Suspendida la Feria del libro, que debió ocurrir este febrero, se organiza el evento online "Marzo Literario", que pretende cubrir en algo su falta y se hace por iniciativa de algunos promotores, autores y periodistas, con el apoyo de algunas instituciones, como Fondo Editorial Casa de las Américas, el Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso y la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.
El evento tendrá lugar del 19 al 25 de marzo de 2021 en Facebook, Telegram, Ivoox y YouTube. "El asunto, tras el vacío provocado por la ausencia de la Feria del Libro en 2021, era que los lectores, los autores, y los editores y promotores de la literatura no se quedaran “huérfanos” de eventos y espacios donde manifestarse», dijo Rafael Grillo, jefe de Redacción de El Caimán Barbudo, una de las entidades que promueve el evento, al periódico oficialista Juventud Rebelde.
La iniciativa quiere tomar las redes y propiciar otras formas de divulgación de autores y libros que privilegien el mundo digital. Llega en un momento de especial crisis para la nacional industria editorial, que desde hace dos años no saca apenas libro impreso de autor cubano o extranjero debido a la sucesión de aprietos financieros en los que se encuentra el país.
Marzo literario propone book´s trailers, lecturas, presentaciones, conferencias y debates. Habrá talleres que discutan la promoción literaria en el ciberespacio, los nuevos formatos del libro, otras maneras de asumir el negocio editorial y la literatura infantil. Roy Ávalos y Alex Díaz de Oralitura Habana impartirán lecciones sobre la décima oral y escrita, y “proyectos de autor” como Isliada, La Estantería Cubana, Claustrofobias Promociones Literarias, La Jeringa, Librería La Tertulia de La Habana, el Proyecto Callejas, Discurso de Eva, El Zumbido, Espacio Abierto, Axioma, Vórtice, Manifiesto y Amanecer en Santa Clara estarán presentes.
La revista Somos jóvenes, entusiasmada, le dedica esta hipérbole "Marzo literario: ¿Quién dijo que no había Feria?" Obviamente no será para tanto. Incluso si constituyera una estricta Feria del libro, tampoco sería tanto. Hace años que La Feria mengua en lo literario mientras aumenta en lo gastronómico, los autores parten hacia el exilio o se retiran al insilio, las editoriales extranjeras salen azoradas por los robos o por la ausencia de mercado y la polémica se ausenta en general de su oferta (tanto han procurado la censura, que apenas si se interroga ya, y si se hace, no se nota).
Sin embargo, Marzo literario podría traer cierta vida a la exhibición literaria nacional de las instituciones. No por lo que ellos dicen —la ilusión de un nuevo soporte promocional—, sino porque al ocupar las democráticas redes, quedará más expuesto lo que hay, el estado literario institucional real, y se abrirá a la crítica. Por otra parte, la interacción con el público será más libre e inmediata, al sacar provecho de las nuevas tecnologías, como por ejemplo en el chat de Telegram que ya abre el evento. La Feria del Libro solía ser una depauperación distante. Este evento online puede ser una decadencia dialogada, y eso da esperanzas.
