La ONG Prisoners Defenders sumó 21 nuevos reclusos a su registro de personas encarceladas en Cuba por motivos políticos, un día después de que el régimen fuera nombrado miembro del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU).
El informe de la ONG correspondiente a septiembre y dado a conocer este miércoles señala que, además de esos 21 nuevos casos, el mes pasado salieron de la lista 14 presos, luego de cumplir sus condenas de manera íntegra.
De esta forma, son 1.052 los cubanos que el régimen mantiene encarcelados por razones políticas en estos momentos.
Nueve de los 21 presos políticos registrados por Prisoners Defenders en septiembre fueron procesados hace meses, pero salieron a relucir ahora porque sus familias tenían miedo de hablar.
Entre los 1.052 presos que hay en las cárceles cubanas por cuestiones políticas, se encuentran 34 menores de edad. Treinta son niños y cuatro son niñas. Veintiocho cumplen condena y seis están siendo procesados.
La cifra no contempla a muchos otros niños que, tras cumplir íntegramente sus condenas, han salido del registro de presos políticos de la organización.
El propio régimen admitió en mayo, en un informe presentado al Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas (ONU), que al menos 39 menores fueron condenados a penas de prisión en Cuba por las manifestaciones antigubernamentales de julio de 2021, conocidas como 11J.
La organización señala además que hay 117 mujeres encarceladas, de ellas dos de género trans. Estas últimas han estado encarceladas con hombres todo el tiempo.
En declaraciones enviadas a DIARIO DE CUBA, el director de Prisoners Defenders, Javier Larrondo, consideró que la inclusión del régimen cubano en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU demuestra la necesidad de reformar los mecanismos de esa organización.
"Las acciones que (el régimen) de Cuba desarrolla son propias del terrorismo de Estado, sin paliativos. (El régimen de) Cuba ejerce el terrorismo de Estado contra sus ciudadanos", sostuvo Larrondo en referencia a las amenazas del régimen de quitarles la custodia de sus hijos a las reclusas de conciencia, algo que ya concretó en el caso de la presa Gloria María López Valle.
Su hija de 1 3 años, Nathalie Álvarez López, se encuentra en una casa hogar, donde es hostigada y sufre ataques de pánico, según un comunicado difundido por Prisoners Defenders a través del correo electrónico.
"El nombramiento de (el régimen de) Cuba para el Consejo de Derechos Humanos en el día de ayer no hace sino constatar la necesidad de reformas en los mecanismos de Naciones Unidas, cuyos organismos de derechos humanos están plagados de países dictatoriales de diverso y esperpéntico pelaje".
La ONG recordó en su comunicado que las familias de los reclusos también son sometidas a diferentes formas de persecución y tortura, y se refirió al caso de Ailex Marcano, madre de Ángel Jesús Véliz.
El activismo de esta mujer por la liberación de su hijo, condenado a seis años de cárcel por su participación en las protestas del 11J, le ha costado amenazas y tortura psicológica.
El pasado viernes 6 de octubre acudió a la Tercera Unidad de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) de Camagüey, tras recibir una citación. Fue detenida durante 24 horas, bajo investigación por presunta amenaza.