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Brasil

Moscú bien vale una misa para Jair Bolsonaro

Bolsonaro se mostró empático con Vladimir Putin este miércoles en Moscú, eludiendo el tema de la crisis internacional que rodea a Ucrania.

Brasilia
Vladimir Putin y Jair Bolsonaro, en Moscú.
Vladimir Putin y Jair Bolsonaro, en Moscú. Russia Today

Un Jair Bolsonaro agobiado y viendo encuestas que le alejan de la reelección como presidente de Brasil en los comicios que se realizarán en octubre, busca con su visita a Rusia y Hungría mostrarse como referente de la escena política internacional para granjearse una imagen de éxito entre sus seguidores.

Bolsonaro se mostró empático con Vladimir Putin este miércoles en Moscú, eludiendo el tema de la crisis internacional que rodea a Ucrania y el rol ruso en esta. Simbólicamente, al contrario de la distancia que se le marcó al presidente francés Emmanuel Macron días atrás, en esta ocasión la disposición del Kremlin estuvo enfocada en mostrar la cercanía física entre los dos mandatarios.

En su encuentro con Putin, Bolsonaro afirmó que su visita es "un retrato" para el mundo que muestra el crecimiento que los dos países pueden tener juntos.

Para el profesor y politólogo de la Universidad Federal Fluminense Thiago Rodríguez, consultado por DIARIO DE CUBA, tanto Bolsonaro como Putin van en busca de objetivos diferentes, según sus respectivas agendas.

"Para Bolsonaro hay una clara intención de alimentar a su electorado interno. Rusia y Hungría (país que forma parte de la gira del mandatario brasileño) son países gobernados por fuerzas políticas conservadoras. Diría que forman parte de una internacional autoritaria", sostiene el profesor desde Río de Janeiro.

"Es una apuesta de Bolsonaro por un prestigio internacional que no tuvo en todo su gobierno. Ha estado aislado y marginado en la escena internacional", asevera Rodríguez.

Tras sostener una pública admiración hacia el presidente Donald Trump (2017-2021), con quien se equiparaba, Bolsonaro quedó bastante aislado en las instancias internacionales. Brasil no figura como prioridad para el nuevo inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden. Bolsonaro ha sostenido diatribas públicas con Macron sobre la Amazonía y, asimismo, colocó a su país en un segundo plano en las instancias regionales donde ahora el México gobernado por Andrés Manuel López Obrador parece llevar la voz cantante.

La gira internacional de Bolsonaro, que se ha realizado contraviniendo las peticiones de Washington de que fuese aplazada hasta que se superara la crisis por Ucrania, tiene lugar en un momento en que las encuestas apuntan a una clara victoria del dos veces presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) en las elecciones presidenciales del mes de octubre.

Diversos analistas e incluso colaboradores de Lula da Silva sostienen que el desafío para el ex presidente no es ganar, que lo dan por descontado, sino alcanzar el umbral de votos que no haga necesaria una segunda vuelta. Y para eso necesitaría obtener el 50% más un voto, al menos.

A juicio de Rodríguez, la visita de Bolsonaro a Moscú, que fue una iniciativa del Kremlin, demuestra el pragmatismo de la política exterior de Putin. No descarta este analista que la alta presencia de militares en la delegación sea una forma de reestablecer lazos entre los estamentos castrenses de ambos países, preparando el terreno para un eventual regreso de Lula da Silva al poder.

En los años que gobernó Lula da Silva en Brasil se mantuvo una relación estrecha con Moscú, y se recuerda incluso la cercanía que tuvo con Putin. En aras de promover una política multipolar, ambos países impulsaron la iniciativa conocida como BRICS, la sinergia entre Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

Para el académico, por otro lado, la visita de Bolsonaro a Moscú "es también una provocación de Putin en contra de Biden. Es una provocación sin alto costo político y que seguramente genera irritación en la Casa Blanca".

Antes de reunirse con Putin, el mandatario brasileño, que llegó a la presidencia con la promesa de combatir el comunismo, empezó su jornada con un homenaje al soldado desconocido de la época soviética.

Después, junto a Putin ha insistido en que Rusia es una potencia y colocó a su país a la par de Rusia. Por otro lado, Bolsonaro agradeció que Moscú defienda la soberanía brasileña de la Amazonia, un asunto que tensa las relaciones entre Brasilia y Bruselas, y finalmente ha instado a los rusos a invertir en la mayor economía de América Latina.

En torno a los 5.000 millones de dólares, el intercambio comercial entre los dos países es bastante reducido si tomamos en cuenta de que Rusia en la décimo primera economía del mundo y Brasil la siguiente según diferentes indicadores globales.

Putin ha aprovechado la visita de Bolsonaro para anunciar la disposición de la agencia nuclear rusa para construir nuevas centrales en el gigante latinoamericano. También pretende construir en Brasil dos nuevas estaciones rusas de seguimiento de basura espacial.

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7 comentarios

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Me parece que este gesto es de cara a las elecciones de Brasil y nada más. Rusia Televisión es pro-castrista y anti-norteamericana, especialmente dentro del área de América Latina. Huele a compra de apoyo propagandístico para que la mencionada emisora no haga demasiada propaganda a favor de Lula. cosa que está por ver. La probable elección de Lula será un gran balón de oxígeno para la cleptocracia castrista y para regímenes afines. Veo que el gobierno de los EEUU está muy tranquilo ante la perspectiva de verselas frente a semejante marabunta.

Articulo totalmente tendencioso. El soldado desconocido no tiene que ver nada con el comunismo. La visita de Bolsonaro es por asuntos comerciales y si para darle en la cara a Biden cuyo interés en la region es cero

Entonces nos preguntamos por qué los pueblos eligen a un Lula como presidente, ahí lo tienen. En vez de preocuparse por sanar el covid en su país y hacer política de beneficencias para lo más necesitado en ese país este carbón copy de Trump se da el lujo de hacerle la visita a un dictador verdaderamente imperialista, apoyándolo en sus hazañas de conquistar a otro país que no le perteneces.

No hay mucha diferencia entre la extrema izquierda y la extrema derecha las dos se lavan las manos una de otra la diferencia es la derecha es un poco más compasiva y creen en la libre empresa pero las 2 creen en la misma filosofía.

Mierda de perro y mierda de gato. Pero fundamentalmente, mierda.

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Los régimenes totalitario y autoritarios ya sea de que flanco vienen, se tocan en algún punto porque de lo que va es del contro del poder. A Putin les sirven todos mientras sus ambiciones imperiales se respeten.