Al menos cinco integrantes del equipo de béisbol de Ciego de Ávila habrían solicitado la baja de esa selección durante la pasada semana, reportaron varios perfiles en redes sociales y medios independientes especializados.
De acuerdo con el grupo de Facebook "Los Tigres Avileños. Serie 64", en la selección provincial se produjo "la solicitud de bajas masivas" por parte de "figuras consagradas dentro de nuestro pasatiempo nacional, pero con garras aún para aportar a la causa de los Tigres, otros jóvenes promesas que se pierden".
La nota asegura que los jugadores que se marchan son Osvaldo Vázquez, Gustavo Brito, Alexander Jiménez, Liosvany Pérez y Raúl González. No existe confirmación oficial de esas bajas.
"Duele ver cómo poco a poco se derrumba lo que un día fue pasión y deleite para muchos. Si a todo esto le sumamos la cantidad de atletas que han emigrado en los últimos años, no haría falta hacer un análisis para llegar a la conclusión de la situación en que nos encontramos", añade la publicación.
Osniel Hernández, administrador del grupo de Facebook, achacó la petición de baja al salario que perciben los peloteros, que "no da para nada como se está viviendo en Cuba, y ellos tienen que pensar en su familia, en sus hijos, aunque les duela alejarse de su profesión".
"Nuestro pasatiempo nacional se está derrumbando porque no quiere nadie jugar al béisbol", añadió.
El sitio especializado Pelota cubana entrevistó a Osvaldo Vázquez, receptor de Ciego de Ávila que ha integrado equipos Cuba, entre ellos el que asistió al Clásico Mundial de 2017. El jugador argumentó que "solamente estoy pidiendo la baja por el bajo salario de nosotros, que son 3.500 pesos, y eso no me da para mantener a mi familia". Al cambio del mercado informal de la Isla, este equivale a poco más de diez dólares mensuales.
Pelota cubana confirmó además la baja de Gustavo Brito, quien lo hizo público en sus redes sociales.
En sus declaraciones, Vázquez recordó que él es licenciado en Cultura Física, por lo que aspira a trabajar en área deportiva próxima a su vivienda, donde ganaría más de 5.000 pesos: "Sin el béisbol, sin la pelota, que es lo único que le gusta a uno, lo que puedo hacer es ayudar en la provincia o en lo que sea relacionado con el béisbol. Al final, como licenciado puedo ganar más, y estaré cerca de ellos", dijo, en referencia a su familia.
En el foro del perfil de Facebook "DPorto Sports", que dio a conocer la noticia, numerosos comentarios ahondaron en la gravedad del problema.
"Es una falta de respeto el problema de salario en este país. Así estamos todos nosotros, los jubilados. ¿Tú sabes lo que es yo mismo, meterse 47 años conduciendo un camión de carga para jubilarme con 2.100 pesos?", lamentó Conrado Avilés.
Por su lado, Darian Adrián señaló: "Sí así está el béisbol, imagínense los otros deportes. Esto no es más que el reflejo de la Cuba actual. (...) El salario no alcanza para nada. 3.500 pesos para ellos es un paquete de pollo y dos pomos de aceite. Saque usted sus propias conclusiones".
El perfil Cbd González añadió: "No solo pasa con los peloteros, pasa también con todos los profesionales que se meten cinco años en una universidad para después colgar el título y ponerse a vender frituras, vender como dependiente de la tienda particular de algún cubano americano, etcétera, porque los salarios que paga el Estado son un burla".