La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) denunció la represión diaria a la que son sometidos los periodistas independientes por parte del régimen cubano. Según activistas y los propios reporteros, el acoso ha ido en aumento en las últimas semanas.
Christopher Barnes, presidente de la SIP, y Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, manifestaron su solidaridad con los periodistas independientes, a quienes el régimen califica como "opositores" para así vetar su derecho a la libertad de información e intentar descalificarlos ante la población cubana.
"No podemos bajar la guardia, como organización que defiende la libertad de prensa es nuestro deber seguir denunciando los diferentes métodos que a todos los niveles utiliza el régimen para reprimir la labor de los periodistas independientes", enfatizó Barnes en un comunicado.
Mientras Rock, también director del portal mexicano de noticias La Silla Rota, declaró: "condenamos de manera enérgica la tortura psicológica, la persecución, el espionaje, el acoso, las limitaciones y otras prácticas de represión que sufren los periodistas cubanos".
Henry Constantín, vicepresidente de la Comisión de Libertad de Prensa en Información de la SIP en Cuba, refirió que el aumento de la represión de los agentes del régimen se debe a la necesidad de neutralizar cualquier información sobre el juicio al líder de la UNPACU, José Daniel Ferrer. Para confirmar esa situación, Constantín denunció que el pasado 17 de febrero se le prohibió al colaborador de La Hora de Cuba en Camagüey Ricardo Fernández Izaguirre viajar a Santiago de Cuba para dar cobertura al juicio de Ferrer.
Ese mismo día en la madrugada la policía política allanó en Pinar del Río la vivienda de Yusleidy Romero, periodista y directora de la publicación del Instituto Cubano por la Libertad de Prensa (ICLEP), Panorama pinareño. El ICLEP denunció que en febrero periodistas y directivos de la organización han sido vigilados, detenidos y registradas sus viviendas en las provincias de La Habana, Matanzas, Villa Clara, Sancti Spíritus y Pinar del Río.
También hubo reportes de acoso, como el sufrido por la periodista Camila Acosta, de Cubanet, quien fue desalojada de la renta en la que vivió durante dos años. Los propietarios del inmueble, que fueron multados, notificaron a Acosta que por exigencia de la Policía debía abandonar la casa en 48 horas.
Otros reporteros como Julio Aleaga Pesant, Carlos Manuel Álvarez, de la revista El Estornudo, y Luz Escobar, del diario digital 14ymedio, han sido citados y amenazados por la policía política. Recientemente, otro periodista independiente, de la publicación Periodismo de Barrio, Ismario Rodríguez, fue impedido de salir del país, cuando pensaba participar en el proyecto Sail For Climate Action.