El Ministerio de Cultura (MINCULT) ha creado un sitio de vacunación contra el Covid-19 en la Casa Museo José Lezama Lima, en Centro Habana, que fuera la vivienda del escritor cubano más importante a los que el castrismo condenara al ostracismo.
En ese lugar, donde se inocula a vecinos de la zona el inyectable cubano Abdala, tras lo cual estos permanecen unos minutos bajo observación por técnicos sanitarios, especialistas del estatal Consejo Nacional de Patrimonio y de la dirección de la Casa Museo realizan conversatorios con los asistentes sobre el autor de Paradiso y La expresión americana.
De acuerdo con el reporte de la revista electrónica del MINCULT La Jiribilla, "la oportunidad de respirar los aires de uno de los escritores de todos los tiempos es un privilegio para aquellos cubanos que en las salas de la casa donde viviera el escritor, ensayista, narrador y poeta José Lezama Lima, han permanecido en observación después de haber sido inmunizados contra la Covid-19 con la vacuna Abdala".
Se trata, asegura el artículo, de una iniciativa del MINCULT para que los artistas puedan "acompañar el proceso de vacunación desde el arte y la cultura", y en el que han participado artistas afines a las autoridades de todo el país.
Los conversatorios, dice el texto, incluyen detalles sobre la vida de Lezama y se comentan títulos suyos hoy considerados imprescindibles dentro de la literatura cubana, como Analecta del reloj (1953) y Tratados en La Habana (1958).
Según La Jiribilla, estas actividades funcionan como "un homenaje, quizás sin quererlo, a quien en este mes de agosto, pero de 1976, falleciera por el asma y sus secuelas".
La nota no menciona que el escritor murió en el ostracismo y bajo vigilancia de la Seguridad del Estado del régimen en esa misma casa.
El nombre de Lezama Lima fue uno de los mencionados por el poeta Heberto Padilla en su tristemente célebre confesión después de permanecer detenido por la policía política. Padilla incluyó a Lezama en una relación de conocidos intelectuales calificados como "contrarrevolucionarios" por el régimen.
El autor, que en los primeros años después del ascenso al poder de Fidel Castro ocupó cargos oficiales en la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), luego fue víctima de la censura.
Un documento descubierto en Berlín por el investigador cubano Jorge Luis García Vázquez en los fondos de la Stasi, la policía política de la antigua Alemania socialista, demostró que Lezama fue uno de los autores acusados como "diversionista" en una exposición abierta al público en La Habana de 1974 y organizada por el Ministerio del Interior (MININT) cubano. Entre lo expuesto estaban textos en proceso ocupados al autor mientras vivía.
Pese a que después de su muerte el régimen cubano ha tratado de rescatar el legado de Lezama para su propio canon, consagrando incluso su vivienda como Patrimonio Nacional, nada de lo anterior forma parte de su biografía oficial.
La mayoría de los que mencionan a Lezama no lo han leído, apenas con alfileres toman datos. ¿Por qué no invitan a Abel Prieto a vacunarse con Abdala?
Me pregunto si a Lezama le hubiera gustado todo este jelengue comunista en su casa... Tomando en cuenta además, que hasta las autoridades represivas le robaron manuscritos de su obra -sin su consentimiento- para exponerlos en la citada exposición de la Stasi -donde se le acusaba de desafecto al régimen y se reconocía que se le espiaba-; lo que hace pensar, que es casi seguro que entre las paredes de esa casa, sobrevivan otros objetos puestos allí por la Seguridad del Estado, ¿para proteger a Lezama y cuidar de su salud?
Un dato para San Antonio de los Baños:
Esta canción Silvio se la hizó a la aldea y clama por ¡LIBERTAD!
https://www.youtube.com/wat…
Aquí la letra:
Cuando yo era chiquito todo quedaba cerca cerquita,
Para llegar al cielo no más bastaba una subidita.
El sueño me alcanzaba para ir tan lejos como quería,
Cuando yo era chiquito yo si podía, yo si podía.
Libertad, libertad, libertad para mi niño.
Libertad, libertad, libertad, libertad.
Cuando yo era vejigo me iba p'al río porque era hermoso,
Aunque estaba prohibido por peligroso, por peligroso.
Como jagüey why ceiba, como la palma why la yagruma.
Cuando yo era vejigo yo era del monte why soñaba espuma.
Libertad, libertad, libertad para mi niño.
Libertad, libertad, libertad, libertad.
Cuando yo era un enano viví pasiones tan memorables
Con los zapatos rotos why la sonrisa menos amable.
Tierra bajo las uñas, manos sin pena tocando mundo
Cuando yo era un enano era profundo, era profundo.
Libertad, libertad, libertad para mi niño
Aparte de ser ridículo --porque yo quisiera saber qué tiene que ver Lezama y su obra con una pandemia y sus vacunas--, el colmo es que el régimen ese de la Continuación de Fidel Castro, quiera congraciarse con quien fue acusado de diversionista, acosado y vigilado. Esa era la acusación al uso a quienes no se les podía probar actos de "contrarrevolución". En ese saco metían lo mismo a un escritor y poeta, que a profesores de marxismo.