La economía de América Latina se hundirá por el coronavirus

Un  pronóstico resulta peor que otro. Los dos apuntan a una contracción de la economía latinoamericana como nunca antes vista, al menos desde que los organismos llevan estadísticas sistemáticas sobre la región. Tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI) como el Banco Mundial coinciden en que debido al coronavirus será un año nefasto.

El 12 de abril el Banco Mundial ubicó la caída del Producto Interno Bruto (PIB) consolidado de América Latina en 4,6%. Es la peor cifra desde que este organismo estableció su sistema de registro sobre la región, en 1961.

Dos días después, el FMI pinto un panorama aún más sombrío.

La economía latinoamericana registrará en 2020 una aguda caída de 5,2% del PIB por efecto de las restricciones para contener el coronavirus. Prácticamente todos los países entrarán en recesión y se podrán empezar a recuperar en 2021, estimó este 14 de abril el FMI al presentar su informe "Perspectivas de la Economía Mundial".

De cumplirse estas proyecciones de los dos organismos centrales de la economía global, ambos con sede en Washington, este sería el peor desempeño económico de América Latina, que tuvo un retroceso de 2,5% en 1983, en plena crisis de la deuda externa latinoamericana, en una década que luego pasó a conocerse como "la década perdida".

Durante la recesión global de 2009, ha recordado el Banco Mundial (cuyos pronunciamientos en general son más ponderados que los del FMI), el PIB regional apenas retrocedió un 1,9%.

Por paradójico que resulte, Venezuela tendrá una caída al igual que el resto de países pero le significará una recuperación comparativa con el descenso que tuvo el PIB venezolano en 2018 y 2019. Esto según las cifras del FMI. Sin embargo, el economista Asdrúbal Oliveros aseguró que la afectación económica en Venezuela será generalizada, ya que ningún sector saldrá ileso.

"No hay manera de que algún sector salga inmune de esta crisis económica, no se visualiza crecimiento y lo que puede variar es la proporción de la caída. El sector bancario, manufacturero, comercio y servicios que se habían visto beneficiados por la dolarización, tendrán unos niveles de deterioro más profundos", sostuvo Oliveros, director de la firma Ecoanalítica, al ser consultado por DIARIO DE CUBA, en Caracas.

Brasil —la mayor economía de América Latina— tendrá una contracción de 5,3%, México de 6,6% y Argentina —en plena reestructuración de su deuda— tendrá una caída del PIB de 5,7%.

Tampoco se salvan las economías del Pacífico que gozaban de buena salud, de esa forma Chile tendrá una caída de 4,5%, Colombia de 2,4%, y Perú de 4,5%.

En Ecuador, bajo un programa del FMI y con dificultades para afrontar sus obligaciones de deuda, la retracción será de 6,3%. Por su parte, Paraguay caerá 1%, y Uruguay 3%.

En Bolivia, que sufrió un 2019 convulso con la anulación de las elecciones generales, la contracción será de 2,9%, mientras que en Venezuela la caída prevista es de 15%. Esto tras caer 35% en 2019.

Junto a la estrepitosa caída de este año, el Banco Mundial se atrevió a proyectar un año más benévolo para 2021.

Para 2021 el Banco Mundial espera un crecimiento del 2,6%, la cifra más alta desde 2013. Con toda la precaución posible —el tablero está repleto de incertidumbre, quizá más que nunca antes—, todos los países de la región, excepto Venezuela, del que no ofrece datos, volverán a terreno positivo.

Oliveros, por su parte, recuerda que Venezuela bajo el chavismo padece una "crisis calamitosa". Con caídas continuas en su PIB desde 2012, si se cumple el pronóstico de una caída del 15% en este 2020, este país tendría una reducción acumulada de su PIB equivalente a 80%.

La respuesta sanitaria global al coronavirus tiene efectos directos sobre la economía. Se combinan el efecto de las medidas de confinamiento, con cierre de lugares de trabajo, perturbación de las cadenas de suministro, despidos y caída del ingreso.