Nicolás Maduro y Luis Arce, mandatarios de Venezuela y Bolivia, respectivamente, anunciaron que asistirán el viernes a la XXI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), convocada por La Habana como respuesta a la Cumbre de las Américas.
Las embajadas de esos países en Cuba confirmaron a EFE la presencia de ambos jefes de Estado el viernes en La Habana para el foro regional, anunciado el martes por el Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de Cuba.
Asimismo, está previsto que el miércoles arribe a La Habana el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, quien también participará en la reunión, según comunicó el MINREX.
La cita de la ALBA, creada en 2004 por Fidel Castro y Hugo Chávez, tendrá lugar diez días antes de la Cumbre de las Américas, organizada del 6 al 10 de junio en Los Ángeles (EEUU), cita a la que la Casa Blanca ha dado a entender que no invitará a los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua, a pesar de las críticas de Bolivia, México, Argentina, Honduras, Chile, Panamá y algunos países caribeños.
EEUU avanzó en un primer momento que no iba a invitar a Cuba, Venezuela y Nicaragua porque "no respetan la democracia", aunque posteriormente dejó entrever que barajaba opciones para que pudiesen participar, pero no en igualdad de condiciones al resto.
A menos de dos semanas de la cita, EEUU no ha despejado la incógnita y tampoco ha publicado la lista definitiva de participantes, pese a haber empezado ya a enviar las invitaciones formales.
Los líderes de la ALBA "compartirán estrategias de desarrollo comunes" y "analizarán la situación política regional", indicó en un escueto comunicado el MINREX, que no hace referencia a la Cumbre de las Américas.
Las reuniones de la ALBA, organización que tiene diez miembros (Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Granada, Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, y Venezuela; y dos invitados especiales: Haití y Surinam), se celebran habitualmente a finales de año. La anterior fue en diciembre de 2021, también en La Habana.
Sin embargo, el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chavez, confirmó que asistirá a la IX Cumbre de las Américas porque es lo más "correcto" de cara a abordar la delicada situación internacional e impulsar la integración de América Latina.
"Hemos decidido asistir, fue una decisión que pensamos bastante, pero en balance creemos que ir a la Cumbre es lo correcto para nuestro país", dijo Chaves, que participa en el Foro Económico de Davos, en entrevista con EFE.
Chaves irá para contribuir al debate sobre "la situación global, la inflación, la carestía de alimentos, los precios de los combustibles, y la necesidad de integrar a América Latina mejor para que trabajemos juntos, y no los unos contra los otros", aseveró.
También considera importante ver "cómo aumentar el comercio y revertir cualquier tentación de que los países se aíslen del resto del mundo".
La división de opiniones a poco más de un mes de la fecha de la cita en Los Ángeles se acentúa. El martes, la vicepresidenta y canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez, dijo que no se puede "soslayar el tema de la democracia" en la agenda de la Cumbre de las Américas, en referencia a la posible participación de La Habana y Caracas.
"Cada quien decide a quién invita a la Cumbre. Al final del día, es el país anfitrión el que siempre decide a quiénes invita", dijo Ramírez durante una rueda de prensa, en la que añadió que para Colombia "es muy importante que en este tipo de cumbres no se soslaye el tema de la democracia".