El poeta cubano Delfín Prats, una de las víctimas de las purgas contra los intelectuales cubanos en la década de 1970 y perseguido durante años por ser homosexual, se hizo acreedor del Premio Nacional de Literatura 2022.
El jurado, presidido por el exministro de cultura Abel Prieto, e integrado por los escritores Rigoberto Rodríguez Entenza, Enrique Pérez Díaz, Cira Romero y Julio Travieso, decidió reconocer al poeta, narrador y traductor "por su destacada obra en más de cinco décadas".
El galardón, que había sido reclamado para Prats por parte del gremio intelectual cubano durante muchos años sin éxito, significa que la Feria Internacional del Libro 2024 le será dedicada y en esa ocasión su obra podría ser reeditada.
Aunque en sus notas informativas los medios oficiales cubanos apenas hacen referencia a la obra de Prats, la oficial agencia Prensa Latina se limitó a señalar que el escritor nació el 14 de diciembre de 1945 en La Cuaba, localidad rural de Holguín, estudió Filología y Lengua Rusa en la Universidad Lomonosov de Moscú, y que es autor de libros como Lenguaje de mudos, Para festejar el ascenso de Ícaro, Cinco envíos a arboleda, Abrirse las constelaciones, Lírica amatoria, El esplendor y el caos, Striptease y eclipse de las almas, Exilio transitorio, y que fue incluido en El huracán y la palma. Antología de la poesía cubana.
La nota evitó mencionar que la primera edición de Lenguaje de mudos, Premio David de la oficialista Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) en 1968, fue reducida a pulpa casi en su totalidad, y que su autor estuvo sin publicar hasta 1987. El libro censurado, que fue editado en España en 1970 por Ediciones El Puente, no vio la luz en Cuba hasta 2012, en Holguín, por Ediciones La Luz.
En ese periodo de tiempo, aparte de ejercer diversos oficios para sobrevivir, Delfín Prats estuvo preso en el Combinado del Este y fue perseguido por la policía política por su amistad con el escritor Reinaldo Arenas, quien lo convirtió en uno de los personajes de sus libros Antes que anochezca y El color del verano.
El escritor, quien vive en Holguín y trabaja en la promotora literaria Pedro Ortiz de esa ciudad, ha sido rehabilitado en los últimos años, cuando las autoridades culturales le entregaron la Distinción por la Cultura Nacional y el Premio Maestro de Juventudes en 2009, que entrega la oficialista Asociación Hermanos Saíz (AHS).
No obstante, la enciclopedia oficialista Ecured señala en su escueta nota biográfica que "aunque no lo avala una extensa y prolífica bibliografía, la crítica literaria dentro y fuera de Cuba consideran que su obra se inscribe en un lugar cimero de la literatura".
Delfín Prats fue la inspiración del personaje protagónico de Santa y Andrés (2016), de Carlos Lechuga, cuya representación de un escritor homosexual y crítico del régimen no fue avalada por los censores del régimen. Hasta hoy, su exhibición sigue estando prohibida en Cuba.
El régimen siempre oportunista. Antes de que se les mueran los „emblemáticos“, golpeados por la edad, la desidia y la indiferencia de 60 años de dictadura, se los apropia con un premio o condecoración y la inmoralidad del fariseo.
Estimado Amadeus, algunos no alcanzaron a ver en vida la "apropiación". Entre los grandes, recuerdo ahora el caso emblemático de Lezama, que ya con un edema corporis mortal, debieron romper la ventana de su amada casa para extraerlo e impedir que muriera entre su papelería sin asistencia médica. Operación realizada gracias a la "oportuna" intervención de Retamar. Otra fue la de Virgilio, que falleció después de un fuerte debate-interrogatorio en Villa Marista, Enrique Santiesteban que lo llevó al Hospital de Emergencias, lo contó en el velorio. Saludos.
La apropiación funciona mejor cuando la figura apropiada ha muerto y ni hay que contar con ella ni puede hacer nada al respecto, a no ser que haya tomado medidas preventivas en vida para evitar ser apropiada (como es el caso de Cabrera Infante y de Arenas).
