crearé un nuevo apartado en mi lista de amigos de messenger
le llamaré con letras naranjas y mayúsculas
"PERSONAS QUE ME GUSTAN PERO QUE YO NO LES GUSTO"
y moveré tu nombre a ese grupo de nuevos amigos
y después te invitaré a mi apartamento en un pueblo de Abuc
diciéndote que busco a mi media naranja
y tú dirás "si no me gustas ¿por qué debería pagar un avión e ir a
tu país y a tu pueblo para convertirme en tu media naranja?"
y mirarás mi perfil y mi fotografía antes de venir a mi
apartamento en un pueblo lejano de Abuc
y yo tendré una respuesta sincera a tu pregunta
y te diré que vengas a mi dormitorio de animal para que nuestros
cuerpos sean amables
y mezclaremos los fluidos de nuestros cuerpos encima de mi cama
y después de una hora te irás en el autobús del pueblo al
aeropuerto para regresar a tu guarida en una ciudad lejana
y no me llamarás por el teléfono móvil ni me escribirás un mensaje
y yo tampoco te llamaré ni buscaré más tus correos electrónicos
y después de esa hora ya no me vas a gustar ni yo te seguiré gustando
y después de esa hora nos olvidaremos el uno del otro para siempre
y después de esa hora estarás sola y bellísima dentro de una caja de muerto
y yo tendré frío y estaré también muy solo dentro de mi ataúd
Dolan Mor nació en Pinar del Río, en 1968. Su libros publicados más reciente son Antología de Spoon Raven (Candaya, Barcelona, 2019) y En los extramuros de Zaragoza. Poemas escogidos (Verbum, Madrid, 2021). Este fragmento pertenece a la novela La máquina plagiadora (Verbum, Madrid, 2022).
De su nota de contracubierta: "La máquina plagiadora es una novela escrita por una mujer loca que permanece ingresada en un manicomio de Berlín. En sus páginas se narran los acontecimientos de una futura distopía donde tendrán lugar las manifestaciones del 11 de julio en Cuba (Abuc). Pero la narradora, que se presenta desde el inicio como una máquina inteligente, no lo hace de la misma manera en que se desarrollan las historias de una novela convencional, sino a través de la fragmentación de una no-novela. Para lograr su objetivo la máquina se apoya en las teorías de la escritura no-creativa de Kenneth Goldsmith, tomando como modelo el Libro de los pasajes de Benjamin (mezcla, por ejemplo, narraciones, ensayos, poemas, artículos de periódico, fotografía, denuncias solapadas, reseñas, etc.). Las técnicas de la pintura y del montaje en el cine son aplicadas en esta no-novela como si fuera un collage literario, y no son otras que las que usaron Picasso en Naturaleza muerta con silla de rejilla o Duchamp en la Fuente. Un libro inclasificable que anuncia una distopía mundial en el futuro y la sustitución de los autores por máquinas inteligentes."
