Por falta de policías se suspendió el juego que debían disputar el sábado los equipos de Matanzas e Isla de la Juventud correspondiente al grupo A de la Liga Nacional de Fútbol, según publica Swing Completo.
El medio especializado subraya que, a diferencia de los estadios de béisbol, en los campos donde tienen lugar los partidos de fútbol en la Isla resulta muy fácil romper los límites entre aficionados y jugadores, lo que ha provocado varios incidentes lamentables.
Por este motivo, en el congresillo técnico se acordó que el equipo que juega como local debe garantizar la seguridad. Para el partido que debía celebrarse el sábado entre la selección pinera y la matancera, esta obligación correspondía a la Isla de la Juventud, sede del encuentro. Por tanto, al decretarse el forfeit, fue beneficiado el equipo visitante de Matanzas, que archivó el éxito con tres goles a favor y ahora exhibe balance de una victoria y un empate, tras dividir en su primer desafío.
El periodista pinero Antonio Lozada criticó, en un post citado por Swing Completo, que solo hubiera dos policías para la celebración de un juego de fútbol del campeonato nacional de primera categoría, lo que provocó la derrota de la selección de la Isla de la Juventud.
"Increíble, pierde la Isla de la Juventud ante Matanzas en el nacional de fútbol primera categoría por haber sólo dos agentes del orden público al momento del inicio del partido en Nueva Gerona por lo que fue suspendido el partido. No entendí nada, alguien puede explicarme para comprender está situación que sólo se da en el fútbol cubano", escribió Lozada.
A la derrota para los locales, se suma la pérdida de los recursos invertidos en la transportación de los matanceros a la Isla de la Juventud.
La selección pinera de fútbol, que tras esta derrota tiene balance de 0-2 enfrentará ahora al equipo de La Habana y luego al de Artemisa. No volverá a jugar en casa hasta el 5 de marzo, cuando la afición espera que no vuelvan a faltar policías para la celebración del partido.
La falta de agentes del orden para prevenir incidentes desagradables durante un evento deportivo contrasta con la cantidad de policías que desplegó el régimen para impedir la Marcha Cívica por el Cambio convocada por la plataforma Archipiélago, originalmente para el 20 de noviembre de 2021 y adelantada posteriormente para el 15 de ese mes, en vista de los ejercicios de la defensa anunciados por el Gobierno.
Durante los días posteriores a las protestas del 11J, las calles cubanas estuvieran militarizadas para amedrentar al pueblo y disuadirlo de volver a manifestarse.
Al régimen no le faltan recursos y agentes policiales para reprimir, sitiar y vigilar a activistas, opositores y periodistas independientes cubanos.
El pasado domingo, varias Damas de Blanco en La Habana y Matanzas fueron detenidas para impedirles asistir a misa. Desde que el grupo opositor anunció, tres semanas atrás, que retomarían sus protestas dominicales, de carácter pacífico, para pedir la liberación de los presos políticos, tras el parón a que las obligó la pandemia, han sufrido la represión del régimen.
