La firma italiana Teammate admitió un error en el envío a Cuba de las pelotas que se usaron en varios partidos de la Serie Nacional de Béisbol, varios de ellos correspondientes a los playoffs. El reconocimiento llega poco más de mes después de que los implementos despertaran críticas de jugadores y especialistas, por su negativa influencia en la ofensiva, principalmente en la producción de cuadrangulares.
De acuerdo a una publicación en Facebook del periodista deportivo de la prensa oficial Boris Luis Cabrera Acosta, en el programa Bola Viva, de la televisión estatal, se dio a conocer que la firma italiana había reconocido el error, que al parecer se debió a una confusión en la fábrica asiática que confecciona las pelotas.
"Dentro del cargamento enviado se incluyeron varias cajas de estas esféricas que se usan para los entrenamientos", citó Cabrera la explicación proporcionada en Bola Viva.
Teammate ofreció disculpas a la estatal Federación Cubana de Béisbol (FCB), a los peloteros y la afición. Además, se comprometió a cubrir los gastos de las pelotas que se empleen en la próxima edición de la Serie.
A mediados de julio, el propio periodista Boris Luis Cabrera llamó la atención sobre el hecho de que en 19 partidos de la postemporada del campeonato cubano de béisbol se habían producido solo 11 jonrones.
Sobre la pelota, escribió que "algunos la llaman 'pelota de trapo' y no están lejos de la realidad. Tiene poco bote, e incluso se deforma en ocasiones con una conexión fuerte".
"Para que tengan una idea, en la fase regular se pegó un bambinazo cada 59.3 turnos, y eso que se jugó una parte de la contienda con una pelota Batos que tampoco tenía la calidad requerida para nuestra liga", recordó entonces Cabrera.
En mayo pasado, a mitad del campeonato, la Comisión Nacional de Béisbol (CNB) anunció que la pelota con la que se jugaba en esos momentos en la Serie Nacional era la Batos, que había sustituido a la Teammate, empleada durante la primera mitad del torneo.
Pero la sustituida entonces no sería la misma Teammate empleada posteriormente en los playoffs de la Serie. Aquella, que provocó un desborde en la ofensiva del campeonato, en detrimento de los pitchers, era la Teammate 190.
La que se empleó en la postemporada "debe ser la Teammate 120 o 130", afirmó en una publicación el grupo de Facebook "Por la Goma", que las describió como pelotas con "menos bote y durabilidad".
El grupo aseguró además que ninguna de esas dos pelotas se emplea para jugar torneos de calidad sino para entrenar.
Varios aficionados que comentaron en aquel momento la publicación de Boris Luis Cabrera consideraron que las personas encargadas de comprar los implementos adquirieron el más barato y cuestionaron a la dirección del estatal Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER).
Teammate fue también la encargada de confeccionar los uniformes para la I Liga Élite del Béisbol Cubano, cuyo inicio debió retrasarse por la demora en la llegada de esos equipamientos.
Tres peloteros con experiencia en Series Nacionales parten de Cuba
La calidad y la escasez tanto de pelotas como de bates en el recién finalizado campeonato cubano de béisbol atentó contra el desarrollo de un torneo cuyo declive es evidente hace años, principalmente por la salida de peloteros.
Tres jugadores con experiencia en las Series Nacionales partieron de Cuba para continuar sus carreras en el béisbol profesional, informó en su blog el periodista deportivo Francys Romero, quien supo de estas salidas "por diferentes vías".
Los tres protagonistas de este nuevo capítulo del drenaje de peloteros que sufre el béisbol dentro de Cuba son Santiago Torres, Carlos Rodríguez y José Wilmer Durruthy.
Los dos primeros se encuentran en México esperando a realizar los trámites para viajar a EEUU y ambos integraron equipos Cuba, según Romero, que no informó sobre el paradero de Durruthy.
Torres, de 28 años y natural de Santiago de Cuba, participó en la Copa del Caribe celebrada en Curacao en 2021. También firmó por un breve periplo en el béisbol invernal de Panamá.
Sobre Rodríguez, de 20 años, Romero destacó que puede batear a las dos manos, mientras que a la defensa puede jugar en el campo corto y en la segunda base. Fue integrante de la selección nacional sub-23 que intervino primero en el Campeonato Panamericano de Aguascalientes (junio 2022) y luego en el Campeonato Mundial de la categoría en Taiwán (octubre de 2022).
También formó parte del equipo que asistió a los pasados Juegos de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), realizados en Venezuela en abril pasado. Participó en un solo desafío, con tres turnos al bate.
El tercer pelotero, Durruthy, es guantanamero y tiene 24 años. En la última Serie Nacional tuvo participación en cinco juegos, desde el bullpen, y lanzó cuatro entrdas.
Romero no se atreve a asegurar que estos jugadores podrán continuar sus carreras fuera de Cuba. Sin embargo, señala que la continua pérdida de peloteros debilita el evento nacional.
De acuerdo al periodista deportivo, en la actualidad Cuba pierde entre 50 y 60 jugadores establecidos por temporada.
En su opinión, ese sería el motivo por el que el INDER decidió finalmente eliminar el requisito de repatriación para los atletas interesados en participar en competencias nacionales.
