Los Cocodrilos de Matanzas son los amplios favoritos para llevarse la corona en la II Liga Élite del Béisbol Cubano que comienza este sábado 6 de enero su etapa de semifinales.
Una característica de los torneos beisboleros en la Isla —más allá de la baja calidad mostrada en los últimos años— es la paridad existente entre los equipos involucrados (mucho más después de seleccionar refuerzos). Pero esta vez los de la "Atenas de Cuba" parecen invencibles.
Hasta los aficionados de los Leñadores de Las Tunas, rivales de los Cocodrilos en estos primeros playoffs, reconocen que en esta oportunidad parece imposible vencer a sus contrarios, como hicieron en la semifinal de la pasada Serie Nacional donde se proclamaron campeones.
Un éxito ha sido la gestión realizada por el director Armando Ferrer para incorporar a su equipo a figuras con experiencia en ligas profesionales que no viven en Cuba, aunque declaró en televisión nacional que son los mismos atletas los que lo contactan con ese fin.
Lo cierto es que la nómina de los saurios es tan fuerte que hombres de la talla de Alexander Pozo (líder de los bateadores), José Noroña (colíder jonronero) y Ariel Sánchez (le faltan cinco hits para acumular 2.000 en su carrera), no tienen garantizado un puesto de regular en estos desafíos.
"La matanza" de leñadores parece inminente, cuando los nueve jugadores que saldrán al campo han sido o son miembros del equipo nacional, y tres de ellos se desempeñaron en algún momento en las Grandes Ligas estadounidenses, considerada la mejor del mundo.
Erisbel Aruebarrena (Dodgers), Rusney Castillo (Red Sox) y Dariel Álvarez (Orioles), se unen a Yurisbel Gracial, un pelotero que vistió durante cinco años el uniforme de los Halcones de Softbank en la Liga Japonesa y fue elegido Jugador Más Valioso de la final de 2019.
Yordanis Samón, líder histórico en dobles en el béisbol cubano y considerado uno de los mejores bateadores de los últimos tiempos; Yordan Manduley, miembro durante años de la selección nacional, y Andrys Pérez, actual receptor titular, completan el listado. También sobresale Eduardo Blanco, un hombre poco mediático, pero de los más veloces y con el mejor brazo del país.
En el montículo los Cocodrilos también tienen fortalezas, sobre todo al contar con el mejor lanzador zurdo de Cuba (Yoennis Yera) y un cerrador de los más veloces (Armando Dueñas), que salvó siete partidos en la fase clasificatoria de este torneo.
Los Cocodrilos ya demostraron su potencial en la primera fase al dominar la tabla de posiciones (25-15) con una ventaja de cuatro juegos completos sobre los Cazadores de Artemisa y los Industriales de La Habana, los dos conjuntos que se enfrentarán a partir del domingo en el otro pareo semifinal.
Este cruce parece más parejo y será una batalla en la que los capitalinos tratarán de imponer su experiencia histórica en playoffs (acumulan 12 trofeos nacionales) ante un rival que aunque parece más fuerte en el papel jamás había llegado a esta instancia.
La carnicería pronosticada a favor de los matanceros también tiene un "pero" y, sin mencionar la máxima que "la pelota es redonda y viene en caja cuadrada", sus seguidores no olvidan aquellos siete años bajo el mando del polémico Víctor Mesa, cuando a pesar de exhibir el cartel de favoritos nunca pudieron subir a lo más alto del podio nacional (dos segundos y cinco terceros lugares).
Sin embargo, bajo las riendas de Ferrer, lograron en 2020 el primer campeonato en su historia con el nombre de Matanzas, hecho que espantó todos los fantasmas mentales que pudieran estar atacando a sus peloteros.