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Accidentes

Fallece el trabajador lesionado tras la explosión en la fábrica de asfalto de Sancti Spíritus en diciembre

La víctima, Alexey Díaz Salas, de 48 años, había sido señalado por el MININT como culpable del accidente.

Sancti Spíritus
Planta de asfalto de Sancti Spíritus poco después de la explosión.
Planta de asfalto de Sancti Spíritus poco después de la explosión. Escambray

El trabajador lesionado a raíz de la explosión en la fábrica de asfaltos en Sancti Spíritus el pasado 24 de diciembre, falleció luego de luchar varios días "contra las quemaduras que le cubrían el 60% de su cuerpo", informó en su perfil de Facebook el periodista oficialista local Yosdany Morejon Ortega.

La víctima, Alexey Díaz Salas, de 48 años, fue señalado como culpable del siniestro, tras una investigación llevada a cabo por un equipo del Ministerio del Interior (MININT), que determinó que la explosión ocurrida en uno de los tres tanques que almacenaba el líquido conocido como RC, empleado en la fabricación del asfalto, se debió a un accidente provocado por Díaz Salas, sin que mediara intencionalidad o sabotaje alguno.

Según el teniente coronel Alexander Ávalos Jorge, jefe del Cuerpo de Bomberos del territorio, el poco líquido que acumulaba el tanque favoreció la concentración de gases volátiles, originados de sustancias como la nafta que componen el llamado RC.

En palabras del oficial del MININT, el mechero que portaba Díaz Salas originó el estallido: "Dicho trabajador se desempeñaba como el candelero de la planta y al pasar cerca del tanque con un mechón en la mano se creó entonces la fuente de ignición".

Por su parte, el teniente coronel Félix Pérez Ríos, jefe de la Unidad de Enfrentamiento de la Especialidad de Avería, Explosiones e Incendio del MININT, indicó que Díaz Salas "debió apagar el mechero antes de acercarse al tanque siniestrado, pero quedaron carbonillas o partes incandescentes que entraron en contacto con las moléculas de nafta", confirmó 

"La mezcla explosiva de los vapores absorbió esta fuente de ignición y, si se toma en cuenta que se trataba de un tanque diseñado para almacenar 40.000 litros y que solo contenía cerca de 5.000, hablamos de una gran capacidad vacía donde se concentran los gases. Como no existe oxígeno en el interior del recipiente sino vapores que provocaron esta mezcla explosiva, el incendio trata de liberarse y originó la explosión", explicó Ávalos Jorge.

El incidente provocó el derrame de más de 2.113 litros del líquido RC, así como la destrucción total del tanque que lo almacenaba, para un total de 23.000 pesos en perjuicios materiales.

A raíz de lo sucedido la pregunta es, ¿por qué este trabajador, para llevar a cabo las labores de vigilancia en el área, debía alumbrarse con un mechón ―con el peligro que supone al estar rodeado de material inflamable― y la fábrica de asfaltos no le proporcionó una linterna para ejecutar dicha labor?

En tal sentido, al presentar sus condolencias por las recientes explosiones en un almacén militar en Holguín y exigir respuestas al régimen, el Consejo para la Transición Democrática en Cuba suscribió, y viene a colación con el accidente en Sancti Spíritus: "El riesgo de seguridad pública aumenta para las y los cubanos dada la magnitud de este desastre. Nos preguntamos si todos los estamentos del pueblo cubano están condenados a la precariedad por la falta de mantenimiento y cuidado de las instalaciones públicas".

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1 comentario

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La "culpa" fue del pobre trabajador que a lo mejor en su vida recibió ni un curso de seguridad e higiene en el trabajo, ni le suministraban el equipamiento necesario para efectuar su trabajo, total, un esclavo se sustituye por otro y pelillos a la mar. Esos degenerados no tienen perdón de Dios, ni humano tampoco.