Los prisioneros políticos cubanos Carlos Manuel Díaz González, conocido como Ktivo Disidente, y José Díaz Silva denunciaron haber sido víctimas de amenazas y malos tratos en las cárceles donde se encuentran.
Ktivo Disidente, condenado a finales de noviembre a dos años y seis meses de prisión por el supuesto delito de desacato, dijo haber sido golpeado y torturado, en una carta abierta dirigida a Miguel Díaz-Canel y hecha pública en la cuenta de Twitter del Foro Antitotalitario Unido (FANTU).
El opositor se quejó en su misiva de que el régimen cubano le fabricó un "proceso artificial espurio" y luego fue llevado a prisión, donde "no ha faltado el trato vilipendioso y excrementos". "He sido cobardemente golpeado, torturado y, créame que no exagero", sostuvo.
Ktivo Disidente contó que intentó tramitar la denuncia, pero fue "nuevamente irrespetado al escuchar de boca de un fiscal militar que estos cobardes fueron sobreseídos".
El principal perpetrador de los abusos contra el prisionero político, que no se detienen en su persona, sino que también ofende a su esposa, sería un oficial "que se hace llamar Raúl".
"No solo me amenazaron, si no que cumplen con su palabra al hacerme la vida insoportable en esta cárcel. Raúl grita epítetos peyorativos a mi esposa en plena calle. Raúl me ha condenado en este proceso permeado por el odio político y yo me pregunto: ¿qué más me va a querer hacer Raúl?", cuestionó el preso en su carta.
Pese a las amenazas y los maltratos sufridos, y a que confesó haber sentido miedo, Ktivo Disidente aseguró que se mantendrá firme y patriota hasta la muerte.
"Yo, condenado por delitos que no cometí, mis verdugos sobreseídos y el crimen impune. Yo, puesto en manos de los mismos y otros pendejos golpeadores de hombres esposados y mancilladores de la dignidad, continuaré firme y patriota por ese orden hasta la muerte, se lo juro", expresó.
Ktivo Disidente fue detenido tras protagonizar una protesta pública en el boulevard de San Rafael, en La Habana, en la que reclamó pacíficamente el derecho de todos los cubanos a participar en la vida política del país.
El opositor cienfueguero eligió el mismo sitio en que se manifestó el 4 de diciembre de 2020 Luis Robles, también encarcelado por razones políticas y sentenciado a cinco años por salir con un cartel a la calle.
El objetivo declarado del activista era respaldar a Robles y reafirmar su convicción de que, "donde cae uno, otros tienen que seguir levantando sus voces".
También el opositor José Díaz Silva, líder del Movimiento Opositores por una Nueva República (MNOR), fue amenazado de muerte en prisión, según denunció su esposa, Lourdes Esquivel.
"Hoy día 19 de diciembre me llamó mi esposo José Díaz Silva. Preso Político. Presidente del Movimiento Opositores Por Una Nueva República desde la Prisión y me dijo que el sábado 17 Bladimir jefe del 47 junto a varios guardias entraron a su celda a requisar sus pertenencias y le ligaron el azúcar con el detergente y lo obligaron a desnudarse con amenazas que lo van a matar", relató Esquivel en una publicación en Facebook.
Este mismo mes, el opositor cubano recibió un pase carcelario para que gestionara su salida del país hacia EEUU.
''Me tienen allí en una compañía que tiene tres metros de ancho por cinco de largo. En ese espacio, los reos disponen de una cama, el baño y una pequeña ducha. Una vez al día, entre semana, los sacan a otra celda a tomar el sol durante una hora, y les permiten cinco minutos de llamada telefónica para hablar con su familia'', contó entonces Díaz-Silva al medio estadounidense Radio Martí Noticias.
"Allí yo no tengo derecho a nada. Llevo rato padeciendo de los riñones, de la cervical, la gastritis crónica y no me han llevado al médico. Y para que se me dé una visita o un pabellón conyugal, que me tocan por la ley, me tengo que plantar y poner a correr a todos los oficiales, y la familia mía, a denunciar", explicó sobre su situación.
En octubre de este año, la Seguridad del Estado había otorgado a Díaz Silva un primer pase carcelario para que gestionara su salida del país. En ese momento, el opositor denunció que los represores le habían dicho ''que a mí no me van a soltar nunca de la prisión, que yo tengo que irme del país. Me dan el pase ese para que yo gestione (en la Embajada de EEUU) una entrevista y trate de sacar una visa".
En agosto del pasado año, el régimen condenó al opositor a dos años de cárcel sin internamiento, sin embargo, en marzo de este año el Tribunal Provincial de La Habana revocó esa sanción y el activista permanece encarcelado desde el 3 de marzo.
La Fiscalía del régimen acusa a Díaz Silva de desacato y atentado, supuestos delitos por los cual le ha pedido una condena de siete años.
"Estoy dispuesta a dar mi vida si fuera necesario en esta lucha", escribe la opositora cubana Arianna López Roque desde la cárcel.
También la opositora Arianna López Roque, líder de la Academia Julio Machado, aseguró en una carta, que no hará ningún pacto ni cederá ante ningún chantaje.
La misiva, titulada "Mi compromiso", fue sacada clandestinamente de la cárcel de mujeres de Guamajal, en la provincia de Villa Clara, donde se encuentra recluida López Roque. El medio independiente Cubanet la publicó.
"Mi compromiso tiene que ser estrictamente con la libertad de Cuba y tiene que ser con ser consecuente con lo que pienso y hago (…). Nunca voy a aceptar ningún pacto o chantaje (…) y estoy dispuesta a dar mi vida si fuera necesario en esta lucha", escribió la también miembro y fundadora del Frente Nacional de Resistencia Cívica Orlando Zapata Tamayo (Frente OZT).
"Rendirme o abandonar nunca ha sido mi opción. Patria y vida. Cubanos todos al Paro Nacional. Abajo la dictadura castrista", concluye la carta de López Roque, quien fue detenida junto a su esposo, el también opositor Mitzael Díaz Paseiro, durante las protestas pacíficas del 11 de julio en Placetas, Villa Clara.
En octubre del año pasado, la prisionera política y madre de dos menores de edad fue golpeada y llevada a celda de castigo, tras protagonizar una protesta durante la que exhortó a salir el 15 de noviembre a la calle.
Poco antes había sido galardonada junto a su esposo con el Premio Libertad Pedro Luis Boitel que otorga el Directorio Democrático Cubano.