El activista Carlos Ernesto Díaz González, más conocido como Ktivo Disidente, levantó hace unos días la huelga de hambre que había iniciado en la prisión de Ariza, en Cienfuegos, aunque permanece en una celda de aislamiento y sin colchón para dormir, denunciaron sus familiares tras hacerle una visita esta semana.
"Ktivo estuvo en huelga de hambre por cinco días, en protesta porque no le daban acceso al teléfono. Cuando las autoridades penales accedieron a darle ese derecho, levantó la huelga y tuvo visita conyugal. En los días de la huelga lo enviaron a una celda tapiada más pequeña aún en la que permanece", dijo a DIARIO DE CUBA Miguel Gómez, amigo del activista encarcelado.
"Como se ha negado a usar ropa de preso común, lo mantienen en una celda aislada y ahora sin colchón", agregó Gómez.
"A la esposa de Ktivo, la Seguridad del Estado la amenazó para que no se siguiera reuniéndose con personas que exigen la libertad de su esposo. Fiscalía Militar le informó que los cargos criminales contra los hombres que lo habían golpeado en prisión habían sido sobreseídos; o sea, que no harán nada contra ellos. Él aún tiene lesiones en las manos de la golpiza de ese día", añadió la fuente.
El abogado de este activista cienfueguero, Joel Fonte Angulo, presentó a principios de agosto un recurso de apelación ante el Tribunal Supremo contra el auto de prisión provisional emitido por el Tribunal Municipal de Cienfuegos, que mantiene tras las rejas a su defendido. El jurista permanece a la espera de un pronunciamiento del máximo órgano de justicia en el país.
En el mes de julio el Tribunal Municipal de Cienfuegos había accedido a conceder una fianza de 10.000 pesos para poner en libertad a Díaz González, pero por presiones de la Fiscalía Provincial los jueces revocaron esta decisión y emitieron otro auto para mantener encarcelado al opositor.
Ktivo Disidente está acusado de los supuestos delitos de desobediencia, desacato y difamación, aunque las argumentaciones legales de la Fiscalía para imputarlos son omisas e imprecisas.
El opositor fue trasladado a la prisión de Ariza el mismo día de su detención, el 28 de abril de este año, tras haber protagonizado horas antes una protesta pública en el bulevar de San Rafael, en La Habana, en la que reclamó pacíficamente el derecho de todos los cubanos a participar en la vida política del país.
Díaz González eligió el mismo sitio en que se manifestó el 4 de diciembre de 2020 el joven Luis Robles, también encarcelado por razones políticas y sentenciado a cinco años por salir con un cartel a la calle.
El objetivo declarado del activista era respaldar a Robles y reafirmar su convicción de que "donde cae uno, otros tienen que seguir levantando sus voces".