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Sociedad Civil

Activistas cubanas denuncian la violencia política contra las mujeres y proponen pasos para combatirla

La primera respuesta del régimen es arrestarlas e impedirles salir de sus casas.

Madrid
'Las #cubanas que pensamos diferentes queremos participar de la vida pública de nuestro país'. DDC
Desde la izquierda: las activistas Annia Zamora, Aimara Peña y Sissi Abascal, a quienes el régimen ha impedido viajar en varias ocasiones.
Desde la izquierda: las activistas Annia Zamora, Aimara Peña y Sissi Abascal, a quienes el régimen ha impedido viajar en varias ocasiones.

Activistas cubanas han presentado este viernes la campaña #UnidasPorNuestrosDerechos, que llama la atención sobre la violencia política contra las mujeres, propone pasos concretos para combatirla y para construir un "ambiente de seguridad" en el que todas las habitantes de la Isla puedan desarrollarse en igualdad de oportunidades.

Lo novedoso de esta campaña, más allá de arrojar luz sobre un tema que el Gobierno intenta minimizar, es que incluye entre los reclamos los derechos de las mujeres con una posición política diferente a la del régimen, sistemáticamente reprimidas.

La primera respuesta de la Seguridad del Estado ha sido impedir salir de sus casas y en otros casos arrestar este viernes a mujeres que iban a presentar de campaña. A varias de ellas en los últimos días también se les impidió viajar al exterior.

En un comunicado dirigido a Teresa Amarelle Boue, secretaria nacional de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC, controlada por el régimen), integrantes de las organizaciones Alianza Cubana por la Inclusión y Red Femenina de Cuba anunciaron la puesta en marcha de #UnidasPorNuestrosDerechos y explicaron que está "dedicada a la promoción y defensa de los derechos de las mujeres cubanas, con énfasis en el derecho a la participación política".

Como complemento, las activistas publicaron en las redes sociales vídeos que reclaman la atención de la expresidenta chilena Michelle Bachelet, alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, y de Federica Mogherini, jefa de la diplomacia de la Unión Europea.

"Las cubanas que pensamos diferente queremos participar de la vida pública de nuestro país", dicen las cubanas en sus mensajes a esas funcionarias.

En su comunicado a Amarelle Boue, afirman que la campaña busca "erradicar la violencia política en contra de las mujeres, a través de la sensibilización de la población, mediante diversas actividades educativas y la implementación de acciones para lograr programas, políticas públicas y legislaciones en beneficio de las mujeres".

Las activistas recuerdan datos sobre el aumento de los feminicidios en Cuba, hechos públicos tras la Encuesta Nacional de Igualdad de Género, realizada por la estatal Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) en 2016.

Según los resultados, en los 12 meses anteriores a la encuesta un 26,7% de las mujeres sufrió violencia en el seno de la pareja. Otro 39,6% dijo haberla sufrido en algún momento de su vida. "Los medios de comunicación independientes y los testimonios de la población parecieran apoyar dichas cifras", indican las integrantes de la campaña.

"Llama poderosamente la atención —apuntan— que aun cuando la Asamblea Nacional Cubana está conformada por 53% de mujeres, estas no han promovido legislaciones a la par de otros países de la región, como Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala y México, entre otros, que protejan a las mujeres y fomenten la disminución de los tipos de violencia que padecemos diariamente".

"Por el contrario, en el caso de las mujeres que hacemos vida ciudadana activa, porque sentimos un alto compromiso y vocación por lo público, somos frecuentemente agredidas y amenazadas", denuncian.

"Con ello solo se limita el crecimiento del país, se parcializa la realidad y la solución de los problemas solo es vista sesgadamente. En contextos donde la mujer ve más violencia en contra de las mujeres en política, donde percibe menos igualdad de oportunidades de participación y se siente menos representada, tendrá menor intención de participar en el ámbito de lo público", advierten.

Recuerdan que el Gobierno cubano, como parte de la Organización de Naciones Unidas, se ha comprometido con los objetivos de la Agenda 2030 aprobada por la Asamblea General, "en la que se reafirma que la igualdad de género es un derecho y su logro es la mejor herramienta para erradicar la violencia contra las mujeres y el aumento de los conflictos que se le asocian".

Las integrantes de #UnidasPorNuestrosDerechos hacen tres propuestas que consideran "ayudarían a disminuir la violencia en contra de todas las mujeres" cubanas y, por ende, favorecerían "a aquellas que queremos participar de la vida pública en nuestro país".

—Una actualización de los datos sobre feminicidio que permita conocer las dimensiones reales de este fenómeno, "lo que podría generar soluciones a corto, mediano y largo plazo".

—La preparación de los funcionarios que atienden las denuncias de violencia en contra de las mujeres, ya que "es determinante para que quienes son víctimas puedan tener la confianza en el proceso de atención a sus casos" y, "en consecuencia, reducir los índices de impunidad".

—"La inclusión en esta ruta de reformas y aprobaciones de leyes como mandato posterior de la Constitución vigente, la tipificación de la violencia de género, como delito, bien en el Código Penal o a través de la promulgación de la ley específica en la materia".

Estas propuestas —concluyen las participantes en la campaña su mensaje a Amarelle Boue— "van dirigidas a construir un ambiente de seguridad, en el que todas las mujeres podamos desarrollarnos en igualdad de oportunidades y participar plenamente de la vida pública en nuestro país".

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