Contrario al triunfalismo y a la pretensión de mostrar la "superioridad de deporte socialista" que nos han acostumbrado, las autoridades cubanas no pretenden que la delegación que intervendrá en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023 recupere la primacía que perdió en la edición de Barranquilla 2018.
Así lo hizo saber el director de Alto Rendimiento del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER) y subjefe de la delegación cubana, José Antonio Miranda, en rueda de prensa este martes en el hotel Crowne Plaza, de la capital salvadoreña, de acuerdo al portal estatal Cubadebate.
La delegación, abanderada por Miguel Díaz-Canel el pasado 17 de junio, está integrada por 503 atletas. De ellos solo el 24% repite en eventos multideportivos regionales de este tipo, según el funcionario.
Miranda reconoció que, en estos juegos, la delegación de Cuba no mejorará el resultado obtenido en Barranquilla, Colombia, cinco años atrás, cuando fue desplazada por México del primer puesto que había ocupado desde la edición de 1970.
La era del dominio de Cuba parece haber terminado, para dar paso a la era de México, que, según análisis citados por el propio Miranda es el país "favorito para dominar el medallero" otra vez.
Si a Barranquilla se acudió con un pronostico de alcanzar 115 medallas de oro, basado en "un estudio científico acerca de cuáles pueden ser los resultados de cada disciplina", de acuerdo al entonces presidente del INDER, Antonio Becalli, para esta edición la pretensión es mucho más modesta: entre 70 y 80 títulos.
Los resultados de los atletas cubanos en Barranquilla, luego de prestar juramento ante la piedra de Fidel Castro en el cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, quedaron por debajo de los planes del INDER. Lograron solo 102 preseas doradas, 13 menos que las previstas por la "ciencia" y 30 menos que las alcanzadas por México.
La meta de alcanzar ahora entre 70 y 80 medallas de oro rebaja las expectativas y parece encaminada a evitar un fracaso tan sonado como el de Barranquilla.
Las principales esperanzas de triunfo de la delegación cubana se centran, según Miranda, en los deportes de combate (boxeo, lucha, judo, esgrima), el canotaje, pruebas del atletismo y deportes colectivos como el voleibol (masculino), polo acuático (masculino) y el balonmano y el hockey sobre césped en ambos sexos.
El ajedrez, que por primera vez estará presente en esta edición, podría dar a Cuba más de cinco títulos, dijo el funcionario.
En cuanto al béisbol, deporte en el que la selección cubana ocupó el segundo puesto en Barranquilla, Miranda dijo que se trató de conformar un equipo competitivo "porque aquí se concentra la calidad del área, con un evento fuerte y atletas que juegan en varias ligas de la región".
No obstante, los aficionados criticaron a la estatal Federación Cubana de Béisbol tras el anuncio del roster, en el que no fueron incluidos los líderes de la presente edición de la Serie Nacional de Cuba.
Tras el fiasco de la 2018 y las pocas probabilidades de volver a reinar en la edición que comenzará en dos días, el INDER parece haber recordado qué son realmente los Juegos Centroamericanos y del Caribe: "una fiesta", según expresó Miranda, quien añadió que "tenemos que aprovecharla de esa manera, porque el deporte tiene la virtud de unir, intercambiar culturas e ideas, y el objetivo fundamental es contribuir a que los Juegos sean un éxito".
El funcionario también dijo que los juegos deben servir para evaluar la preparación con vistas a los Juegos Olímpicos.
Los juegos centroamericanos se llevarán a cabo en un año en el que 29 deportistas cubanos han abandonado delegaciones oficiales durante eventos en el exterior. Esta cifra supera la de fugas que se habían producido para estas fechas en 2022. En ese año, la de la campeona mundial y medallista olímpica de disco Yaimé Pérez, ocurrida el 26 de julio, fue la número 22.
Durante todo el año pasado, según las cifras más conservadoras, 62 deportistas cubanos escaparon de delegaciones o abandonaron contratos en el exterior, establecidos a través de las entidades estatales de la Isla.