El prisionero político del 11J Orlando Carvajal Cabrera, de 20 años, denunció en una carta haber sido sometido a torturas y maltratos en la prisión habanera Jóvenes de Occidente, publicó en su perfil de Facebook el activista Marcel Valdés.
''Aquí he experimentado lo que es la tortura psicológica, como cuando me hicieron juicio hace ya casi un año (...) y me mandaron para una celda disciplinaria sin explicación ninguna. Sin nada para abrigarme ni taparme, tenía que taparme del frío durmiendo bajo el colchón'', dice en su carta este prisionero político.
''He sido amenazado por los oficiales de guardia, golpeado, ofendido, y muchas cosas más'', señaló.
''Hoy en día, hay un primer teniente llamado Yurisbel Despaine Despaine que ha hecho fijación hacia mi persona. Me ha amenazado varias veces con golpearme, sacarme los ojos, tirarme del tercer piso hacia abajo, me insulta, ofende y falta el respeto'', cuenta Carvajal Cabrera.
Sobre la prisión donde se encuentra, el joven refirió que ''este lugar no parece un centro de reeducación. Los guardias se prestan para muchas cosas, fuman drogas junto con los reclusos, piden cajas de cigarros para cualquier cosa, jabones. Se pasa mucha hambre y ves cómo la comida que sobra se la llevan para dársela a los puercos, se roban los pomos de aceite, cartones de huevos, las viandas, el arroz, y todo lo que puedan''.
La madre de Carvajal Cabrera, Mailín Cabrera, fue una de las mujeres detenidas el pasado domingo cuando salió a pedir la libertad de los presos políticos, junto a la líder de las Damas de Blanco Berta Soler y Norabel Herrera, madre de otro prisionero del 11J.
A Carvajal Cabrera, manifestante de La Güinera, la Fiscalía del régimen le pedía 20 años de cárcel, petición que finalmente fue rebajada en el juicio a 12 años.