Dear Johnny, tiene razón, pero entonces eran más ortodoxos en un tiempo Nosferatu dictaba y mangoneaba a todos. Hoy en el ocaso de las ilusiones tienen que esforzarse en limpiar y mejorar la maldita imagen que tienen en el extranjero.
Dear Johnny, tiene razón, pero entonces eran más ortodoxos en un tiempo donde Nosferatu dictaba y mangoneaba a todos. Hoy en el ocaso de las ilusiones tienen que esforzarse en limpiar y mejorar la maldita imagen que tienen en el extranjero.
OLPL lee a Delfín Prats... https://www.youtube.com/wat…
Con la paciencia de Job...
A Delfín Prats lo recuerdo junto a Rogelio Fabio Hurtado frente a Coppelia en un ambiente como de conspiración --poética, claro-- pues estaba en plena efervescencia aquella política cultural radical que pretendía dar sólo a los revolucionarios heterosexuales licencia para escribir e imprenta para sus libros.
Resulta misterioso por qué decretaron el asesinato cultural de aquel guajirito revolucionario cuyo único pecado era un discreto comportamiento "inadecuado" perdonado a otros. En fin, que la figura delictiva "homosexualidad ostensible" no aplicaba al joven bardo recién graduado en la "hermana" URSS.
Apenas sentados en las incómodas sillitas de alambrón de la mítica heladería, Delfín desenfundó un fajito de papeles manuscritos y entre Fresas y Chocolates pronto nos vimos sumergidos en la poderosa atmósfera propia del poeta.
El tiempo confirmó en Prats su notable poesía y amor al suelo cubano. Por ello merecería muchos premios más y sobre todo ser conocido en su país natal.
Ese "comportamiento inadecuado" era perdonado a otros como Alfredo Guevara y Miguel Barnet a cambio de ser confiables y útiles esbirros culturales, o sea, definitivamente no era por gusto.
Don Mario—- Guevara y Barnet siempre fueron sumisos, temerosos de Dios, al contrario de Prats que ya tenía un curriculum maldito. Esa es la diferencia. No es que haya sido perdonados, sino que Guevara y Delfín entraron finalmente por el aro; de uno u otro modo y eso se perdona.
Guevara ya era esbirro antes de 1959; parece que se dió cuenta muy temprano que si quería llegar a ser gente grande con su "problemita personal" tenía que ser a base de estar muy bien apadrinado.
Estimado Mario Encino, a Alfredo Guevara lo hicieron morir frustrado añorando su más querida ambición, ser Ministro de Cultura. Miguel Barnet sufrió lo indecible en los primeros años. A veces se le veía lacrimoso contando las canalladas de las que era objeto. Probablemente su lucha por ascender fuera una pelea contra los demonios. De ser cierto, sus exorcismos resultaron eficaces, pues morirá en olor de santidad revolucionaria. Saludos.
No dije que todo les fue de maravilla, y mucho menos que lo merecieran, pero se les permitió llegar mucho más lejos y alto que a Prats a pesar de la misma "conducta impropia," y eso fue a cambio de que ambos se prestaron a servir de esbirros culturales (aunque de una "cultura" viciada).
Buen síntoma del desmoronamiento del régimen... Lenguaje de mudos retorna victorioso, aunque nadie podrá borrarle a Delfín los ostracismos, las humillaciones que influyeron en su alcoholismo, hasta las sospechas de que ha padecido alguna forma de masoquismo.
No conozco los detalles de esta aparente "rehabilitación," pero espero que no haya sido a base de algo a lo Miguel Barnet, ya que la "revolución" le ha costado bastante más cara a Prats que al otro (aunque al otro le costó su dignidad, o lo que tenía de ella).
No sé que se pueda sentir al recibir un Premio de personeros que te discriminaron y te patearon el trasero tal vez sea alguna sensación de dulce venganza solo el lo sabrá.Al leer la nota me pareció conocido y por la lectura del artículo supe que el fue protagonista de libros escritos por el Gran Reinaldo Arenas.Espero que disfrute su bofetada sin manos a esos energúmenos que hoy lo premian.
Podría haberle dicho a los personeros que lo premiaron, lo mismo que Fray Luis de León a sus alumnos: "Como bien les decÍa ayer"
P
Po
Pod