Durante más de dos años las organizaciones internacionales de derechos humanos han sido enfáticas en solicitar a Nicolás Maduro que disuelva a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), un grupo elite de la Policía, que ha devenido en un grupo de exterminio. Tales pronunciamientos han caído en saco roto.
Las FAES han sido señaladas por organizaciones de derechos humanos de Venezuela como responsables de la “masacre de La Vega”, en la cual dos decenas de hombres de una barriada popular de Caracas fueron asesinadas en ejecuciones extrajudiciales este fin de semana del 8 y 9 de enero en un solo operativo policial.
"Esta es la mayor masacre ocurrida en Venezuela a manos de cuerpos policiales en nuestra historia. El Gobierno ha ignorado todas las recomendaciones que al unísono le piden que disuelva a las FAES", precisa a DIARIO DE CUBA el activista Rafael Uzcátegui, coordinador general del Programa Venezolano de Derechos Humanos (PROVEA).
PROVEA tiene tres décadas de funcionamiento y se ha especializado en documentar las violaciones a derechos humanos en Venezuela. Es una organización que tiene capacidad de señalar sin ambages que se está ante el peor hecho de este tipo.
La primera voz internacional que de forma explícita pidió la disolución de las FAES fue Michelle Bachelet, alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU. En julio de 2019 al presentar su primer informe dedicado a Venezuela, por mandato del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la expresidenta chilena Michelle Bachelet.
Tan caso omiso hizo Maduro, que Bachelet difundió sus recomendaciones el 4 de julio de 2019 y al día siguiente, en un desfile militar con motivo del aniversario de la independencia de Venezuela, Maduro por primera vez incluyó a efectivos policiales en el acto castrense y públicamente pidió un aplauso para los efectivos de las FAES.
En septiembre de 2020, la Misión de Verificación de los Hechos, compuesta por tres expertos independientes, también designada por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, tras compilar un extenso y contundente informe de más de 400 páginas igualmente recomendó suprimir a las FAES.
De hecho, para la Misión de Verificación una de las razones por las cuales el régimen de Maduro debe ser juzgado por crímenes de lesa humanidad es justamente por las ejecuciones extrajudiciales. De acuerdo con los diversos informes especializados, las FAES encabezan la lamentable estadística de ser el cuerpo más letal.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó este 12 de enero "la masacre de La Vega" y se sumó a las solicitudes de que las FAES deben ser disueltas de inmediato y debe hacerse una investigación profunda sobre sus crímenes.
Las FAES resultan una papa caliente para el régimen de Maduro ya que esta unidad de "respuesta rápida" fue creada por el propio Maduro en 2017 con el objetivo inicial de "combatir el crimen organizado". El chavismo no puede adjudicar las violaciones de derechos humanos de este cuerpo, como lo suele a hacer, a las "prácticas capitalistas" previas a la llegada de Hugo Chávez al poder. Las FAES son, en sentido estricto, una obra del chavismo.
Las personas entrevistadas por los expertos de la ONU se refirieron de manera constante a las FAES como un "escuadrón de la muerte" o un "grupo de exterminio". Según informes de organizaciones venezolanas de derechos humanos, las FAES son responsables de centenares de muertes violentas. Paradójicamente, la acción de este cuerpo se afinca en las barriadas pobres, sectores que el chavismo dice defender.
Bachelet describió en su informe el modus operandi. Las FAES llegaron en camionetas negras 4x4 sin placas de matrícula y bloquearon los puntos de acceso en el barrio. Vestían de negro, sin ninguna identificación personal, con pasamontañas cubriendo sus rostros. También llevaron armas largas.
Las familias de las víctimas describieron cómo las FAES irrumpieron en sus hogares, se apoderaron de sus pertenencias y ejercieron violencia de género contra las mujeres y las niñas, incluyendo la desnudez forzada. Las FAES separaron a los hombres jóvenes de otros miembros de la familia antes de dispararles. Según sus familiares, casi todas las víctimas recibieron uno o más disparos en el tórax.
Las personas testigos, en su mayoría familiares o vecinos, reportaron al alto comisionado de Derechos Humanos cómo las FAES manipularon la escena del crimen y las pruebas. Plantaron armas y drogas, en algunos casos dispararon sus armas contra las paredes o en el aire para insinuar un enfrentamiento y demostrar que la víctima se habría "resistido a la autoridad".
En el caso de la "masacre de La Vega", las autoridades policiales señalaron que se produjo un enfrentamiento. Se reportaron 23 bajas de supuestos delincuentes, pero ningún funcionario policial resultó herido y no hubo fallecidos entre los efectivos de las FAES.
¡Claro! Si este hijo de puta de MADURO es el Comandante en Jefe del grupo de exterminio! A los ''tontos útiles'' TODOS LOS REGÍMENES TOTALITARIOS Y SANGUINARIOS LES PASAN LA CUENTA.
Entrenados por Cuba ,no se olviden...
Es triste decirlo, pero esos sectores pobres fueron justamente, los que votaron a Chávez, y luego, dieron su apoyo a maduro en la última elección verdadera y libre que tuvo ese país, hace 7 años.
Sólo les queda llevar carta del tema, y cuando haya libertad de nuevo, no dar más chances al socialismo o al comunismo, o como quiera que se disfrace.
Muchos sabios dicen que los pueblos tienen memoria corta. Pero quien olvida la historia se condena a repetirla.