El mundo del béisbol se paraliza cada año por una razón: la Serie Mundial, a la que sueñan con llegar todos los peloteros. La primera vez que Lou Gerihg jugó en una Serie Mundial se consideró el hombre más feliz del planeta. Tommy Lasorda, quien dirigió más de 3000 juegos en Grandes Ligas, dijo que ganar un Clásico de Otoño era lo más grande que le había pasado.
A pocas horas de que comience la Serie Mundial número 118 en la historia moderna de las Grandes Ligas, recapitulamos cinco actuaciones de jugadores cubanos, que quedaron en los anales del Clásico de Otoño. Pero antes, recordemos que tres cubanos intentarán ganar un anillo de campeón a partir del próximo viernes 28 de octubre: Yulieski Gurriel, Yordan Álvarez y Aledmis Díaz. Todos ellos representarán a los Astros de Houston.
Luis Tiant (Medias Rojas, 1975)
La hazaña sigue recordándose tras 47 años: el lanzador más grande que ha tenido Cuba en Grandes Ligas lanzó 25 entradas en la Serie Mundial de 1975, la mayor cantidad que ha sumado un cubano en ese escenario. Por si fuera poco, lo hizo contra la mejor ofensiva de la época, la gran maquinaria roja de Cincinnati.
Con dos salidas de nueve entradas y otra de siete en el juego seis, Tiant es uno de los 32 lanzadores que ha logrado al menos tres aperturas con al menos siete innings en una Serie Mundial desde 1905, año donde cambió el formato de nueve a siete choques.
No obstante, la joya que lanzó en el primer encuentro fue su mejor actuación. El derecho caminó la ruta completa sin admitir anotaciones; de esa manera, es uno de los 11 pitchers que ha tirado una blanqueada en el primer partido de la Serie Mundial, admitiendo cinco hits como máximo.
Las Medias Rojas de Tiant perdieron contra los Rojos de Tany Pérez en el séptimo y definitivo encuentro. Pero de igual forma, la actuación del "Tiante" contribuyó a que la serie se alargara. Esa sería su única aparición en una Serie Mundial.
Mike Cuellar (Orioles 1969)
Los Orioles de Baltimore asistieron por primera ocasión a una Serie Mundial en 1969 y Mike Cuellar era el as de aquel conjunto. Tom Seaver no pudo contra el villaclareño en el primer juego. El mejor lanzador de los Mets tuvo que marcharse tras lanzar cinco innings de cuatro carreras. En cambio, Cuellar solo admitió una anotación en nueve entradas para llevarse la victoria, la única que conseguiría su equipo.
Con solo tres días de descanso, Mike tuvo que tomar la bola para el cuarto juego. Esta vez, se marcharía tras siete episodios en los que permitió una vuelta la cuadro. Tras quedar eliminados los Orioles, Cuellar fue nombrado Cy Young de la Liga Americana junto a Denny McLain, marcando la primera vez desde que se entrega dicho premio, que dos serpentineros de la misma liga lo compartieron.
Jorge Soler (Bravos de Atlanta 2021)
Aún se recuerdan como si fueran hoy: los tres jonrones de Jorge Soler en la Serie Mundial del 2021 fueron fundamentales para que los Bravos ganaran el Clásico de Otoño después de 26 años. El cubano llegó a la franquicia de Georgia a mitad de temporada y tres meses después, se convertiría en el MVP de la World Series.
En general, Soler bateó de 20-6 y cuatro de sus imparables fueron extrabases. Todos sus vuelacercas sirvieron para darle la ventaja a su equipo. Pasarán muchos años y quizás otros cubanos brillen ofensivamente en la Serie Mundial, pero jamás olvidaremos que Soler fue el primer bateador de nuestra Isla en ganar un MVP esta serie.
Orlando "Duque" Hernández (Yankees 1998 y 1999)
La suerte jugó su papel, pero que eso no le reste mérito a lo que logró el Duque. Si bien lanzó para los Yankees y coincidió con una generación dorada, el capitalino respondió en los momentos apremiantes.
Después que abrió el importante juego cuatro de la Serie de Campeonato, Hernández se subió al montículo en el cuarto partido de la Serie Mundial. El derecho cubano sumó siete entradas de una carrera, permitiendo seis hits mientras ponchaba a siete rivales y otorgaba tres boletos. New York barrió a San Diego en esa serie.
Un año después, el Duque lanzaría 23 innings admitiendo tres carreras limpias entre la Serie Divisional y la Serie de Campeonato. Contra los Bravos en el primer choque del Clásico de Otoño, lanzó siete entradas en las que permitió una anotación. En ese encuentro, ponchó a diez rivales y marcó la primera ocasión en la que un cubano conseguía diez strikeouts en un juego de Serie Mundial. Los Yankees volverían a ganar con una barrida.
Liván Hernández (Marlins 1997)
En la campaña donde quedó segundo en la carrera por el título de Novato del año, Liván Hernández fue una pieza fundamental para que los Marlins ganaran su primera Serie Mundial. El hermano del Duque laboró en 13.2 innings en el Clásico de Otoño y en las dos salidas que tuvo alcanzó la victoria.
En el cuarto juego lanzó 144 pitcheos en ocho entradas. Al mismo tiempo, toleró seis carreras, ponchó a dos rivales y otorgó ocho bases por bolas. Fue la séptima y última vez que un pitcher sumó ocho boletos en un choque de la Serie Mundial. Aun así, Liván fue el MVP y se convirtió en el primer cubano en ganar ese premio.
Pudiésemos mencionar otras actuaciones como la de Tony Pérez en 1975 o la de Yuli Gurriel en 2019. También, las de Aroldis Chapman en 2016, José Contreras en 2005 y Adolfo Luque en 1919. Lo cierto es que nuestros jugadores han dejado sus huellas en el mayor escenario del béisbol. A partir del próximo viernes, tres cubanos tendrán otra oportunidad para escribir nuevas historias.