Los equipos Industriales y Pinar del Río vencieron en cuatro de sus cinco partidos de la semana y ahora asedian la cima de la edición número 63 de la Serie Nacional de Béisbol, que está próxima a cumplir su primer tercio de competencia.
Los capitalinos (15-7), máximos ganadores históricos de estos eventos, cayeron el martes ante los líderes de Ciego de Ávila (16-8) y contra todo pronóstico por el paso que traían sus rivales, barrieron en los últimos desafíos para colocarse a solo un juego de diferencia de la primera posición.
La debacle avileña fue aprovechada por los más occidentales de Cuba (16-8), que luego de salir vencidos en el primer choque ante Camagüey (12-10), no les dieron tregua y los batieron con autoridad para abrazarse con los avileños en lo más alto de la tabla de posiciones.
Como ha venido sucediendo, a pesar de perder a sus dos mejores lanzadores por contratos en la Liga Italiana (Erly Casanova y Frank Luis Medina), los pinareños muestran el cuerpo de pitcheo más efectivo, al promediar cuatro carreras limpias permitidas cada nueve entradas.
Sin embargo, fue su poderío al bate el causante de esa actuación, gracias al veterano de 42 años William Saavedra, que por estos días le ha sacado chispas al madero.
Después de los juegos del domingo este slugger, marginado muchas veces durante su carrera a la hora de confeccionar selecciones nacionales, es líder en cuadrangulares (10), impulsadas (30), average (.539), slugging (1.192) y OPS (1.761).
Otro que escaló posiciones fue Granma (13-9), que se ubica ahora en el cuarto peldaño después de ganarle tres desafios a Matanzas (11-11), gracias a su defensa (primeros con .974) y a una ofensiva de escándalo que promedia para .354.
El equipo es liderado por Alfredo Despaigne, quien es segundo en vuelacercas (9), slugging (.778) y OPS (1.304), por Darián Palma (segundo en average con .477) y por Alexquemer Sánchez, tercero en jonrones (8) y segundo en carreras empujadas (28).
La serie continúa con números para el olvido con una media ofensiva de .299 y la mitad de los elencos por encima de .300, un promedio colectivo de carreras limpias permitidas de 5.53 y una pésima defensa de .966.
Este último departamento, cada día más afectado por la cantidad de pifias que se están cometiendo en los partidos, es reflejo de la baja calidad que impera en los campeonatos beisboleros cubanos.
En los primeros 171 enfrentamientos ya se han cometido 171 marfiladas. Esos números no incluyen aquellos errores que no van a los libros y que pululan en los terrenos por toda la Isla.
A partir de este martes comenzarán nuevos duelos particulares y ninguno de los cuatro mejor ubicados en la clasificatoria se enfrentarán entre ellos.
Ciego de Ávila visitará a Artemisa, Pinar del Río a Holguín, Industriales a Villa Clara y Granma será anfitrión de Sancti Spiritus.
En otros partidos, Las Tunas visitará a Mayabeque; Guantánamo a Matanzas, Isla de la Juventud a Camagüey y Cienfuegos a Santiago de Cuba.