Agentes del aparato represivo del régimen cubano detuvieron durante varias horas el martes al pastor Yordanys Díaz Arteaga, presidente de la Iglesia Cristiana Reformada en Cuba, y allanaron la sede pastoral de esa denominación en La Habana.
De acuerdo con la periodista Yaiset Rodríguez Fernández, Díaz Arteaga fue llevado a una estación policial, donde estuvo hasta las 2:00AM del miércoles y fue amenazado con ser acusado por la posesión de "productos ilegales".
"El motivo, según comenta una miembro de su denominación, tiene que ver con unos pulóveres de donación que repartirían entre los presos y al parecer el Gobierno está preocupado por la procedencia", señaló Rodríguez Fernández en su muro de Facebook.
Según la denuncia, tras la liberación del religioso, los bienes "confiscados siguen en manos de la Policía". Asimismo, tanto él como su familia fueron obligados a permanecer en arresto domiciliario.
"Hace falta también que los compañeros que lo atienden revisen cuánta labor social humanitaria hace esta iglesia. Vergüenza de régimen", subrayó la periodista.
La Iglesia Cristiana Reformada en Cuba, que abandonó el oficialista Consejo de Iglesias de Cuba en 2020, ha sufrido constantes presiones por parte de la Seguridad del Estado. Entre otras cosas, por prestar su apoyo a los presos políticos cubanos y sus familiares.
El lunes, el pastor Alain Toledano, quien preside el Ministerio Internacional Sendas de Justicia y la Iglesia Emanuel en Santiago de Cuba, y su familia, fueron también detenidos cuando regresaban de Sancti Spíritus tras una gira apostólica por templos de su denominación.
"Nos estaban esperando en el Punto de Control" en la entrada de Santiago de Cuba, mientras viajaban en un taxi particular, denunció el pastor en una directa en su muro de Facebook, donde aseguró que los agentes policiales, que recibían órdenes vía telefónica, quisieron revisarles todo el equipaje y ocuparle los teléfonos, a lo que se resistieron.
Finalmente, tanto él como sus allegados fueron liberados. "Todo lo ocurrido fue una provocación", denunció.
A raíz de esos sucesos, la ONG británica Christian Solidarity Worldwide denunció la detención de Díaz Arteaga.
Anna Lee Stangl, responsable legal de la organización, señaló: "Estamos extremadamente preocupados por el bienestar del reverendo Díaz Arteaga, cuyo único delito ha sido buscar la independencia para sí mismo y su denominación de la manipulación del Gobierno, en línea con los derechos fundamentales asociados con la libertad de religión o creencias. Hacemos un llamado al Gobierno cubano para que devuelva las posesiones que fueron confiscadas, retire los cargos pendientes y cese el acoso al pastor y su familia".