El padre del preso político Ernesto Borges Pérez, el activista por los derechos humanos Raúl Borges, alertó sobre la posibilidad de que su hijo pueda quedar ciego en la prisión del Combinado del Este, en La Habana, debido a la progresiva pérdida de la vista que ha sufrido en más de dos décadas de encierro.
"En una visita de dos agentes de la Seguridad del Estado a mi casa un tiempo atrás ellos me pidieron autorización para operar a mi hijo de cataratas ante los evidentes y agravados problemas de visión que tiene, pero no aceptamos debido a nuestro temor a que con esta operación y el posoperatorio sirviera para cometer un asesinato selectivo, tenemos evidencias de que eso pudiera suceder", dijo el padre de este preso a DIARIO DE CUBA.
Borges Pérez se encuentra desde el año 2011 en una celda solitaria de una muy pobre iluminación solar y artificial en el Combinado del Este cercano a criminales de alta peligrosidad.
A esto se suma que los primeros diez años de su condena los pasó en la prisión de máxima seguridad en el municipio de Guanajay, Artemisa, en una celda oscura y semitapiada, lo cual de manera progresiva le fue afectando la visión.
Además de la posible pérdida total de la visión, este preso político posee otras nueve enfermedades crónicas relacionadas con el sistema digestivo y respiratorio, todas producto de su larga estancia en la prisión y las pésimas condiciones sanitarias de estas.
Este exanalista de la Contrainteligencia cubana fue detenido el 17 de julio de 1998 y condenado seis meses después por un Tribunal Militar a 30 años de prisión por el delito de "tentativa de espionaje" debido a su intento de hacer llegar a un funcionario diplomático estadounidense los expedientes de 26 espías que el Gobierno cubano pensaba introducir en ese país y otros países aliados de EEUU.
Inicialmente la Fiscalía Militar pedía la pena capital para Ernesto Borges Pérez.
Con la reciente muerte de Armando Sosa Fortuny en una prisión en Camagüey, Ernesto Borges Pérez se convirtió en uno de los presos políticos con más tiempo en prisión dentro de las cárceles castristas, pues suma ya 21 años.
Según las leyes militares cubanas y por su condición de primario, Borges Pérez solo debía cumplir un tercio de su sanción, lo cual le hubiera permitido estar hace ya más de una década en libertad, pero según su padre, en reiteradas ocasiones las autoridades carcelarias le han negado pasar al régimen de mínima severidad, condición esta que le permitiría salir más prontamente en libertad.
El proyecto independiente Estado de Sats es uno de los principales promotores por la libertad de Borges Pérez y de todos los presos políticos.
Delito: ''tentativa de espionaje'' . Condena: 21 años... ¡Qué barbaridad!
Me parece curioso que un padre tenga que decidir si un manganson se opera o no. Si no se opera de cataratas seguro se quedara ciego, este en la carcel o en Varadero en un hotel todo incluido.