El rapero contestario y prisionero político cubano Maykel "Osorbo" Castillo afirmó que sus compañeros en el acuartelamiento que llevó a cabo un grupo de activistas y artistas en el barrio San Isidro de La Habana Vieja, en noviembre de 2020, son "más grandes y mucho más importantes" que él, en un mensaje que les envió desde prisión, cuando se cumple el cuarto aniversario de esa acción reprimida por el régimen cubano.
"Queridos y estimados amigos: Primero que nada, no me considero ni remotamente un superhombre, solo un ser humano sumamente humilde, capaz de comprender que solo somos un pequeño aliento de vida en manos de un tiempo que nunca va a detenerse a esperar por nosotros", escribió el rapero en una carta que fue publicada este domingo en la red social X por la curadora exiliada Anamely Ramos, una de las acuarteladas en la sede del Movimiento San Isidro hace cuatro años.
La curadora explicó en X que Osorbo entregó la misiva a un familiar el pasado 15 de noviembre, durante la visita mensual, y afirmó que el artista "se mantiene fuerte y de buen ánimo, y anuncia que pronto estará compartiendo con todos las nuevas canciones que está escribiendo".
"Ante este todo que nos rodea a cada minuto, solo somos una parte efímera de un nada", reflexionó en su carta Maykel Osorbo, quien cumple una condena de nueve años de privación de libertad en la prisión de máxima seguridad de Kilo 5 y medio, en Pinar del Río.
"Hoy les hago saber que ustedes, mis amigos, hermanos y seguidores son el todo que llenó el vacío de la nada que quedó en el olvido. Cuando los conocí les quise con mi rebeldía y me siguieron, es decir, cada uno de ustedes son, y siempre serán, la razón del todo que vino a llenar mi nada", aseguró el rapero, ganador de dos Premios Latin Grammy en 2021, por la canción "Patria y Vida", de la que es uno de los compositores y que se convirtió en el himno de los cubanos durante las protestas antigubernamentales de julio de ese año.
"No duden ni un momento que cada uno de ustedes son más grandes y mucho más importantes que yo", recalcó Osorbo.
Después de sufrir varias detenciones arbitrarias, Maykel Osorbo fue arrestado en su casa por agentes de la Seguridad del Estado el 18 de mayo de 2021.
Pasó más de un año en prisión antes de ser llevado a juicio. En junio de 2022, fue sentenciado a nueve años de cárcel por "desacato, atentado, desórdenes públicos y difamación de las instituciones y organizaciones, héroes y mártires".
El motivo de los cargos fue su reacción a un intento del régimen de detenerlo de forma arbitraria. En las imágenes del intento de arresto se observa que el rapero trató todo el tiempo de evitar la confrontación con los policías.
En la cárcel, Maykel Osorbo ha sido sometido a violencia, tortura, vigilancia las 24 horas, confinamiento solitario y suspensión de visitas y de contacto con su familia.
En el mismo juicio, celebrado en junio de 2022, fue condenado a cinco años de cárcel el artivista Luis Manuel Otero Alcántara, por los supuestos delitos de desórdenes públicos, desacato y ultraje a los símbolos patrios. En febrero pasado el Tribunal Provincial Popular de Artemisa desestimó una solicitud de libertad condicional a su favor.
El 18 de noviembre de 2020 un grupo de artistas, activistas y opositores cubanos se acuartelaron en la sede del Movimiento San Isidro para exigir la liberación del rapero Denis Solís, entre otras demandas. La acción terminó el 26 de noviembre, cuando agentes de la Seguridad del Estado disfrazados de médicos irrumpieron en el lugar y se llevaron detenidos a los activistas que estaban en huelga de hambre.
La represión desatada contra los acuartelados provocó una protesta de artistas e intelectuales frente a la sede del Ministerio de Cultura, que dio lugar al nacimiento de Movimiento 27-N.
Entre los cubanos acuartelados en San Isidro estuvieron la curadora Anamely Ramos, la poeta Katherine Bisquet, los periodistas Ileana Hernández y Esteban Rodríguez, y los activistas Omara Ruiz Urquiola, Oscar Casanella, Osmani Pardo Guerra, Osmel Adrián Rubio Santos, Humberto Mena, Abu Duyanah Tamayo y Yasser Castellanos. Con excepción de los dos últimos, todos han sido forzados al exilio.
