Un tribunal chino sentenció este miércoles a condenas entre siete meses y tres años de prisión a 10 de los 12 jóvenes hongkoneses detenidos el pasado agosto por intentar escapar en una embarcación hacia Taiwán, informó la agencia EFE.
Hasta el momento del arresto, los jóvenes se encontraban en libertad bajo fianza, luego de haber sido procesados por participar en las protestas que sacudieron Hong Kong en la segunda mitad del 2019. Estas condenas se han dado en medio de un panorama político de represión que reina en el gigante asiático durante las dos últimas semanas, en las que se supo también de la pena de cuatro años de cárcel a la periodista Zhang Zhan por revelar la verdad de la situación epidemiológica por el Covid-19 en su país.
Los jóvenes condenados tienen entre 16 y 33 años. Ocho de ellos se encontraron culpables de salir del país de manera ilegal , mientras que otros dos fueron penados por ser los coordinadores de la huida. Los dos implicados restantes no fueron encarcelados por ser menores de edad y no ser considerado este un "crimen abominable" en China. Los menores pasarán una cuarentena obligatorio en su ciudad bajo estricta custodia policial.
Además de los años de privación de libertad, el tribuna chino condenó a los acusados a pagar multas por valores de 2.500, 1.900 y 1.250 euros.
"Las decisiones se han llevado a cabo tras considerar las circunstancias, consecuencias, actuación y arrepentimiento de cada acusado", declaró el tribunal, el cual también indicó que todos los procesados admitieron su culpabilidad.
Una de las pruebas de la arbitrariedad de este juicio fue el hecho de que se declarara en "sesión abierta", sin embargo, las autoridades chinas no permitieron la entrada de periodistas ni de familiares de los acusados. China también le negó la entrada a los tribunales a varios diplomáticos de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Holanda, Portugal, Canadá y Asutralia que intentaron acudir. En respuesta, la embajada de EEUU en Pekín emitió un comunicado en el que exigía la liberación de cada uno de los jóvenes dado que su "su único delito fue intentar escapar de una tiranía".
Actualmente, el tribunal donde se celebró el juicio se encuentra perimetrado por fuerzas del orden. De igual forma se ha suspendido la circulación de personas y autos en la calle adyacente. Al parecer, las autoridades chinas temen otra protesta popular como la ocurrida en el juicio de Zhang Zhan, en la que varios periodistas que mostraban su solidaridad fueron arrestados. Los jóvenes hongkoneses procesados se encuentran desde hace varios días aislados y sin comunicación.
