro. Ojalá y los del Partido Republicano puedan honrar la democracia en ese país e imponerse a sectores más radicales.
Excelente noticia