Antonia Lamoru, madre del preso político Alain Forbes Lamoru, sancionado en 2007 a 25 años de cárcel, denuncia que su hijo cumple doce días en huelga de hambre y que se encuentra en una celda de castigo. Según denunció el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), Forbes Lamoru se mantiene en huelga de hambre, junto a otro preso político, Nelson Amaya Martín, ambos en protesta por "la violación de sus derechos en prisión y por la reciente muerte del preso político Luis Barrios Díaz".
Forbes Lamoru y Amaya Martín cumplen condena en la prisión de máxima seguridad Kilo 8, de Camagüey, pero fuentes familiares precisaron a DIARIO DE CUBA que, al segundo día, "lo cambiaron a la prisión de al lado, Kilo 7, en el horario de la noche". "Está en una celda de castigo desde el primer día, sin colchón y con poca higiene, está débil", agregaron a su declaración.
"Mi hijo se encuentra en estos momentos en una huelga de hambre a punto de la muerte. Yo estoy desesperada como madre, estoy pidiendo una súplica a ver de qué forma alguien me puede escuchar, dar un aliento, ayudar, porque temo por la vida de mi hijo", dijo Antonia Lamoru en un video de denuncia al que tuvo acceso este diario.
A Forbes Lamoru le han negado trece veces "la progresión al régimen de mínima severidad", apuntó la madre del preso político. "No sé por qué le ha negado tantas veces la fase de mínima severidad. No sé si es por su color de piel. No sé qué motivo porque no me dan una respuesta contundente a mi situación. Estoy destrozada de ver a mi hijo casi a punto de morir", concluye.
Alain Forbes Lamoru nació el 20 de agosto de 1987, fue juzgado cuando tenía 19 años de edad por la Causa 37 del 2007, y sancionado a 25 años de cárcel por el fallido secuestro de un avión que dejó dos militares muertos. De esa condena ya ha cumplido 16 años con ocho meses, detalló su madre a este diario.
Al ser juzgado, el régimen cubano mantuvo la moratoria de pena de muerte, en un caso en el que Fidel Castro pidió entonces "serenidad y sangre fría". La pena de muerte se aplicó en Cuba por última vez en 2003 a tres jóvenes que secuestraron una lancha con pasajeros para llegar a EEUU.
