Miguel Díaz-Canel llegó el miércoles 23 de octubre a Guantánamo, territorio en el que hay amplias zonas aisladas debido a las inundaciones generadas por las lluvias de la tormenta tropical Oscar, que afectó a ese territorio con categoría de huracán y provocó hasta el momento siete víctimas mortales confirmadas oficialmente.
Junto al primer ministro Manuel Marrero y varios funcionarios, el gobernante viajó al municipio de San Antonio del Sur, uno de los más afectados, a cuyos pobladores aseguró que "no están solos ni abandonados. Cuba está en función de ustedes", citó el sitio oficial Cubadebate.
Los dos funcionarios llegan a la zona golpeada entre domingo y lunes por lluvias que mantienen anegados poblados del municipio de Imías 72 horas después del desastre. Según las autoridades locales, en el área hay 6.000 personas y 4.000 núcleos familiares aislados.
En X, Díaz-Canel escribió: "Estamos, desde la madrugada, en las zonas más afectadas por Oscar en Guantánamo. Los daños son tan severos que sobrecogen. Solo los supera el espíritu de este pueblo, de una resiliencia admirable. Fuerza Guantánamo. No están solos. Toda Cuba está llegando".
La comitiva visitó también Maisí, donde según el reporte de Cubadebate los principales daños se concentran en la vivienda, la infraestructura estatal y en menor medida las redes eléctricas.
El gobernante aseguró a los habitantes de la región que recibirán alimentos, agua, brigadas de eléctricos, médicos, y todo lo que haga falta, aunque no se aclaró de dónde procederán tales recursos. La Empresa de Bebidas y Refrescos Las Tunas envió a las regiones afectadas "un camión de refrescos concentrado (sirope) a los damnificados", informó el Grupo Empresarial de la Industria Alimentaria.
Mientras, el mayor César Eduardo Cross Licea, segundo jefe del Departamento de Operaciones del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, dijo en el espacio televisivo de la Mesa redonda que unas 4.865 personas se encuentran protegidas en centros de evacuación en Guantánamo, mientras que otras 443 se resguardan en viviendas de familiares, amigos y vecinos.
De acuerdo con el funcionario, son 2.282 las casas dañadas por el evento meteorológico, de las cuales 1.183 sufrieron derrumbes totales de techo, 1.048 derrumbes parciales de techos y 51 derrumbes totales.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) habían realizado hasta el martes último 493 rescates, explicó, "lo cual ha permitido evitar la pérdida de vidas humanas en zonas inundadas".
Según un reporte de la estatal Agencia Cubana de Noticias, en San Antonio del Sur Carlos Luis García Rodríguez, trabajador bancario residente allí, contó que cuando entró el agua de la inundación a su vivienda y comenzó a ascender rápido, "encaramó" a la familia a la altura del cerramento, y él se subió a una silla, hasta que bajó un poco y pudieron salir.
"Trepados en armarios, en los techos de las casas y en los árboles, la gente salió a pelear por su vida como pudo, en una lucha contra la corriente embravecida, que en cuestión de minutos aumentó su caudal y su fuerza, a niveles nunca antes vistos por aquellos lares", indicó la nota.
En 24 horas, hasta las 8:00AM del lunes, las montañas al norte de San Antonio del Sur recibieron más de 355 milímetros de lluvias, 278 mm de ese total entre la una y las cuatro de la madrugada.
Por esa razón, los ríos Los Ciguatos y Sabanalamar se desbordaron y entraron el cabecera municipal, afectando a 6.000 de sus 8.000 habitantes. El municipio de Imías está incomunicado por tierra desde el domingo, tras la rotura de puentes y viales.
Y eso fue un viento platanero comparado con lo que fue Flora. ¿A cuántos de los damnificados se llevará el puesto a dedo para su casa?
Xing Jao ... que no oculte la sumatoria de muertos ... son mucho más de siete ...