¿Qué duele, isla esgrimida?
¿Qué isla duele prendida?
¡Qué pérdida duele, isla
que nos echa de por vida!
Isla transida, qué renga
a cárcel o exilio avenga:
Luisma, Maykel, Lavastida.
Ay qué paraíso erguida
hay enjundia retorcida
o ay qué afilada la herida
o enfilada y mal habida
en un punto de partida
ahí en el monte transida
caimán caimito cautiva
caimito majá y jutía
hay el olor del café
con leche, isla abatida
hay palma prevalecida
¿es monte o palma fluida?
Si en desgracia, que se atenga
a cárcel o exilio avenga:
Luisma, Maykel, Lavastida.
La pérdida deja exida
isla en que nunca asenté
aun vagué, rondé, bogué
aún transito cierta vía
un portal y una niñez
pálida rosa manida
untada en agua florida
siendo el vaivén de la orilla
la música de mi vida
relamida isla, la herida
isla dorsal, regresiva
aquí en tinta resentida.
Locus-papel, mi realenga
a cárcel o exilio avenga:
Luisma, Maykel, Lavastida.
Terral, terrenal, traía
cubaneos que dolían
dólar redoler, punida
vida, revivir dolida
mitigar lo que mullía
si a punto llego a rimar
doleduras dolorida
isla, hoy se juega la vida
entona su aria pungida
(en la síncopa acrecida)
pletórica y malcomida:
—Maquinaria represiva:
¡Patria, libertad y vida!
Del mecanismo verbal
reguetón devocional:
Luisma, Maykel, Lavastida.
Rosie Inguanzo nació en La Habana en 1966. Actriz y performer, puede vérsele caracterizando a Eslinda Cifuentes, en las performances que realiza junto al violinista y compositor Alfredo Triff. Administra y escribe el blog tumiamiblog. Ha publicado el libro de narrativa La Habana sentimental (Bokeh, Leiden, 2018) y los libros de poesía Deseo de donde se era (Nos y otros Editores, Madrid, 2001) y La vida de la vida (Hypermedia, Miami, 2018).