Una acusación que hizo el presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), Gustavo Montezano, de que Brasil aceptó tabacos cubanos como garantía de un préstamo de 1.000 millones de dólares para la construcción del puerto de Mariel, en Cuba, fue confirmada por documentos obtenidos por CNN Brasil.
El medio tuvo acceso al acta de la reunión de la Cámara de Comercio Exterior (CAMEX), órgano interministerial que aprueba el financiamiento internacional realizado por BNDES. El punto 4.5 del documento trata de un financiamiento de 176 millones de dólares para que Odebrecht iniciara la segunda etapa de la construcción del puerto de Mariel.
El plazo de financiación era de 25 años, el más largo que podía ofrecer el banco. El inciso h) establece "garantías: flujos internos de créditos generados por la industria tabacalera cubana, para ser depositados en una cuenta de garantía abierta en un banco cubano".
La edición digital de CNN Brasil precisó que la cuenta de depósito en garantía es una operación de garantía estándar prevista en un contrato bajo la responsabilidad de un tercero hasta que las cláusulas de ese contrato sean cumplidas por ambas partes.
En 2017, varios medios de comunicación denunciaron la fragilidad de las garantías ofrecidas por el Gobierno de Cuba para el préstamo en relación con el puerto de Mariel, que incluían exportaciones de tabaco, añadió el medio.
Entonces, el consejo del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo que el presidente Bolsonaro había estado "diciendo tonterías y generando cortinas de humo para disfrazar el fracaso de su Gobierno".
El jueves, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó que los cuestionados préstamos concedidos a otros países por sus antecesores en el Gobierno fueron "legales", pero afirmó que se hizo "mal uso" de los recursos públicos y que naciones como Cuba o Venezuela no pagarán.
Durante una transmisión en vivo de Balsonaro, el presidente del BNDES citó que la entidad prestó en el pasado a esos países recursos por un valor de 420.000 millones de reales (unos 77.777 millones de dólares), de los cuales 3.600 millones de reales (unos 666,6 millones de dólares) fueron concedidos a Cuba.
Montezano dijo que una de las garantías del Gobierno de Cuba era la posibilidad de embargo de la producción de tabaco en la Isla, pero la mayor correspondía a títulos del Tesoro del propio Gobierno brasileño "con dinero del ciudadano contribuyente".
El problema de Lula es que es muy típico de los letrinamericanos, muchísimo más que alguien como el actual presidente de Uruguay. Tal gente no son nuestros "hermanos" ni merece nada mejor que nuestro desprecio y rechazo. Yo soy cubano, pero de "latino" nada.
Lula, en su mejor momento político, llevó a Marcelo Odebrecht a La Habana. Ya sabemos que su empresa sembró América latina de negociados de todo tipo, la mayoría con funcionarios de primera línea, como socios. Las consecuencias quedaron a la vista. Es de ingenuo pensar que no hubo intereses espúreos en esas inversiones brasileñas.