Un estudio realizado alertó sobre la posibilidad de que la variante del Covid-19 encontrada en Brasil hace algunos meses sea capaz de sortear los anticuerpo producidos por la vacuna Coronavac, fabricada por el Instituto Butantan, en China. Coronavac, además, es la vacuna más usada en la campaña contra el coronavirus en el gigante sudamericano.
Los científicos brasileños que llevaron a cabo la investigación, pertenecientes a las universidades de San Pablo y de Campinas, declararon que los resultados mostrados no se consideran definitivos. Los métodos y conclusiones de los estudios han sido publicados en la revista científica The Lancet, en un apartado de "preimpresiones" que busca el criterio y la revisión de otros científicos.
Las bases de la investigación fueron las muestras de plasma de ocho personas que habían recibido las dos dosis de Coronavac hace cerca de cinco meses. Los científicos probaron la actividad neutralizante de los anticuerpos presentes en las muestras en la nueva variante brasileña del virus (P.1) y en la cepa común anterior (B).
Si estos científicos estuvieran en lo cierto, la situación epidemiológica de Brasil podría empeorar, pues el grueso de sus vacunas compradas no serviría de mucho. El estudio también sugiere que para prevenir la transmisión de la nueva cepa puede ser efectivo aplicar una dosis de refuerzo de la vacuna actualizada respecto a la nueva cepa.
El caso de la variante P.1 es complicado, pues su carga viral puede ser diez veces más elevada que la de la cepa B. Esto podría significar que el virus tiene capacidad para evadir el sistema inmune de personas con anticuerpos contra el coronavirus. Se teme que esta capacidad de reinfección pueda darse entre un 25% y un 65% de los pacientes.
