El Movimiento San Isidro que lidera Luis Manuel Otero Alcántara, rechazó los "mensajes de odio, discriminación y exclusión" difundidos en sus redes sociales por funcionarios del Gobierno cubano en contra del artista detenido por el régimen y a la espera de juicio.
En una declaración difundida a través de sus redes sociales este viernes, bajo el título "Declaración de artistas e intelectuales cubanxs ante los mensajes de odio que difunden funcionarios públicos", el colectivo advirtió que la reproducción de esa clase de llamado "constituye una violación del principio universal de presunción de inocencia, al cual toda persona acusada de un delito tiene derecho, y un ataque a su moral y dignidad, que podría contribuir a generar un estado de opinión desfavorable para él antes de los juicios, en un país donde no existe separación de poderes."
"Yo prefiero una Cuba sin Alcántara", escribió el artista plástico Ernesto Rancaño en su cuenta de Facebook el miércoles, frase que fue replicada y suscrita por Norma Rodríguez Derivet, presidenta del Consejo Nacional de las Artes Plásticas, Alexis Seijo García, rector del Instituto Superior de Arte (ISA), Mabel Castillo Mompie, vicepresidenta del Instituto Cubano de la Música, Fernando Jacomino y Fernando Rojas, ambos viceministros de Cultura, entre otros.
"Desde la detención arbitraria del artista hasta hoy, múltiples intelectuales cubanos de gran prestigio han puesto su saber y experiencia en función de aportar información rigurosa y argumentos para comprender el caso de Luis Manuel Otero Alcántara y han reclamado su liberación por considerar injusto el proceso en su contra. Sin embargo, esas voces parecen ser ignoradas o desestimadas por aquellos funcionarios públicos que, ante el profundo análisis que vive la comunidad artística cubana en estos momentos, solo han podido reproducir un mensaje que aboga por una Cuba sin Alcántara", apuntó el Movimiento San Isidro.
"Este caso ha traído a la luz, una vez más, otras discusiones de índole cultural y estético que se conectan con la manera en que construimos nuestras representaciones sobre la nación, sus zonas oscuras y exclusiones, los límites y condicionamientos de nuestras instituciones culturales y el papel de los llamados censores de cuello blanco en los procesos de censura (parametración), que no son nuevos en Cuba y continúan lastrando nuestros derechos como ciudadanos. Además, ha puesto sobre el tapete cómo se gestiona la participación ciudadana en la construcción del país y de nuestras propias vidas."
Sobre el encarcelamiento y acusaciones contra el artista, recordaron que estas "reflejan la política de censura y discriminación que el Estado cubano y sus instituciones han puesto en práctica desde la década de los sesenta y han incrementado de manera preocupante en los últimos meses."
"Reclamar la libertad de Luis Manuel Otero Alcántara significa hoy defender nuestros derechos y defender nuestros derechos significa honrar la bandera cubana. Agradecemos y acompañamos todas las reflexiones serias y rigurosas sobre el caso, porque de los debates que generen puede salir una nación fortalecida, y demandamos a las instituciones y funcionarios estar a la altura de esas reflexiones y cumplir su misión de servir al pueblo. Nuestra posición es y será siempre esencialmente martiana, inclusiva y democrática: ¡Queremos una Cuba con todos y para el bien de todos!", termina la nota.
A raíz de la campaña concertada y simultánea de los funcionarios, que se produjo inmediatamente después que los directivos del Ministerio de Cultura se reunieron con Miguel Díaz-Canel para "hacer balance del trabajo del sector en 2019", varios creadores denunciaron el carácter de tales mensajes.
"Esto no es un simple mensaje de odio, es el más puro estilo lexical de la institucionalidad fascista empleado en Europa por Streicher o Hans Frank y más recientemente por Karadzic o Milosevic. ¿Hasta qué grado la incompetencia manejada por funcionarios e instituciones va a llegar? ¿De dónde proviene esta semántica del odio, a qué y a quiénes representa? Les recuerdo solamente el desastroso resultado de utilizar, promover y aupar estas terminologías desde las instituciones públicas. Sobre todo, sobre una persona como Luis Manuel Otero Alcantara, la cual no tiene derecho a réplica por estar encarcelado", señaló el artista Hamlet Lavastida, quien publicó capturas de pantalla de los funcionarios que compartieron el mensaje.
"Norma Rodríguez Derivet y Alexis Seijo: Muchos tenemos las herramientas y el prestigio de añales para decir que Luis Manuel Otero Alcántara es un artista. Y no un masajista de los ojos como si lo es melosamente y hasta de modo empalagoso Ernesto Rancaño y muchos más. El arte también cuestiona, mueve el piso. Y sus instituciones deberían mediar ante las otras que de arte no entienden nada. Ustedes están polarizando nuestras posiciones en un momento en que Cuba necesita cambios para su sociedad", dijo a la funcionaria el curador y crítico Frency Fernández.
Al propio tiempo, la campaña de solidaridad sigue acumulando apoyos, pues más de 3.000 personas han firmado una carta abierta exigiendo la libertad del artista, detenido desde el 1 de marzo.
