El dictador norcoreano, Kim Jong-un, prevé invitar a observadores y periodistas de Estados Unidos y Corea del Sur en mayo al cierre de su sitio de pruebas nucleares, dijeron las autoridades surcoreanas el domingo, mientras el presidente estadounidense, Donald Trump, presionaba para una desnuclearización total, informa Reuters.
El viernes, Kim y el presidente surcoreano prometieron la "completa desnuclearización" de la península coreana, en la primera cumbre entre las dos Coreas en más de una década, pero la declaración no incluyó pasos concretos para alcanzar ese objetivo.
Los medios estatales norcoreanos habían dicho antes de la cumbre que Pyongyang suspendería de inmediato las pruebas nucleares y con misiles, cerraría el lugar donde realiza pruebas atómicas y en su lugar perseguiría el crecimiento económico y la paz.
Kim dijo a Moon que invitaría pronto a expertos y periodistas para "abrir a la comunidad internacional" el desmantelamiento de las instalaciones, dijo la Casa Azul.
"Estados Unidos, pese a ser inherentemente hostil a Corea del Norte, podrá saber una vez que comiencen nuestras conversaciones que no soy la clase de persona que vaya a usar armas nucleares contra el Sur o Estados Unidos", dijo Kim, según señaló el secretario de prensa de Moon, Yoon Young-chan.
"No hay razón para poseer armas nucleares mientras sufrimos dificultades si hay una confianza mutua con Estados Unidos, construida en reuniones frecuentes de ahora en adelante, y se promete el fin de la guerra y la no agresión".
Kim dijo que había dos túneles importantes adicionales que siguen "en muy buen estado" en el sitio de pruebas de Punggye-ri, además del existente, que los expertos han dicho ha colapsado tras repetidas explosiones, dejando buena parte de las instalaciones en desuso.
La promesa de Kim muestra su voluntad de "responder activa y preventivamente" a los esfuerzos de inspección que se realicen dentro del proceso de desnuclearización, consideró Yoon.
Para facilitar la futura cooperación transfronteriza, Kim prometió descartar la zona de tiempo única que Pyongyang creó en 2015. Añadió que el Norte adelantaría sus relojes 30 minutos para sincronizarlos con los del sur.
Kim también reafirmó que no usará la fuerza militar contra el Sur y planteó la necesidad de un mecanismo institucional para impedir escaladas no intencionadas, dijo Yoon.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo el sábado por la noche en una llamada telefónica a Moon que estaba encantado con que los gobernantes de las dos Coreas hubieran reafirmado el objetivo de completar la desnuclearización durante su cumbre, dijeron las autoridades surcoreanas el domingo.
Moon y Trump coincidieron en la necesidad de una cumbre pronto entre Trump y Kim, y exploraron dos o tres posibles lugares; uno de ellos, sugerido por Moon, sería la Casa Azul.
Entre los posibles centros de reunión no figuraba ninguno en Corea del Norte, Estados Unidos o la zona desmilitarizada que divide las dos Coreas, dijo un responsable de la Casa Azul a periodistas, sin dar más detalles.
Un alto cargo estadounidense ha dicho que Singapur podría ser considerado también como un posible lugar para la reunión Trump-Kim.
"Trump dijo que era una buena noticia no solo para las dos Coreas, sino para el mundo entero que afirmaran el objetivo de llevar a cabo una completa desnuclearización", dijo el portavoz de la Casa Azul, Kim Eui-kyeom, en otra comparecencia.
"Moon dijo a Trump que Kim había comentado que Trump y él se llevarían bien (…) y Trump estaba deseando hablar con Kim y que hubiera un resultado muy bueno", añadió.
Trump, que calificó en Twitter la conversación de 75 minutos como "una charla larga y muy buena", dijo que la cumbre con Kim tendría lugar en las próximas tres o cuatro semanas.