La llegada de más médicos cubanos a México sigue generando críticas al interior de la sociedad del país, además de importantes señalamientos al oficialismo desde varias instituciones políticas y la prensa local.
"La contratación de médicos cubanos se presenta como una medida de cooperación y solidaridad para regiones marginadas, pero detrás de estas declaraciones opera un sistema profundamente explotador", escribió en su columna del periódico El Heraldo la presidenta de la Organización Demócrata Cristiana de América, Mariana Gómez del Campo.
"Aunque parece una estrategia para atender la falta de personal médico, encubre una cruda realidad: el uso de trabajadores de la salud cubanos bajo un esquema de trata de personas, denunciado internacionalmente y fomentado por acuerdos opacos entre el gobierno mexicano y el régimen de Díaz-Canel", criticó.
Gómez del Campo destacó, asimismo, que "estas prácticas violan derechos humanos fundamentales, pero el Gobierno mexicano ignora las denuncias y las implicaciones éticas de este modelo". "Esta política no responde al desabasto de médicos en el país, sino a la cercanía ideológica del Gobierno mexicano con el régimen cubano", subrayó, al tiempo que enfatizó que los especialistas de la Isla son "mercancía para sostener la economía cubana mediante su explotación".
De igual forma, la columnista y política mexicana señaló que, mientras las autoridades del país brindan un trato preferencial a los galenos cubanos, "miles de médicos mexicanos desempleados enfrentan condiciones laborales precarias y bajos salarios. En lugar de fortalecer el sistema de salud nacional, el Gobierno destina recursos a este esquema, violando tanto los derechos de los médicos cubanos como los principios de justicia laboral para los profesionales mexicanos".
"Con esta decisión, el Gobierno mexicano se coloca nuevamente del lado incorrecto de la historia. No nos cansaremos de denunciar este hecho a nivel internacional, porque el mundo tiene que saber que las misiones de médicos cubanos son sinónimo de esclavitud moderna que México apoya y, perpetúa", concluyó.
La semana pasada llegaron a México 199 médicos cubanos de 29 especialidades, con ellos, suman más de 3.000 los galenos de la Isla en dicho país, en medio del resquebrajamiento integral del sistema de salud cubano, marcado por la falta de insumos, equipos y personal sanitario.
Según publicó en octubre el diario local Reforma, México gasta un promedio de 100.000 pesos mensuales (5.125 dólares) por cada uno de los médicos cubanos contratados, mientras el salario, de 27.000 pesos mensuales por cada uno de los profesionales (más de 1.300 dólares), es depositado en una empresa estatal de La Habana.
La contratación de médicos cubanos por parte del Gobierno mexicano no ha estado libre de polémicas. En enero de 2024, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) de México acusó al Gobierno de Cuba de embolsarse el 94,4% del salario de los médicos enviados al territorio mexicano durante la pandemia del Covid-19, cuando se produjo la primera exportación de esos profesionales a la nación vecina.
Dicha acusación está en consonancia con los señalamientos de la ONU al régimen cubano por la persistencia de las violaciones de los derechos de los trabajadores exportados, en especial los médicos enviados a "misiones internacionalistas". En una carta enviada a la representación de la Isla ante el Consejo de Derechos Humanos por Tomoya Obokata, Relator Especial sobre las formas contemporáneas de la esclavitud, incluidas sus causas y consecuencias, este advirtió que ha continuado recibiendo acusaciones acerca de un patrón que califica, entre otras violaciones, como "trabajo forzoso".