Al menos unas seis personas han sido detenidas por las protestas relacionadas con los apagones que se generaron el lunes y martes en la noche en Caibarién, Villa Clara, y Santa Cruz del Norte, Mayabeque, respectivamente, lo que elevaría a más de 30 los cubanos detenidos desde que se desencadenaron estas manifestaciones pacíficas el pasado 29 de septiembre.
"Al menos tres personas detenidas en la protesta de anoche en Boca de Jaruco, Santa Cruz del Norte, Mayabeque, publicó el miércoles en su cuenta en Twitter la activista Salomé García Bacallao, miembro de la plataforma Justicia 11J.
García Bacallao identificó a los arrestados como "Marcos, Marlen Tamayo y Gaviota", quienes se encuentran en el centro conocido como Técnico de San José de las Lajas.
La activista también denunció que se mantenía el "despliegue de tropas especiales" en la localidad.
A raíz de la protesta del lunes por la noche en Caibarién, Villa Clara, las fuerzas del régimen detuvieron a al menos otras tres personas en esa localidad.
Alexis Córdova, quien compartió un breve video el martes desde una unidad conocida como el Vivac, es uno de los detenidos. El miércoles fue trasladado a un centro de detención en Santa Clara, dijo a DIARIO DE CUBA Dayana Vergel, madre de las hijas de Córdova.
Vergel denunció en su perfil de Facebook que él y otros dos manifestantes detenidos están siendo imputados como supuestos "cabecillas" de la protesta.
Según Vergel, Córdova logró llamar a familiares este miércoles para ponerles al tanto de su situación. "Dijo que le consiguieran abogado porque la cosa pintaba fea".
Vergel rechazó las acusaciones que están vertiendo contra el detenido, de supuesto "cabecilla" de las manifestaciones. "Durante la protesta él no hizo más nada que manifestar su sentir porque es un derecho. Había medio pueblo y cuando él llegó ya estaba andando todo. Solo quiso expresar que estamos cansados, que nuestros hijos, personas mayores, enfermos, no puedan descansar dignamente", dijo Vergel.
Este miércoles, en una entrevista con la revista oficial Alma Mater, el ex espía Gerardo Hernández dijo que "las calles hay que defenderlas", en unas declaraciones en las que volvió a justificar la represión contra quienes participaron en las protestas del 11 de julio de 2021.
El actual coordinador nacional de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) defendió la represión que se desató contra el pueblo desde los propios barrios.
"Los eventos del 11 de julio del año pasado demuestran que una organización como esta tiene hoy una mayor importancia", dijo. "Uno no puede decirse revolucionario y quedarse en su balcón mirando como otras personas atentan contra el orden. Las calles hay que defenderlas porque es la tranquilidad de nuestros hijos", añadió.
Según Hernández Nordelo, el 11J "se puso de manifiesto la razón por la que existen los CDR", porque estuvo "en la primera línea", en referencia a los cubanos que salieron a las calles a reprimir las protestas tras la orden de combate dada por el gobernante Miguel Díaz-Canel.
Analistas políticos consultados por DIARIO DE CUBA recientemente consideraron que las protestas actuales pueden verse como una continuidad de aquellas que se suscitaron en julio del año pasado en más de 50 localidades y pueblos de toda la Isla.
"Desde el 11J no han cesado las protestas. Se han espaciado y localizado, pero no se han detenido. Incluso frente a dos disuasivos potentes como las largas condenas en prisión y el nuevo Código Penal. Han desbordado al mecanismo de control básico de los regímenes totalitarios: la policía política, pensada y montada para mantener a raya a los grupos cívicos organizados", consideró el historiador y opositor Manuel Cuesta Morúa.
En palabras de Cuesta Morúa, "es interesante cómo la rabia acumulada se ha transformado en acciones de protesta pacífica ejemplares" donde "la violencia ha sido la excepción".
Para el periodista Boris González Arenas, el 11J fue "la expresión más grande de la adversidad, de la incapacidad del régimen cubano para satisfacer las mínimas demandas de una ciudadanía que ha sido llevada a mínimos de consumo por seis décadas".
González Arenas lamentó que "ha sido la efectividad del régimen totalitario" la causante de "volver esporádicas las protestas y diseminarlas", pero opinó que "los cubanos están aprendiendo a conectarse, a unirse y a vincularse precisamente para quitarse por siempre esta terrible tiranía comunista".
