El humorista cubano Ulises Toirac denunció en su perfil de Facebook que las autoridades culturales y represivas del Gobierno cubano suspendieron una presentación suya programada par este sábado en la sala Ateneo, de Cienfuegos.
"Yo ya no tengo nada que decir que no haya dicho. Más allá de negarle trabajo a una persona por sus ideas o por lo que dice, la manera en que el poder deja claro que es imposible hablar con libertad es brutalmente cobarde", escribió Toirac, muy popular en la Isla por su personaje de Chivichana.
La suspensión no tiene rostro, afirmó el humorista. "Nadie es responsable, nadie orienta, nadie decide, nadie dice que le orientaron, nadie atribuye nada a nada. Los ideales que dicen defender 'hasta la muerte' quedan muy en entredicho", subrayó.
En opinión de Toirac, los decisores políticos y culturales del régimen solo tienen un arma: "el miedo infinito a las ideas diferentes y el poder cobarde".
No es la primera vez que la censura cultural en Cuba, como venganza por sus críticas en las redes sociales, ataca a Toirac de esta forma, sin dar la cara y con burdas justificaciones. En abril, los censores le impidieron participar en un espectáculo de Stap-up comedy en el teatro Bertolt Brecht, en La Habana. "No sé por qué me da la impresión de que la lista en la que estoy se pone más negra", escribió el humorista en su perfil de Facebook en aquel momento.
De igual forma, como represalia por sus críticas, en agosto de 2023, dos espectáculos en los que debió participar Toirac fueron censurados por las autoridades culturales al ver su nombre en el elenco.
En el contexto de las protestas sociales ocurridas en varias ciudades de Cuba el 17 de marzo, Toirac dijo en su perfil de Facebook: "Es una situación económica extrema la de un número cada vez más grande de personas, sin que se avizore un cambio drástico en el rumbo que nos pueda encaminar con algún mínimo de esperanzas. Más grave que la falta de esperanzas es la ausencia de avizorarla en el futuro".
"Me duele muchísimo que me tapen la boca porque se están perdiendo mi opinión. Yo no soy guerrero, jamás voy a decirle a la gente que salga para la calle o que se quede en casa. Incluso, si eliges cualquiera de las dos versiones y las haces correctamente, te apoyo", dijo Toirac en una entrevista reciente con DIARIO DE CUBA.
A pesar de la censura, el humorista aseguró a este diario que continuará hablando de los temas que preocupan, divierten o exasperan a los cubanos. Ante el estrés que supone el cierre de puertas laborales, Toirac dijo centrarse en la computación, e incluso en la música.
"Los Van Van es lo mejor que hay para la depresión. Cuando bailas esa música sudas todo lo malo que puedas tener por dentro. La sonrisa es lo último que puedes dejar quitarte, porque tu sonrisa es tu victoria", dijo a DIARIO DE CUBA hace pocos meses.
En eso estoy de acuerdo con el gobierno.
Efectivamente Glez, le están haciendo la vida imposible, quizás buscando que no le quede otro remedio que irse aún en contra de su voluntad, como él mismo, manifestó recientemente. Este hombre ha mantenido una posición digna y valiente, denunciando con su sátira a veces y otras más directo y frontal las barbaridades de la dictadura. Ha sido muy inteligente en hacerlo de una manera que aunque se compromete, se “cuida “de los represores. Cada cual tiene su forma y manera de manifestar su oposición y la de él es desde el humor, algo que molesta más a la dictadura. Aunque esto lo afecte económicamente, el sentirse libre da una satisfacción que vale la pena el sacrificio.
Pronto no le quedará otra opción que también irse de aquel infierno.