Los militares de Cuba buscan ahora más cooperación con la Fuerza Aérea de Bielorrusia

Una delegación militar de Cuba, encabezada por el comandante de la Defensa Antiaérea y Fuerza Aérea Revolucionaria (DAAFAR), visita Bielorrusia buscando estrechar los cada vez más frecuentes contactos entre los ejércitos de ambos países, aliados cercanos de Rusia.

De acuerdo con el Ministerio de Defensa bielorruso, la presencia de los cubanos responde a una "visita de trabajo" que incluyen negociaciones en las que participa el comandante de la Fuerza Aérea y de las Fuerzas de Defensa Aérea locales, general de división Andréi Lukyanovich.

Como es habitual, de estas reuniones no trascienden acuerdos. Según el canal de Telegram del Ministerio de Defensa bielorruso, en los encuentros "se produjo un amplio intercambio de puntos de vista sobre cuestiones relativas a una mayor cooperación".

Además, "las partes confirmaron su interés mutuo en desarrollar contactos entre la Fuerza Aérea y la Defensa Aérea".

En otro reporte, también escueto, se señaló "el carácter constructivo de la cooperación entre Bielorrusia y Cuba, y se resumieron los resultados intermedios de las actividades conjuntas anteriores en el ámbito de la cooperación militar bilateral".

Tanto Bielorrusia como Cuba tienen una alta dependencia de la tecnología militar soviética y rusa, sobre todo en lo que respecta a sus medios aéreos. Según el sitio Global Fire Power, que establece un ranking de las fuerzas armadas del mundo, la Isla posee 81 aviones y 18 helicópteros militares; de estos últimos, cuatro son de ataque.

Hace menos de 20 días, el primer viceministro de Defensa de Bielorrusia, Viktor Gulevich, estuvo de visita en Cuba. En esa ocasión, fue condecorado con la Orden Antonio Maceo de manos del ministro de las Fuerzas Armadas de la Isla, general de cuerpo de Ejército Álvaro López Miera.

Gulevich conversó con la cúpula militar de Cuba sobre la profundización de "áreas de cooperación militar mutuamente beneficiosas" y "confirmaron su interés mutuo en fortalecer aún más la asociación bielorruso-cubana".

En enero de 2024 tocó el turno al ministro de Defensa de la nación europea, Viktor Jrenin. De ese viaje trascendió que La Habana y Minsk firmaron documentos sobre la cooperación militar bilateral, aunque tampoco entonces se conocieron los detalles.

En Cuba, Jrenin fue condecorado con la Orden Nacional Playa Girón, que aprueba el presidente de la República y se otorga a personalidades destacadas "por su lucha contra el imperialismo y las fuerzas reaccionarias".

En 2023, López Miera fue recibido en Bielorrusia, una visita que se produjo apenas un mes después de que Minsk y La Habana anunciaran que militares de la Isla recibirían entrenamiento en la nación europea, el aliado más implicado en la invasión de Rusia contra Ucrania.

En noviembre pasado, representantes de las Fuerzas Armadas de ambos países acordaron un "proyecto de Acuerdo de Cooperación Militar y el Plan de Actividades Bilaterales para 2024", reportó entonces la agencia oficial bielorrusa Belta.

De esa reunión trascendió en medios bielorrusos que el régimen de Cuba estaría interesado en el suministro de armamento bielorruso, incluidas lanzaderas de misiles Polonez, con un alcance de hasta 300 kilómetros.

La alianza de Minsk con Moscú en su guerra de ocupación contra Ucrania, así como permitir la ubicación de armas nucleares estratégicas rusas en su territorio, sobre las cuales el Kremlin tiene el control absoluto, convierten a Bielorrusia en una base militar de su vecino.