La brisa y la luz de Alicante
preludian una fuga
de eternidades íntimas.
*
Los luceros quisieran
ser partícipes de la dicha:
nos regalan su noche.
*
El corazón que ama
ilumina la mente:
vertiginoso, profetiza.
*
En mis manos tu libro,
tengo tu alma bajo mis ojos:
del dolor al sosiego.
*
Si continúa el diálogo
tiene a raya la muerte:
se descubre la plenitud.
*
Nuestra felicidad,
como la de los incunables,
es ser acariciados.
*
Los árboles se envuelven
en sus raíces. Y nosotros,
en nubes luminosas.
*
Por ser inaccesible,
sobre el Benacantil el mar
erigió su castillo.
*
Mar único el Mediterráneo:
caribeño en Cienfuegos,
íbero en Alicante.
*
Sin violines, Vivaldi
prodiga sus adagios
donde abrevamos nuestros sueños.
*
Debemos escribir
porque la música callada
necesita de intérpretes.
*
Armonizarse exige
transformar en poema
lo que no entiende de palabras.
Juana Rosa Pita nació en La Habana en 1939. Sus últimos libros de poemas publicados son Legendario 'entanglement' (Campanotto Editore, Udine, 2016), Se desata el milagro/ Si scatena il miracolo (El Zunzún Viajero, Boston, 2016), Imaginando la verdad (Deslinde, Madrid, 2019) y su Antología poética, 1975-2018 (Verbum, Madrid, 2019). Este poema pertenece a un libro en preparación.
