Las elecciones legislativas de medio término, en Argentina, arrojaron este 14 de noviembre señales de cambios políticos de largo alcance. Por un lado, desde 1983 por primera vez el peronismo no controlará la Cámara de Senadores, en tanto el cuerpo de diputados quedó empatado entre oposición y Gobierno, mientras que la abstención es la más alta en tres décadas pese a la obligatoriedad del voto.
El presidente Alberto Fernández, quien admitió tácitamente la derrota, emitió un mensaje televisado llamando a la oposición a trabajar conjuntamente en aras de alcanzar a acuerdos básicos en el Parlamento. El peronismo, que logró ir unido por primera vez en largos años, incluyendo al ala del kirchnerismo, tendrá que afrontar una dinámica diferente en el Congreso para los dos años finales de la presidencia de Fernández.
A juicio del analista Andrei Serbin, el mensaje del presidente, que fue grabado en la Casa Rosada, revela una "brutal soledad". El presidente se mostró "sin bunker, sin vicepresidenta, sin jefe de gabinete", comenta al ser consultado por DIARIO DE CUBA.
Para diversos analistas, simbólicamente el peronismo en el poder se mostró derrotado, tras cerrarse las urnas. Cristina Fernández de Kirchner se excusó de asistir a cualquier actividad pública la noche de este 14 de noviembre, según dijo, por razones de salud tras haber sido operada recientemente.
En las elecciones de medio término se han renovado 127 de los 257 escaños de la Cámara de Diputados, así como 24 de los 72 escaños del Senado.
Según el escrutinio, el peronismo tendrá 35 senadores a partir de diciembre, mientras que la coalición opositora Juntos por el Cambio, que encabeza el ex presidente Mauricio Macri, contará con 31. El resto de cargos en el Senado se repartirán entre agrupaciones políticas regionales, con las cuales el peronismo se vería obligado a pactar para alcanzar una mayoría de 37 votos. Es la primera vez que tal cosa ocurre, desde que se retornó a la vida democrática en Argentina, en 1983.
En la Cámara de Diputados la relación quedaría 118-116 a favor levemente para el peronismo. Este grupo político, por otro lado, evitó ser derrotado en la estratégica provincia de Buenos Aires, un gigantesco bastión electoral que rodea a la capital argentina. Los resultados allí quedaron prácticamente empatados, lo cual resultó ser un mejor resultado que las primarias realizadas en septiembre pasado.
Para la politóloga María Esperanza Casullo, el Gobierno logró revertir parcialmente el mal resultado de septiembre pasado. "Se recuperó, reconectó, especialmente en provincia (de Buenos Aires)", sostiene.
A juicio de esta estudiosa, profesora de la Universidad de Río Negro, el empate que prácticamente se refleja en la Cámara de Diputados obligará ahora a nuevos cursos de negociación política en Argentina.
Un dato llamativo para el experto en Comunicación Política Fernando Ruiz está en la alta abstención que se ha registrado. La participación estuvo en torno al 70%, pese a la obligatoriedad del voto en este país. Consultado por DIARIO DE CUBA, este profesor de la Universidad Austral sostiene que la ausencia de votantes es un llamado de atención a toda la clase política, sin distingo ideológico.
Por su parte, el politólogo Andrés Malamud adelanta que el resultado de este 14 de noviembre no puede tomarse como una predicción de los resultados de las elecciones presidenciales prevista para 2023.
"Las elecciones intermedias no predicen las presidenciales", asevera este investigador quien además recuerda que históricamente el peronismo, cuando ha estado ejerciendo el poder ejecutivo, ha obtenido resultado adverso en las legislativas de medio término.
En su mensaje desde la Casa Rosada, Alberto Fernández dijo que, teniendo el respaldo de su vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, acelerará las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en torno a un esquema de pagos de una deuda por 44.000 millones de dólares, que de forma controversial contrajo Mauricio Macri en 2018.
El peronismo, si bien mantiene un discurso público crítico, de tono anticapitalista en relación a este endeudamiento externo, en la práctica se ha dispuesto a negociar con el FMI.
De acuerdo con Fernández, en la primera semana de diciembre presentará un proyecto de ley que incluirá los principales acuerdos que se alcancen con el FMI y adelantó que espera tener el apoyo de la oposición para alcanzar gobernabilidad política y estabilidad económica.
Los medios de la capital argentina, especialmente televisivos, han destacado la elección como diputado de Javier Milei, quien tiene un discurso liberal a ultranza. El liberalismo de este político emergente obtuvo un 17% de votos en la capital Buenos Aires.
Milei obtuvo dos diputaciones. "Es una buena elección, pero no es un fenómeno electoral como los medios de Buenos Aires quieren presentar", asevera Malamud, profesor de la Universidad de Olavarría.
Casullo, en la misma tónica, sostiene que no ve factible que a la vuelta de dos años Milei pueda, de cara a las presidenciales, convertirse en un fenómeno al estilo de Jair Bolsonaro en Brasil.
Sin embargo, Fernando Ruiz observa con alta preocupación el porcentaje alcanzado por este economista que ahora será diputado y lo combina con la alta abstención. A su juicio, hay un porcentaje no insignificante de votantes que no se están sintiendo representados por los políticos actores dominantes, peronismo y macrismo. Esto es una señal de cambios políticos de mayor envergadura.
Espabilen argentinos o se van a comer un bistec de vaca una vez al año.