Cuatro jóvenes karatecas cubanos que viajaron la semana pasada a Guatemala para un entrenamiento abandonaron la delegación oficial, según revelaron fuentes al medio independiente Swing Completo.
De los nueve integrantes de la selección enviada a tierras guatemaltecas habrían escapado los jóvenes cienfuegueros Darian Díaz y Yaidel Hernández, la habanera Sunilda Ventosa y el santiaguero Gerardo Almenares.
Según el medio, la crítica situación que vive hoy el deporte en Cuba incluye a las artes marciales. La participación de los atletas en eventos fuera de la Isla depende de la ayuda de las federaciones internacionales.
Para la actual base de entrenamiento, que se desarrolla entre el 12 y el 20 de junio en las ciudades de Escuintla y Mazatenango, el Comité Ejecutivo del Comité Olímpico de Guatemala destinó una suma de poco más de 11.000 dólares (USD), para cubrir los boletos aéreos, alimentación, hidratación y seguro de viajes del conjunto cubano.
Bajo la dirección del entrenador Eliecer Llamos, un total de nueve atletas pusieron rumbo al evento de entreno, con escala en Panamá. El plan era que cinco hombres y cuatro mujeres se prepararan para competir en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023, pero con las fugas anunciadas el equipo nacional se queda con solo cinco integrantes.
En marzo pasado, la ex integrante del equipo nacional de karate-do Elisabeth Vasallo denunció la crisis de ese deporte en Cuba.
"Durante mucho tiempo se han destruido generaciones de karatecas del alto rendimiento, atletas con talento y condiciones especiales, ya sea por problemas personales o simplemente porque a alguien de la cátedra de la selección nacional no le caes bien o no eres de su agrado", apuntó la atleta a través de una publicación en Facebook.
"¿Hasta cuándo tenemos que estar dirigidos por una comisión que no hace nada por nosotros, que no busca maneras de desarrollarnos, que no es capaz de diferenciar lo personal de lo profesional? ¿Tenemos que seguir reprimidos y representados por quien no lo hace, que no son capaces de conseguir algo tan simple como una sala para realizar eventos y que nuestros niños puedan ver competencias de alto nivel que sirvan como motivación?", cuestionó.
Los jóvenes atletas cubanos no ven futuro en permanecer ligados al movimiento deportivo de la Isla. Ni la medida punitiva de impedir la entrada a Cuba durante ocho años a los calificados como desertores, ni las prebendas, como los vehículos entregados a finales de 2021 a un grupo de atletas, les han funcionado a las autoridades cubanas para frenar el salidero de deportistas que vive el país.
En mayo pasado el joven velocista Jenns Fernández abandonó la selección de la Isla en España, a donde viajó con otros atletas para prepararse con vistas a los primeros Juegos del Caribe de Guadalupe. En marzo, otro exponente del atletismo, el saltador de longitud Lester Lescay Gay, campeón olímpico juvenil en 2018, dejó la delegación durante una gira por Europa. A finales de ese mismo mes, se fueron del país los jóvenes veleristas Iris Laura Manso y Carlos Miguel Expósito.
Antes, había escapado el campeón juvenil Kevin Brown, durante el Panamericano de Boxeo de Ecuador. Lo siguió Herich Ruiz, medallista mundial de bronce.
En febrero, el piragüista Fernando Dayán Jorge, campeón olímpico en Tokio 2020, abandonó la delegación con la que iba a realizar un entrenamiento en México.
El equipo que asistió al Campeonato Panamericano de Lucha realizado en Acapulco, México, se despidió del evento con más deserciones (cinco) que títulos (cuatro). Entre los gladiadores que abandonaron la delegación sobresale el campeón olímpico y bicampeón mundial Ismael Borrero, quien escapó en cuanto arribó a México.
El último que apague el morro. Nuevos "ex cubanos" se han hartado de las bondades del castrismo.