El carro de La Lechuza
el tétrico carromato
que se llevó a la Dolores
Rondón, vaya escaramuza
fue despreciar a fulano.
¡Muerta al hoyo! Desoír
a Yemayá, sense ibó
se hizo un destino cegato
¡cómo lo hubo zancajeado!
y al final se malogró.
Pelona de cejas y ojo
apagado, collar roto
—Comiste lo prohibido
te jamaste lo carnero
los hijos de Oyá no deben
ni las hormigas ni na’
¡Chupa curujey, gandía!
Cómete la cañavera
cómete lo tamarindo
y chirimoya y verbena
y pepino cimarrón
y deja a un lado el carnero
¡qué alcurnia ni qué porfía
te desgraciaste los días!
cierto que ella a nadie quiso
y a ella nadie le quería
Sobre la losa da grima
el vuelo de La Tiñosa
le reescribo el epitafio:
Calada por tantos brillos
de ampulosa a carcamal
en flatulencia reposa
mala muerte, coturnazo
necrópolis de la rima
¿coturno el vivir? bolsillo
prolijo el de su marido
ya ves te la da y te priva
finalizó su carrera
picada por la viruela.
La Pelona le aplacó
el ánimo respingado
el destino se amagó
se le atravesó a su sombra
una mulata tan fina
desuncía y no quería
a quien tanto le rogó
dejándolo sopeteado.
La Hüesuda, Ánima Sola
La Ánima Sola, de Ikú
Arun le echó escarlatina
o la viruela (una de esas)
Oyá yeye yeye o
arrayanes de color
desoír a Yemayá
comió tanta catibía
La Huesa la dejó tiesa
deshuesá tiesa sabuesa
la pica, la desengruesa
¡fó! tremendo belebele
morir en la porquería
¡fó! tan relinda que fue
¡ay Dolores Rondón yeye
yeye o!
Oyá oya, Oyá
¡Fó! tremendo mal olor
—Purupuru de color
ñamiñami prohibido
lo brucu te lo buscaste
y no pagaste el favor.
El cordófono resuena
el léxico se dilata
se reduplica el morfema
la polirritmia que truena
en los tambores batá
en bozal la tatarata
a la icónica mulata.
cierto que ella a nadie quiso
y a ella nadie le quería
Oloyade Ibariba Shekeshe
y oración del Justo Juez
y la del Santo Sudario
Oloyade Ibariba Shekeshe.
—Dolores Rondón, muchacha
la cabeza de concreto
hato de mula mulata
los asentados jamás
dicen su nombre secreto.
—Ya Rosie Inguanzo termina
mi alma en pena en su ulular
no le eches más mierda encima
no me achaques la podrida
no me quieras suplantar.
Kikiribú haz hincapié
que llegó la carabela
de Guinea, la batuta
de Andalucía negro curro
hallar el poema es
como poner rabo al burro.
Rosie Inguanzo nació en La Habana, en 1966. Escritora, actriz, performer, puede vérsele caracterizando a su alter ego, Eslinda Cifuentes, en las performances que realiza junto al violinista y compositor Alfredo Triff. Administra el blog tumiamiblog. Ha publicado la novela La Habana sentimental (Bokeh, Leiden, 2018), y los libros de poesía Deseo de donde se era (Nos y Otros Editores, Madrid, 2001) y La vida de la vida (Hypermedia, South Carolina, 2018).