Para muchos seguidores del béisbol cubano, el director técnico Carlos Martí ha quedado en ridículo después de la bochornosa actuación en la Serie del Caribe de sus Agricultores, que finalizaron últimos del torneo con apenas una victoria en siete partidos.
Sin embargo, esta actuación, la peor de la historia de un equipo cubano después de su regreso a estas citas en 2014, parece ser la gran venganza del estratega contra los directivos del béisbol en la Isla, en la última competencia de su extensa carrera de 40 años.
Martí ya había adelantado en una conferencia de prensa antes del partido final de la I Liga Élite del Béisbol Cubano, en la que se coronó campeón con el equipo Agricultores, que su retiro estaba "al doblar de la esquina". De paso, aprovechó la transmisión en vivo por la televisión nacional para denunciar los males del nuevo torneo selectivo.
"Para mejorar este Liga Élite hace falta un sinnúmero de cosas. Me refiero a la logística, me refiero a la atención de los atletas, me refiero a buscar otras comodidades que debe tener una liga de este nivel".
"Yo creo que aquí en el playoff se ha visto bien, pero lo demás fue un desastre. No había esto, no había lo otro; es decir, hay que hacerles un monumento a los peloteros porque terminaron, la verdad que para la próxima serie los que están al frente de esto tienen que tener en cuenta que los artistas son los peloteros, son los que juegan, son a los que hay que darles atención, son a los que hay que subirles el salario, etc., etc., etc.", fueron sus palabras exactas.
Considero que por esa razón, Martí hizo caso omiso a las propuestas de refuerzos que la estatal Federación Cubana de Béisbol le puso sobre la mesa antes de viajar a la Serie del Caribe y apenas escogió a cuatro. Pienso que se llevó a los hombres que tanto sufrieron con él durante el campeonato, porque prefirió estimularlos antes de hacer el clásico "buen papel" y recibir la palmadita en el hombro que le dieron en las otras ocasiones.
El cuatro veces campeón nacional con los Alazanes había sido derrotado dos veces en semifinales en los años 2017 y 2018 con un equipo cuajado de refuerzos del equipo Cuba, pero esta vez fue diferente.
Con su vasta experiencia en los terrenos, Martí debía saber que su equipo no tenía el nivel para enfrentar ese torneo regional. Pero, en mi opinión, hizo lo que le dictó el corazón antes de colgar los spikes, debido a tantos años de injusticias y necesidades.
Nunca sabremos realmente si se trató de una venganza planificada, pero lo cierto es que los que los dirigentes en Cuba andan corriendo por los pasillos, porque saben que después de este gran papelazo puede que no sean invitados por largo tiempo a las Series del Caribe.
Lo que no quieren aceptar los directivos (al menos públicamente) es que, aunque hubieran desarticulado al equipo Agricultores para rellenarlo con peloteros de otras provincias, el resultado hubiera sido muy parecido.
El nivel real de la pelota cubana en la actualidad es el que se vio en el terreno: lanzadores que no llegan a 90 millas de velocidad, bateadores que no saben ajustar el swing y jugadores al campo que no dominan los fundamentos elementales de este deporte.
Mientras no venga un "huracán" que arrase con todo y se funde sobre las ruinas una liga profesional, las cosas seguirán igual…o peor. Estoy seguro de que eso también lo sabe Carlos Martí.
Cuba 0 vs. Burundi 8
No pasa nada. Lo destituyen echandole las culpas de todo el desastre y a otra cosa mariposa.
No pasa nada. Lo destituyen echandole las culpas de todo el desastre y a otra cosa mariposa.