Amenazadas con el desalojo, así se mantienen una madre y sus dos hijas menores en Guanabo

Desde que recibió amenazas de desalojo por parte de la Policía, Antuanett Creagh García y sus dos hijas han sido apoyadas por varios activistas y defensores de derechos humanos. Dos de ellos, Lázaro Yuri Valle Roca y Eralidis Frómeta, creadores de Delibera Organización, permanecen en la vivienda de la mujer desde hace más de una semana.

Las acciones de ambos activistas, que buscan medir el desalojo, dieron paso a la vigilancia permanente y el hostigamiento de la Seguridad del Estado contra Creagh García.

"Este miércoles Antuanett fue citada por la Policía. En el conversatorio un miembro de la Seguridad del Estado le dijo que debía sacarnos de la casa. Ella no aceptó esa amenaza y se descompensó, hubo que llevarla al médico", comentó a DIARIO DE CUBA Valle Roca, quien también se desempeña como periodista independiente. 

"A otro activista que estaba tomando fotos le arrebataron su celular, le borraron las imágenes y le impusieron una multa de 100 pesos".

"La casa de ella ahora está vigilada todo el tiempo, hay una patrulla apostada cerca, pero hemos decidido estar aquí para apoyarla, para evitar a toda costa esta injusticia", añadió Valle Roca.  

Otra de las activistas que ha apoyado a la mujer amenazada con el desalojo, María Mercedes Benítez Rodríguez, recibió una citación que la obligaba a presentarse en una estación policial de Centro Habana, este jueves.

Creagh García y sus dos hijas de 10 y 12 años han recibido advertencias de desalojo desde 2016. No obstante, su caso no se hizo público hasta mediados del año pasado. La medida con la que amenazan las autoridades se sustenta, supuestamente, en el Decreto-ley 232, que estipula el decomiso de los bienes inmuebles si en ellos se encuentra droga.

Por su parte, la víctima del acoso policial no solo ha defendido su inocencia al desconocer la existencia de plantas de marihuana en el techo de su casa, sino que posee documentos de las propias autoridades que así lo atestiguan. No obstante, la Policía de Guanabo, en La Habana, le ha extendido varios ultimátum para que abandone su casa.

Hasta el momento, las autoridades no han hecho efectiva sus amenazas de "sacarla por la fuerza".